DAROS, W. R. Filosofía de una teoría curricular - William R. Daros
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Mediante el aprendizaje modificamos y corregimos nuestras expectativas<br />
falibles, nuestras esperanzas y refutamos nuestras conjeturas. De<br />
este modo, adquirimos negativamente nueva información sobre lo que no es<br />
el mundo, sobre cómo no <strong>de</strong>ben hacerse las cosas, y conjeturamos nuevas<br />
soluciones, teóricas y prácticas, siempre falibles. Incluso los errores son<br />
didácticamente útiles en cuanto pue<strong>de</strong>n estimular la crítica y el <strong>de</strong>seo <strong>de</strong><br />
acercarse a la verdad 243 . De un error, en sí mismo, no apren<strong>de</strong>mos nada;<br />
apren<strong>de</strong>mos <strong>de</strong>l advertir y reconocer que hemos errado. El aprendizaje es,<br />
pues, a un tiempo intelectual y moral: implica tomar conciencia <strong>de</strong>l error y<br />
admitir que hemos errado.<br />
Apren<strong>de</strong>mos, pues, no solo nueva información negativa (cómo no es<br />
el mundo a pesar <strong>de</strong> nuestras conjeturas) o información positiva acerca <strong>de</strong><br />
como parece ser el mundo (información, por otra parte, siempre hipotética,<br />
a pesar <strong>de</strong> las corroboraciones), sino también nuevas habilida<strong>de</strong>s, actitu<strong>de</strong>s<br />
o comportamientos, nuevas formas <strong>de</strong> dominio <strong>de</strong> nuestro ser, y esto es<br />
altamente educativo.<br />
15. Por ello, el aprendizaje no es solamente información, sino forma-<br />
ción <strong>de</strong>l sí mismo personal: mediante la experiencia interactiva con la sociedad,<br />
la cultura y sus problemas, cada uno se da su propia forma <strong>de</strong> ser y<br />
comportarse. Más aún, la educación no consiste solo en el resultado irremplazable<br />
<strong>de</strong> cada uno, en el logro <strong>de</strong> <strong>una</strong> forma <strong>de</strong> ser (estructuración); sino<br />
también en un constante proceso <strong>de</strong> crítica intersubjetiva que frustra (<strong>de</strong>sestructuración)<br />
o corrobora nuestras expectativas o logros y nos exige <strong>una</strong><br />
constante tarea <strong>de</strong> darnos <strong>una</strong> forma <strong>de</strong> ser propia y relativamente estable<br />
(restructuración). Mas la educación no consiste en apren<strong>de</strong>r algo (<strong>de</strong> historia<br />
o geografía, lo que es propio <strong>de</strong> la instrucción); sino apren<strong>de</strong>r a ser persona,<br />
a organizarnos como sujetos <strong>de</strong> pensamiento y acción. "Se apren<strong>de</strong><br />
no sólo a percibir y a interpretar las propias percepciones, sino también a<br />
ser <strong>una</strong> persona y a ser un yo" 244 . Educar implica amarnos y amar a los<br />
<strong>de</strong>más, pero con un amor no <strong>de</strong>sprovisto <strong>de</strong> racionalidad, que posibilita los<br />
medios para que cada uno, ayudado -si necesita ayuda-, alcance sus fines.<br />
Mas esto vale poco sin no damos "a la juventud lo que necesita con la mayor<br />
urgencia para in<strong>de</strong>pendizarse <strong>de</strong> nosotros y estar en condiciones <strong>de</strong><br />
concepción <strong>de</strong> lo afectivo-ten<strong>de</strong>ncial en Sapientia, 2000, nº 207, p. 603-11. <strong>DAROS</strong>, W. El<br />
espíritu iconoclasta en el proceso <strong>de</strong> apren<strong>de</strong>r según G. Bachelard, en La Educación <strong>de</strong> la OEA.<br />
Washington, 2001-2003, Año XLV-XLVII, nº 136-138, pp. 141-154.<br />
243 POPPER, K. Conocimiento objetivo. O. C., p. 166; POPPER, K. El porvenir está abierto.<br />
Barcelona, Tusquets, 1992, p. 119; POPPER, K. La responsabilidad <strong>de</strong> vivir. Escritos sobre<br />
política, historia y conocimiento. Barcelona, Paidós, 1995, p. 137.<br />
244 POPPER, K. El yo y su cerebro. O. C., p. 57; POPPER, K. La responsabilidad <strong>de</strong> vivir. O. C.,<br />
p. 170..<br />
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