presencia del pensamiento acalitense contemporneo xi - UNAM

de tanta gravedad e importancia para el servicio de Dios y el bien de los pueblos
de los indios". En el asunto de las huérfanas no es menos exigente, porque muy
pocas veces se castigaba al culpable de su deshonra; de ahí la especial
recomendación porque el cura coloque "a las huérfanas indias entre gente que
cuide de ellas, las enseñen "labores mugeriles y oficios" con que puedan vivir por
sí y ganar en su trabajo honesto y decente para su sustentación", mientras
llegaban al estado de matrimonio.
Como ocurriría en la comunicación documental, las visitas observaban cierto
orden; es decir, seguían determinadas "veredas". La diócesis había sido dividida
desde su origen en 4; estos pueblos visitados por Mateo José parte corresponden
a la tercera o "de tierra caliente" y parte a la cuarta. Como el lector apreciará, se
mezclan parroquias y doctrinas; es decir, que la presencia de los frailes tenía aún
su importancia. En nuestro caso son franciscanos los llamados "doctrineros", a
cuyo cuidado se encontraban principalmente pueblos indígenas. Como había
manifestado D. Diego Rodríguez Rivas a lo largo de su episcopado, Mateo José
hace énfasis en la vida comunitaria practicada por los pueblos indígenas; también
nos congratulamos de que se empeñara porque donde existía una labor educativa
ésta continuara; y donde no la había, se abriera. Era el espíritu ilustrado que tan
profundamente había calado en él. Los cuademos de visita aquí comentados,
guardan gran uniformidad en el desarrollo de los temas tratados. Es conveniente
hacer notar, que éstos que son encargo expreso, contienen mucha iniciativa
inquisitorial; y ésto es una aportación personal del de Ciénega de Mata. Quizá por
eso en determinados tópicos resulta su trato perfecto y, por lo mismo, merecen
nuestra admiración. Y es que contienen tal justificación, puntualidad, acercamiento
y prevención, que satisface cualquier tipo de exigencia en cuanto a informes sobre
población y problemática particular de cada una de las comunidades parroquiales
visitadas.
También quiero hacer hincapié en que, aunque se trata de una serie de visitas, de
una serie de jurisdicciones en que la diócesis convencionalmente había sido
parcelada: parroquias, doctrinas y misiones, podemos decir que verdaderamente
se trata de una corografia o descripción pormenorizada de un territorio en que
también se abordan asuntos políticos. No tenemos ejemplos anteriores tan
perfectos en el área política, sino hasta Mateo José con su Descripción de la
Diócesi de Guadalaxara de Indias más de una vez mencionada; esta me parece
un ejemplo inimitable, porque el de Ciénega de Mata redacta la provincia con un
criterio preciso y sistemático. Por algo las decenas de cuadernos de visita del
Señor Rodríguez Rivas serán materia prima y modelo a seguir para él. No hay que
olvidar que tanto el obispo como el laguense eran hombres ilustrados y conocían
los trabajos que por las mismas fechas se estaban desarrollando en Europa.
Aunque no podemos calificar a estos Cuadernos como trabajos de geografía o
historia regional, porque no los concibió así Mateo José, tienen mucho de eso,
porque abordan el estudio del hombre -de los hombres- y su medio físico y social y
la interacción de ambos. Presenta el esquema de cada parroquia con prosa
concisa y estilo elegante; y en momentos enumera características ajenas a los
asientos de una visita pastoral. Pocos puntos y asientos escapan al interés del
autor; lo que permite apreciar en el de Ciénega de Mata un magnífico observador
o captor de información y problemas. Las materias y asuntos de algunos de los
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