presencia del pensamiento acalitense contemporneo xi - UNAM

Les pide tomen en este sentido la doctrina por ser la que enseñó y practicó San
Buenaventura para entrar en los gozos eternos de la gloria.
La obra está dividida en dos partes. La primera la conforman 20 capítulos y versa
de la instrucción y doctrina con que se han de crear los nuevos religiosos de la
provincia de los Descalzos de san Diego de la Regular Observancia de los
Menores de la Nueva España. La segunda parte que consta de 23 capítulos, trata
de los oficios de comunidad.”
quienes
estro de novicios le avise del modo de proceder, para que
e la persona y ropa.
hebdomadario, que anunciaba en la tabla los oficios del convento
lina
ez, cual era la de
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En seguida hace una síntesis del contenido, dice que el capítulo uno de la primera
parte se refiere a lo que ha de hacer quien pide el hábito en la Provincia,
deben tener por unos días su hábito secular, sean examinados y se vea el espíritu
que traen y que se preparen examinando su conciencia, confesando y
comulgando, y el ma
después de tener el hábito no pretenda ignorarlo. Los capítulos dos y tres tratan
de cómo debe el novicio pedir el hábito y aviso para tomarlo. En los siguientes
capítulos están las normas para prepararse al vicio y a los oficios divinos, como
entrar al coro y estar en él. Se les recuerda que el hebdomadario siempre tañe la
campana para que todos se recojan en si mismos a oficios. El comportamiento del
religioso en el convento. La limpieza d
Los capítulos siguientes se refieren al comportamiento personal del religioso quien
debe ser templado en el comer y beber y recomienda que norme su vida religiosa
por la templanza incluyendo el ejercicio de las penitencias en la Orden. El último
capítulo de la primera parte habla de la oración y perseverancia en la virtud.
La segunda parte de la Instrucción versa sobre los oficios divinos en la comunidad:
los oficios del
cada sábado para la semana siguiente; los cantores, que programaban todo lo que
en el coro se debía rezar de noche y de día; el lector, que daba las señales para el
rezo del oficio y el acólito, cuya función era acompañar al hebdomadario.
El último capítulo tiene algunas advertencias particulares, referente a la discip
o penitencia de comunidad y a la Benedicta u oración para bendecir la comida al
sentarse a la mesa.
En sus Conclusiones, el autor dice que: “la Instrucción y Doctrina de Novicios es
un texto sencillo, claro y sin rebuscamientos. La idea y espíritu del autor es de
enseñanza: enseñar a los novicios 1o necesario para introducirlos a la vida
religiosa. En este orden de ideas es un texto pedagógico, pero totalmente
apegado a la Regla, Constituciones y costumbres que los Franciscanos
observantes o descalzos guardaban.
El autor maneja diversas herramientas para mover el corazón de los novicios a la
perfección; sobre todo exalta la vida de perfección, de caridad, de penitencia y de
pobreza. Para mejor convencer trae frecuentes ejemplos de su fundador y de
quienes implantaron la vida de observancia. En fin, procura que el novicio,
después del año de prueba, esté preparado para la vida de rigid
los dieguinos.
Mas allá de un compromiso docente, evidencia el autor un deseo de imbuir un
verdadero espíritu de la observancia; y para hacer más efectivas sus enseñanzas,
118 Ibdem. Pp. 80-81.
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