xx - Instituto Nacional de Administración Pública, AC

F. AGUSTIN SILVELA ESTUDIOS PRACTICaS DE ADMINISTRACION 221
su orígen de aquellos remotos tiempos, Zdeberemos
permanecer eternamente aferrados á la
legislacion del año 12 por lo tocante al régimen
económico-político de los pueblos?
¿Se teme robustecer un poder constitucional
suponiendole dominado por un poder bastardo?
¿Se temen las dictaduras y los golpes
de Estado? Nosotros raciocinamos de un modo
enteramente diverso: estamos muy distantes
de creer que la fuerza que se diese al primero
aprovechase al segundo. Precisamente por hallarse
débil y flaco; por no poder hacer nada,
absolutamente nada, por medio de sus gefes
políticos y de mas subalternos civiles, por eso
tiene un gobierno que apelar á los estados excepcionales,
á las armas, para hacerse obedecer;
por eso tiene que implorar el auxilio de
quien le subyuga al propio tiempo que le defiende.
El mayor enemigo de las dictaduras es el
poder Real: organicémosle bien; él se defenderá.
Hagamos nosotros buenas leyes orqarucas
sin temer los golpes de estado. Desde una influencia
extraña, indebida, hasta atacar abiertamente
la constitucion hay un abismo. Confiemos
en el pueblo español. Para ese inesperado
caso no se ha inventado ningun sistema de
organizacion administrativa: el alcalde constitucional
de cada pueblo está ya designado, el
mas valiente.
16. Impopular, tal vez: porque asi se ha
querido. Al pueblo se le adula, se le extravía y
pervierte tambien. Pero entonces cuantos se
hallan exentos de pasion; cuantos conocen la
verdad, tienen un deber mayor de combatir
preocupaciones funestas. Acaso verian coro-
nadas sus esfuerzos con un éxito feliz; y cuando
no, habrian cumplido con el pais á pesar
suyo. Así lo esperamos de los hombres de
bien de todos los partidos que piensen como
nosotros en la presente cuestiono
PLAN DE LA OBRA
10. Para cumplir por nuestra parte con lo que
de nosotros exigia una fe viva y un convencimiento
profundo, tuvimos la honra de proponer,
en las legislaturas de 1838 y 39, varios
proyectos de ley, que el congreso se dignó
tomar en consideracion, disolviendo tambien
el gobierno la comision que al efecto de preprarlos
tenia nombrada.
20. Proyectos, dictámenes, artículos aprobados
de la ley de ayuntamientos, todo ha
desaparecido con la disolucion de aquellas
cortes. Concluida una diputacion terminan
cuantos negocios pendian en el congreso, debiendo
comenzar de nuevo si fuesen promovidos
por el gobierno ó los diputados, exceptuándose
solo los códigos en cuyo exámen y
discusion se puede continuar.
Suponemos con algun fundamento, que el
gobierno presentará un nuevo proyecto de
ley orgánica de los ayuntamientos, teniendo
en cuenta los artículos votados ya por el congreso;
y creemos que no faltarán diputados
celosos que den un soplo de vida á las obras
que lo merezcan de la legislatura anterior. En
tal estado de cosas nos ha parecido que no
careceria totalmente de utilidad este trabajo,
que nos hemos apresurado á emprender, y á
dar por concluido, en el término de los dos
últimos meses.