presencia del pensamiento acalitense contemporneo xi - UNAM

sustancialmente la inmigración. La ilegitimidad no fue en todos los núcleos igual; el
que más se acercó fue el mestizo que se diluyó a lo largo del siglo al corregirse la
ilegitimidad. En cierto momento la amplitud del fenómeno de ilegitimidad puede
parecer en Aguascalientes chocante, si pensamos en lo que para aquella sociedad
fue tan importante el matrimonio. Sin embargo, las cifras encontradas en los libros
no siempre lo atenúan; pero no es tan determinante y claro, en cuanto que tienen
su origen en la importante introducción de esclavos africanos por las elevadas
uniones libres. Encontramos que constituyen un neto contraste con el
comportamiento de la población rural, y más concretamente la indígena, que
desarrolla actividades terciarias y servicios en las que aparece como recurso
constante la mano de obra femenina, doméstica o servil. Precisamente de éstas
van a nacer la mayor parte de hijos fuera del matrimonio.
En los núcleos criollos, encontramos un máximo respecto hacia ciertas reglas
religiosas y sociales. La mujer de castas vivía casi siempre sin casarse y una de
cada seis esclavas no tuvieron marido conocido; incluso en el caso de ser liberta o
haber nacido libre se consideraba mancillada por la mancha original que
acompañaba su ascendencia servil. Hay que decirlo, la superposición ilegitimidadesclavitud
se empezó con más fuerza, pues cerca de las cuatro quintas partes de
los esclavos aparecen como ilegítimos. En fin, el entrecruzamiento de razas se dio
principalmente a través del concubinato; hasta podemos decir que esta marca
ilegítima marchaba con fuerza propia; formaba parte de las costumbres, de la
realidad de la sociedad local.
El objetivo de este análisis aproximado es tratar de llegar a una dinámica
poblacional local, la de Aguascalientes en sus primeras escasas ocho décadas de
vida, utilizando las fuentes archivísticas de los registros parroquiales, que
confirmamos con este primer padrón que conocemos, que muestra su estado
demográfico en un momento dado y permite, al mismo tiempo hacer algunas
apreciaciones sobre su posible evolución. Conocer la dinámica del aumento
habitacional del núcleo urbano y rural de Aguascalientes se vuelve particularmente
interesante si tenemos en cuenta su desarrollo desde los orígenes. Las
conclusiones a que el lector pueda llegar aquí deberían ser consideradas como
hipótesis aplicadas únicamente a esta región y a un momento; pero dentro de lo
hipotético pretenden proporcionar una luz para investigaciones futuras que
permitan llegar a conclusiones más profundas.” 80
Posteriormente sobre el documento hace las siguientes apreciaciones: “El
documento fascimilar que acompaña a estas notas "Padrón y lista de todos los
vecinos de esta dicha Villa de Ntra. Sra. de la Asunción de Aguascalientes y su
jurisdicción así de confesión y de comunión y demás personas con distinción de la
casta y linaje de cada uno" consta de 14 fojas, incluida la que lleva el titulo y sirve
a la vez de portada, no tiene encuadernación especial y se conserva completo en
el Archivo Histórico de Aguascalientes, Fondo: Adquisiciones. Se trata,
evidentemente de un censo local que incluye la población de toda la jurisdicción
parroquial en 1648; su estructura es muy parecida a los conocidos de otras partes
de entonces. Está organizado por casas y va listando individuo por individuo,
80
Gutiérrez G. José Antonio. “Padrón parroquial de Aguascalientes 1770”, Aguascalientes, Archivo Histórico
de Aguascalientes, 2001.
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