xx - Instituto Nacional de Administración Pública, AC

32 REVISTA DE AOMINISTRACION PUBLICA
derecha de hacer las reclamaciones que juzguen
conveniente, las cuales debe resolver la
diputación á puerta abierta en el mismo plaza.
Respecta al moda de hacerse las elecciones,
la ley de 1837 encomendaba á las diputaciones
el señalar los diversos puntos á que han de
concurrir los electores en la provincia. Nuestra
opinion es que los distritos electorales deben
fijarse por ley y na estar á merced de las diputaciones.
Próxima el dia de la eleccion, el alcaide
avisa par media de un anuncia can 24
horas de anticipacion los locales donde los
electores han de reunirse. Estos, bajo la presidencia
del alcalde, concurren á la eleccion á
las 9 de la mañana y en la primera hora íntegra
nombran al presidente y cuatro secretarios
escrutadores, y pasada la primera hora nadie
tiene derecho á emitir sus votos para el nombramiento
de la mesa. El presidente y los escrutadores
son los únicos que tienen derecho
á leer las papeletas; y como es imposible saber
el número de electores que votan en uno y en
otro sentido, si estos individuos no desempeñan
su cargo con fidelidad, la eleccion es una
mentira. Para evitar en este punta toda sospecha
se da parte en la mesa á un individuo de
la minoría, la que se consigue votando solamente
tres secretarios y tomando por cuarto
al que lo sigue con mayor número de votos.
Constituida la mesa se separa el alcalde y
entra el presidente á ejercer sus funciones. Los
individuos de la mesa rubrican las papeletas
que han de servir en la eleccion y las dan á
cada uno de las electores para que escriban
los nombres de los diputados. El elector que
se halle imposibilitado de escribir su voto
puede valerse de otra elector para que se lo
escriba. Las elecciones duran cinco dlas, el
primero desde las 9 de la mañana hasta las 2
de la tarde, y los cuatro siguientes desde las 8
á las 2. A esta hora declara el presidente cerrada
la votacíon, se comienza el escrutinio y
cada una de los escrutadores va leyendo las
papeletas en voz alta y contando las votos que
los candidatos han obtenida. Verificada el escrutinio
en cada uno de los cinco dias, el siguiente
á las 8 se forma una lista de todas las
personas que tomaron parte en la votacion y
de los candidatos votados, con el número de
votos que ha tenido cada uno, de modo que
cualquiera pueda saber si el escrutinio está
bien ó mal hecho. El sexto dia á las 9 de la
mañana deben reunirse el presidente y cuatro
secretarios escrutadores para extender el acta,
en la cual harán una relacion circunstanciada
de lo que ha acontecida en los cinco dias de
eleccion, y luego un resúmen de los votos que
ha obtenida cada uno de los candidatos en
particular. Todas las dudas que ocurran al verificar
el resúmen se resuelven por la mesa.
Extendida el acta la firman el presidente y
el secretaria y la depositan en la secretaría de
ayuntamiento, hasta que nombrado, par cada
distrito un comisionado se reunen estos en la
capital y despues de sortear cuatro escrutadores
van dando cuenta á las juntas de las actas
por su órden, y esta va poniendo los reparos
que le parece. Aprobadas las actas se hace el
escrutinio general de los votos, y se extiende
un acta general donde consta todo lo que ha
pasada en la junta escrutadora y todas las personas
que han obtenido voto para diputados.
Todas las operaciones electorales de estas
juntas se deben verificar en público, sin que se
pueda tratar en ellas mas que de elecciones.
Cerraremos esta materia diciendo que par
la ley electoral vigente no se exige para ser