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paginario, indicando que las comunicaciones que tuvo con él fueron
para temas como la comida de los soldados, oficiales y suboficiales,
comunicación con las casas para informar que se encontraban bien
y de pronto para envío de ropa. Respecto a la frase “Esperamos que si
está la manga, no aparezca el chaleco”, simplemente dice que “hay
personas que les gusta hablar con parábolas, dichos o modismos” y el
Coronel SADOVNIK tenía esa costumbre 299 .
En resumidas cuentas, el Coronel SANCHEZ RUBIANO,
contrariando la lógica y la razón, pretende negar el ejercicio de la
función normal y rutinaria para la que precisamente estaba asignado
como Comandante del B-2 de la Brigada: generar inteligencia
estratégica, táctica y de combate sobre sus tres elementos:
enemigo, tiempo y terreno.
De manera bastante evasiva y contrariando lo informado incluso por
otros miembros de la institución militar, procura minimizar la labor
del B-2, y particularmente la suya, durante los acontecimientos del
Palacio de Justicia, cuando, por el contrario, el Coronel PLAZAS
VEGA manifiesta que las personas evacuadas de la edificación
judicial se direccionaban a la Casa del Florero “… para que pasaran
todos por el filtro de control del Coronel SANCHEZ RUBIANO, B-2 de la
Brigada" 300 , “porque no nos interesaba que de pronto se nos fuera algún
guerrillero para otra parte” 301 .
Al comentar el procedimiento del B-2 frente a los rehenes, el
Coronel PLAZAS VEGA señala que SANCHEZ RUBIANO tenía
unas personas que hacían un breve cuestionario a cada liberado,
tenía gente de otras instituciones para ayudar a identificar a los
evacuados y tenía contacto telefónico con otras entidades de
299 Folio 234 cuaderno original 7 de instrucción.
300 Folio 187 original 4 de instrucción.
301 Folio 188 ibídem.