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F. DE PAULA MADRAZO MANUAL DE ADMINISTRACION 1111 25
público del país, otras con la existencia de la
persona moral ayuntamiento considerada como
particular; en las primeras debe tener intervencion
el gobierno; en lassegundas no debe
tener ninguna. Cuando se trate de una ordenanza
municipal, de imponer una contribucion,
de abrir un camino nuevo ó mejorar uno
antiguo, de establecer ferias y mercados, como
todos estos puntos se rozan con el derecho
público, la intervencion del gobierno central
es indispensable. Pero se trata por el contrario
del arrendamiento de una finca hecho por la
municipalidad, se trata de mejoras locales,
como empedrar una calle, establecer una fuente,
y en esto debe entender exclusivamente el
ayuntamiento con apelacion á la diputación,
porque se trata solo de intereses municipales,
que nada tienen que ver con los públicos. Es,
sin embargo, necesario que aun en estos asuntos
independientes del poder central tengan
cierta dependencia de otras corporaciones
populares, ora se llamen diputaciones Ó juntas
de provincia. Los diputados provinciales, hijos
de los mismos pueblos de donde proceden los
ayuntamientos, tienen gran conocimiento de
la localidad é interés en las mejoras que se
proyecten, pudiendo por estas circunstancias
resolver con tino y prudencia toda esta clase
de negocios.
En la imposibilidad de designar hoy cuál es
el derecho positivo que rige en materia de organizacion
y atribuciones de los ayuntamientos
por no estar todavía puesta en práctica la legislacion
formada por las Cortes constituyentes
de 1854, nos limitaremos a fijar aquí lo que
en buenos principios constituye por lo general
la organizacion y atribuciones municipales.
Los ayuntamientos se componen del número
de concejales que les corresponde con arre-
glo á la escala de poblacion que fija la ley.
Cuando el distrito de un ayuntamiento se
compone de varias parroquias, feligresias ó
poblaciones apartadas entre sí, se nombra un
alcalde pedáneo para cada una de ellas. Los
cargos de alcalde, teniente de alcalde y regidor
son gratuitos, honoríficos y obligatorios. Los
de alcalde y teniente suelen durar dos años, el
de concejal cuatro. Todos los concejales se
renuevan por mitad cada dos años; los que
dejan de ser alcaldes ó tenientes continúan
perteneciendo al ayuntamiento si no han cumplido
los cuatro años de concejal.
Los ayuntamientos son elegidos por los vecinos
de los pueblos que se hallan incluidos
en la lista de electores, cuya cualidad tienen
los que pagan mayores cuotas de contribucion
hasta el número de individuos que determina
la escala. Tienen tambien derecho á votar los
individuos comprendidos en cierta clase que
designamos con el nombre de capacidades. En
los pueblos que no pasen de 60 vecinos, todos
los electores son elegibles. En los que no pasan
de mil, las dos terceras partes de los electores
contribuyentes; en los que exceden de mil son
elegibles la mitad de los electores contribuyentes.
La lista de electores elegibles formadas
por los alcaldes asociados á dos concejales y
dos mayores contribuyentes, con sujeción á
los datos estadísticos de contribuciones y repartimientos,
son permanentes y sirven para
todas las elecciones con las rectificaciones
oportunas. Todos los años de eleccion general
se exponen al público en 45 días, y todo elector
está facultado para dirigir al alcalde las
oportunas reclamaciones por omision ó inc1usion
indebidas, que aquel decide bajo su
responsabilidad, pudiendo apelarse de esta
decision al gobernador, quien decide definitivamente.
Los no comprendidos en las listas