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La señora ROSALBINA LEON manifestó que su hija “…tenía 1.50 de
estatura, mona o castaño claro, pelo recién cortado como de hombre, tez
blanca, ojos color claro, delgada, lunar en el pómulo derecho cerca a la oreja,
narizona, caja en el maxilar superior, solamente tenía tres muelas y el resto era
postiza y de abajo no tenía sino los del frente y como dos o tres muelas pero no
tenía puente ni caja. Vestido azul y rayas negras a lo largo y un saco rojo en
lana y media velada, un bolso negro grande y otro negro pequeño por dentro”.
Descripción de prendas que concuerda con la hecha por JOSE
ESTEBEN CARDENAS MARTINEZ, quien la describió con “vestido
azul a rayas negras, un saco rojo, bolso negro, aparte de eso ellas traían unos
vestidos para usar dentro de la cafetería, pero no se cómo eran.”.
Por lo anterior, aduce, se puede inferir que efectivamente LUZ
MARY PORTELLA DE LEON ingresó al Palacio de Justicia a
realizar las labores de reemplazo de su señora madre, pero la
Fiscalía no aportó prueba alguna que permita colegir que salió con
vida del Palacio de Justicia, por lo que no se puede afirmar que fue
desaparecida, y menos que su prohijado lo hizo.
Respecto de BERNARDO BELTRAN HERNANDEZ tampoco existe
controversia alguna de su presencia al interior del Palacio de
Justicia, pues laboraba como mesero de la Cafetería.
La Fiscalía da por probado que salió con vida por varios
reconocimientos realizados por algunos familiares, entre los que se
encuentra el de SANDRA BELTRÁN HERNÁNDEZ en declaración
rendida el 26 de agosto de 2007, quien afirmó haberlo identificado al
ver sus pantalones y una persona con la contextura de su hermano,
por su forma de peinarse y por salir con un pantalón negro y camisa
blanca.