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Potosí, mediodía del domingo 25 de noviembre, 1810:

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NoticiasBolivianas.com - El portal <strong>de</strong> noticias <strong>de</strong> COMECO<br />

luego se retiró. Después <strong>de</strong> todo no era nada extraño que algunos comerciantes y<br />

arrieros llegaran o salieran <strong>de</strong> la villa al anochecer. Quitados los cencerros, Pueyrredón<br />

dispuso que los hombres que cargaban las mulas salieran <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> esos animales, para<br />

proteger la retaguardia; en tanto él iría por <strong><strong>de</strong>l</strong>ante, con los cinteños; a<strong>de</strong>más había<br />

dispuesto que un oficial clavase los dos cañones que habían en la plaza mayor,<br />

inutilizándolos. Cerca <strong>de</strong> las dos <strong>de</strong> la madrugada, aparecieron por ahí dos borrachos<br />

que se pusieron a contar las mulas que pasaban. Pueyrredón or<strong>de</strong>nó su <strong>de</strong>tención,<br />

amordazándolos por los gritos que proferían, protestando contra las autorida<strong>de</strong>s <strong><strong>de</strong>l</strong><br />

Cabildo. En la casa <strong>de</strong> la Moneda, la operación era lenta y tediosa, por el cuidado que<br />

ponían los comisionados en el rotar <strong>de</strong> las mulas, contando y recontando no sólo los<br />

bultos, sino también las bestias <strong>de</strong> carga, que entraban a un amplio galpón y luego salían<br />

al patio con sus talegos a cuestas. Ahí en el patio, a la luz <strong>de</strong> la luna –pues las bujías se<br />

habían consumido-- se distribuían los grupos <strong>de</strong> acuerdo al valor y la importancia <strong>de</strong> su<br />

cargamento; algunas mulas llevaban camuflado el oro en medio <strong>de</strong> vituallas y víveres,<br />

aspecto que tomaban muy en cuenta Mariano Ventura y Juan Altamirano. Entre las idas<br />

y venidas <strong>de</strong> las mulas, habían logrado distraer a los comisionados, <strong>de</strong>splazando a otro<br />

lugar siete mulas con su valioso cargamento.<br />

Una vez tomadas todas las avenidas <strong>de</strong> la plaza y reunidas en ellas las cargas, a<br />

eso <strong>de</strong> las cuatro <strong>de</strong> la madrugada, Pueyrredón dio la or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> salir <strong>de</strong> la ciudad,<br />

colocando su fuerza <strong>de</strong> vanguardia y retaguardia en los lugares convenidos. El<br />

comisionado Roque Quiroga se dio cuenta <strong>de</strong> que faltaban siete mulas y, junto a tres<br />

hombres, entre los que se ofrecieron cooperar Mariano Ventura y Juan Altamirano,<br />

volvieron a recorrer la ruta que siguieron, hacia la Casa <strong>de</strong> la Moneda, en busca <strong>de</strong> esos<br />

animales. Ventura y Altamirano hicieron lo posible para <strong>de</strong>spistar al comisionado,<br />

Página <strong>25</strong>2 <strong>de</strong> 295 La Saga <strong><strong>de</strong>l</strong> Esclavo – Adolfo Cáceres Romero

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