su historia y sus consecuencias - Unesco
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LA RUTA DEL ESCLAVO EN EL RÍO DE LA PLATA: SU HISTORIA Y SUS CONSECUENCIAS<br />
se erigieron ciudades en Argentina y en Uruguay, sino que ponen en evidencia <strong>su</strong> variedad y<br />
riqueza cultural, las que pese a todas las dificultades y vicisitudes que <strong>su</strong> condición les obligó a<br />
resistir, lograron influir en la sociedad dominante. Así, <strong>su</strong> herencia cultural sobrevive en el<br />
modo de vida y en la idiosincrasia de los rioplatenses. Diversos aspectos de la cultura occidental,<br />
sellan la incorporación de los afrodescendientes al nuevo continente como ciudadanos<br />
americanos.<br />
Tanto en Uruguay como en Argentina, los esclavizados africanos y <strong>su</strong>s descendientes<br />
participaron en todas las batallas, guerras civiles y por la independencia que acontecieron principalmente<br />
a lo largo del siglo XIX.<br />
Finalizada la Guerra Grande, el negro “libre” comienza <strong>su</strong> dificultosa integración en la<br />
sociedad. Ubicado en el nivel inferior de la escala social, <strong>su</strong> ascenso se ve obstaculizado por <strong>su</strong><br />
escasa o ausente educación, por <strong>su</strong> pobreza material, por <strong>su</strong> desventajosa competitividad con los<br />
inmigrantes europeos que llegan masivamente y mejor preparados a nuestras costas. Sin embargo,<br />
casi imperceptiblemente, los negros comienzan a dejar el sello indeleble de <strong>su</strong> cultura ancestral<br />
en la población uruguaya.<br />
Las mujeres afrouruguayas tuvieron un importante rol como amas de leche y nodrizas.<br />
Por medio de ellas lograron conservarse y trasmitirse cuentos, leyendas y costumbres africanas a<br />
las familias que las poseían como signo de estatus. Gozando de plena confianza entre <strong>su</strong>s amos,<br />
las amas de crianza conocían los secretos de la familia a la que pertenecían.<br />
Narraban fábulas que en el Río de la Plata se conocen como la <strong>su</strong>perstición del lobizón,<br />
las leyendas de las lagunas bravas y de los negros del agua, de Mandinga, diablo o duende que<br />
posee un maleficio, del “Negrito del pastoreo” o “santito de lo perdido” y el juego infantil de la<br />
“ronda katonga”.<br />
Dentro de las tareas de las afrouruguayas, se menciona que fueron cocineras, lavanderas,<br />
vendedoras de los productos más variados, mazamorreras, pasteleras, torteras, floristas, etcétera.<br />
Los hombres fueron peones, cocheros, artesanos, faroleros, panaderos, zapateros, vendedores<br />
de escobas y plumeros. Muchos de ellos fueron soldados, la mayoría de tropa, llegando<br />
algunos a ser oficiales.<br />
En la región rioplatense varias palabras bantúes dejaron <strong>su</strong> sedimento en el lenguaje<br />
corriente: bombo, batuque, bunda, bujía, cachimba, catinga, cafúa, conga, candombe, dengue,<br />
mandinga, malambo, matungo, milonga, mucama, quilombo, mondongo, etcétera.<br />
A lo largo del siglo XIX, en forma similar a lo ocurrido en Argentina, en Uruguay se<br />
verifica la publicación de periódicos negros, de efímera circulación.<br />
En el siglo XX, el negro encuentra <strong>su</strong> camino de ascenso social por medio del deporte,<br />
fútbol y boxeo, así como de la música. Muy poco se logra por el ingreso a la Universidad y a la<br />
Escuela Industrial. Se publican algunos diarios y revistas y se crean instituciones sin fines de<br />
lucro.<br />
Ejemplos de los diarios publicados son: “Ecos del porvenir”, en 1901; “La verdad”, entre<br />
1911 y 1914; “Acción”, en la ciudad de Melo (departamento de Cerro Largo). Entre las revistas<br />
están: “La vanguardia”, en 1928; “Nuestra Raza” en dos períodos, uno en la década del 10 y otro<br />
entre 1933 y 1948; “Bahía-Hulan-Jacks”, entre 1958 y 1996 y “Mundo-Afro”, en 1988.<br />
Tomás Olivera Chirimini<br />
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