Descargar archivo PDF - AHTeR
Descargar archivo PDF - AHTeR
Descargar archivo PDF - AHTeR
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Nosotros los Arquitectos<br />
tales es porque tienen el sentido del juego, han incorporado el habitus. Dice Bourdieu que los<br />
agentes no son sujetos frente a un objeto (o, menos aún frente a un problema) que estaría<br />
constituido como tal por un acto intelectual de conocimiento; están, como se dice, metidos de<br />
lleno en su quehacer están presentes en lo por venir, en lo por hacer. El quehacer (pragma en<br />
griego), correlato inmediato de la práctica no se plantea como objeto de pensamiento, como<br />
posible meta a alcanzar en un proyecto, sino que está inscripto en el presente del juego. 9<br />
También es significativo advertir que en el sujeto participante del juego en un determinado<br />
campo percibe de acuerdo al habitus, que es propio de los agentes de ese campo. De este<br />
modo las anticipaciones pre-perceptivas, que Bourdieu define como “especies de inducciones<br />
prácticas basadas en la experiencia anterior”, pertenecen al habitus como sentido del juego.<br />
Tener el sentido del juego es tener el juego metido en la piel; es dominar en estado práctico el<br />
futuro del juego; y también es tener el sentido de la historia del juego. Así como el mal jugador<br />
siempre va a destiempo, siempre demasiado pronto o demasiado tarde, el buen jugador<br />
es el que anticipa, el que se adelanta al juego. ¿Por qué puede adelantarse al curso del juego?<br />
Porque lleva las tendencias inmanentes del juego en el cuerpo, en estado incorporado: forma<br />
cuerpo con el juego. 10<br />
Para ejemplificar utiliza el deporte y dice: “Aquel que manda una pelota a contrapié actúa<br />
en el presente con referencia a un por venir que es cuasi presente, que está inscrito en la<br />
fisonomía misma del presente, del adversario corriendo hacia la derecha”. 11 Según la teoría de<br />
la acción el agente no inscribe ese futuro en un proyecto: “puedo ir a la derecha o puedo no<br />
ir”, sino que coloca la pelota en la izquierda porque su adversario va a la derecha, porque en<br />
cierto modo ya está en la derecha. Es decir para Bourdieu el “hacer” del agente “se determina<br />
en función de un cuasi presente inscrito en el presente”.<br />
Esta posición es la contraria a la que identifica los comportamientos de los agentes en<br />
una conciencia calculadora absolutamente racional, desde una perspectiva utilitarista. Para la<br />
teoría de la acción, los agentes que se pelean por los fines considerados importantes pueden<br />
estar “poseídos” por esos fines. Pueden estar dispuestos a morir por esos fines, independientemente<br />
de toda consideración de beneficios específicos, lucrativos, de carrera, o de otro tipo.<br />
Tampoco es válido reducir los fines de la acción a los fines económicos. En el fundamento<br />
de la teoría de los campos –dice Bourdieu– está la constatación de que el mundo social<br />
es el lugar de un proceso de diferenciación progresiva. En las sociedades arcaicas y aún hoy<br />
en muchas sociedades precapitalistas, universos sociales que están diferenciados entre nosotros,<br />
permanecen indiferenciados, de modo que se observa una polisemia y una multifuncionalidad<br />
en las conductas humanas que pueden interpretarse a la vez como religiosas, como<br />
económicas, como estéticas, etc.<br />
Los campos no son sino universos diferenciados, con leyes propias, mundos autónomos,<br />
producto de la evolución de las sociedades. 12 Las sociedades modernas contienen uni-<br />
9 Pierre Bourdieu. Razones prácticas. Sobre la teoría de la acción. Anagrama, Colección Argumentos, Barcelona, 1997, p. 145.<br />
Remitimos al desarrollo de las trayectorias ejemplares donde los actores son jugadores con las reglas de juego incorporadas.<br />
10 Remitimos al desarrollo de la reproducción del habitus en la formación universitaria en las prácticas profesionales para<br />
comprender esta incorporación gradual, naturalizada e infra-consciente de los componentes del habitus.<br />
11 Ibídem.<br />
12 Estas leyes fundamentales, dice Bourdieu, son a menudo tautologías: la del campo económico, que ha sido elaborada por<br />
los filósofos utilitaristas: los negocios son los negocios; la del campo artístico, que ha sido planteada explícitamente por la llamada<br />
escuela del arte por el arte: el arte no tiene más fin que el arte.<br />
283