xx - Instituto Nacional de Administración Pública, AC

B2 REVISTA DE AOMINISTRACION PUBLICA
jefes de los partidos, ocultar el mal que se haga,
teniendo ambos su parte en el pilIaje público.
Los partidos poi íticos se dirigen á los ciudadanos
por medio de lo que llamamos programas,
que no son otra cosa que la declaracion
de la conducta política que ofrecen seguir, en
caso de que lleguen al gobierno.
Si los jefes de partido declarasen siempre
abierta y honradamente sus opiniones é intenciones,
y si los partidos postulasen siempre
como candidatos á los hombres más capaces,
el deber de los ciudadanos seria demasiado
sencillo; pero un programa polltico no es de
ordinario más que un juego ingenioso de palabras,
fraguado con la intencion de atraer á los
hombres de opuestos sentimientos; y en consecuencia,
los candidatos propuestos no son
hombres de principios firmes y reconocidos.
En tales casos, el ciudadano tiene que elegir el
menor de los males y consolarse con el pensamiento
de que un país no será mal conducido
cuando el pueblo, al menos no tiene que decidir
sobre principios vitales. Es enteramente
cierto que en un gobierno libre, como en el
nuestro, la ineptitud y la corrupcion serán
castigadas por el pueblo, tan luego como el
peligro sea real é inminente. La reforma de los
males es un trabajo lento en un Estado libre,
porque la masa del pueblo se ocupa de sus
propios negocios y se encierra en sus hábitos
y en sus opiniones, lo que da por resultado
que no le gusten los grandes y repentinos cambios,
aunque aparezcan como mejoras importantes.
Este espíritu es admirable: aunque inconveniente
y á veces costoso, da estabilidad
á las instituciones poi íticas y sociales, y la estabilidad
es una condicion principal de progreso,
lo que otros han explicado, diciendo
que el órden y el progreso son condiciones
esenciales de toda sociedad. La nacion mexicana
hubiera llegado á establecer los principios
de la Reforma de una manera pacífica, aunque
lenta, si no fuera porque viendo venir ese
cambio inevitable, el partido clerical, deseando
conservar sus privilegios, atentó contra la
existencia de la República, como nacion soberana.
Entónces estalló la revolucion, y el país
consintió en que la Reforma se llevase á cabo,
de una manera rápida y repentina.
XI
QUIENES VOTAN Y POR QUE
Las mujeres y los menores de edad no tiene
voto en la República Mexicana, porque aquellas
no dependen de sí mismas, siendo de creer
que votarian bajo coaccion, y no conforme á
su juicio particular. En cuanto á los menores,
como la ley, de acuerdo con la naturaleza, no
les concede sagacidad para manejar sus negocios,
es claro que no deben tenerla para los
asuntos públicos.
El sufragio de los hombres está fundado en
la justicia y es necesario para la conservacion
de la paz en la nacion. Por virtud dándo voto,
cada hombre tiene influencia propia en los
negocios que son comunes á todos los ciudadanos;
si es vencido en la eleccion, aun aSI
debe quedar satisfecho, porque tiene la esperanza
de vencer á sus adversarios cuando la
minoría á que pertenece se convierta en rnayorla
por lo elevado de sus miras, por la práctica
de las virtudes cívicas y por la energia en
el cumplimiento de los deberes.