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coordinando con un personal del Grupo de Inteligencia lo relativo a la
identificación de las personas que comenzaron a ser evacuadas del interior del
Palacio, actividad esta que se continuó al día siguiente.”; LISANDRO
JUNCO ESPINOSA, capitán de la Policía Nacional adscrito a la
SIJIN, en cuanto expresó: “al siguiente día a las siete de la mañana el
señor MAYOR GAÑAN Sub-Jefe de la SIJIN, me ordenó trasladarme a la Casa
del Florero, con el objeto de tomar datos sobre el personal que era evacuado de
dicho Palacio…”, y LUIS MIGUEL MARTIN JIMENEZ, suboficial de la
Policía Nacional adscrito a la SIJIN, quien manifestó: “…yo fui
trasladado aproximadamente a las veinte horas a la Casa del Florero con el fin
de servir como secretario para tomar los datos personales de las personas que
iban siendo rescatadas del Palacio de Justicia, esa fue toda mi actividad. El día
siete aproximadamente a las 14 horas nuevamente me ordenaron trasladarme a
la Casa del Florero con el fin de continuar con esa misma actividad hasta que
salió la última persona de los rehenes. Las personas suministraban el nombre y
apellidos completos, el número de cédula o documento de identidad, la
dirección de residencia y teléfono y el grado y cargo que desempeñaban en el
Palacio de Justicia, a muy pocos se les pidió documentos de identificación,
porque algunos no los portaban y se estimaba que no era necesario puesto que
eran trasladados por personal de las fuerzas armadas directamente a dónde yo
estaba…”.
De manera, no es cierto que el Ejército Nacional controlara en su
totalidad las actividades desarrolladas en la Casa del Florero; que
se hayan encargado de las labores de identificación y control de las
personas rescatadas con vida del Palacio de Justicia, ni que haya
sido el único organismo del Estado encargado de las labores de
control e identificación de los liberados.
Tanto la Policía Nacional, por intermedio de la DIJIN y la SIJIN, así
como el DAS participaron activamente en las actividades de
inteligencia llevadas a cabo en la Casa Museo del Florero. Es más,
como se desprende de la declaración de EDGAR TORRES
ZETABOBO, agente de la Policía Nacional adscrito a la SIJIN, quien