Comentario Biblico San Jeronimo 01.pdf - Comunidad San Juan
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262 NÚMEROS 5:10-12<br />
10 b) DISPOSICIÓN DE LAS TRIBUS (2,1-34). Según 10,11-28, los israelitas<br />
observaron este orden cuando levantaron el campamento y partieron<br />
del Sinaí. El campamento tenía la forma de un enorme cuadrado,<br />
con el tabernáculo en el centro. En Ez 48,30-35 puede verse una descripción<br />
análoga, también estilizada, de la Jerusalén restaurada. 2. La<br />
división (degel) era una unidad de lucha que ocupaba una posición específica<br />
en el ordenamiento militar del ejército israelita. El degel comprendía<br />
un número de hombres mayor que la «compañía», que constaba<br />
de unos cien hombres armados. La «enseña» era un emblema o<br />
distintivo militar montado sobre una vara de madera y llevado por un<br />
abanderado. Tales enseñas se empleaban desde el tercer milenio antes<br />
de Cristo con fines militares o ceremoniales. Se las menciona en 1QM<br />
(cf. Y. Yadin, The Scroll of the War of the Sons of Light Against the<br />
Sons of Darkness [Oxford, 1962], 38-49). Al parecer, los soldados<br />
cambiaban de emblemas en cada nuevo estadio de la batalla (cf. VBW 1,<br />
202-203). Unos relieves egipcios de esta época hallados en Abu Simbel<br />
muestran que los ejércitos de entonces observaban un orden de acampar<br />
y marchar que se asemeja a la disposición descrita en este capítulo.<br />
11 c) ESTATUTO DE LOS LEVITAS (3,1-51). 1-4. Cf. Lv 10,1-2; Nm<br />
26,59-61. Supuesto que los dos hijos mayores, Nadab y Abihú, habían<br />
muerto sin herederos en castigo por un crimen contra el culto, heredaron<br />
las funciones sacerdotales los dos hijos menores, Eleazar e Itamar.<br />
3. los sacerdotes ungidos: En algunos textos, la tradición P restringe<br />
la unción al sumo sacerdote; en otros reciben la unción todos los sacerdotes.<br />
9. donarás los levitas a Aarón y a sus hijos: Los «donados»<br />
(n e tinim) eran originariamente esclavos públicos, tal vez extranjeros,<br />
asignados a la obra del Templo. Este sistema prevaleció durante la monarquía.<br />
De Vaux sugiere que la institución fue eventualmente abandonada<br />
y que la obra fue realizada por los levitas (De Vaux, IAT 470).<br />
En un período posterior, reflejado en nuestro versículo, los levitas fueron<br />
tenidos por «donados» a los sacerdotes para el servicio del santuario.<br />
En 8,16 se dice que los levitas son «donados» a Dios y no a Aarón.<br />
12. Como primicias del matrimonio, el primogénito pertenecía a Dios.<br />
Dios aceptaba la consagración de los levitas como sustitución de lo que<br />
sería una abominación para él: el sacrificio de un niño. 39. veintidós<br />
mil: Esta elevada cifra puede interpretarse de acuerdo con nuestra anterior<br />
hipótesis para explicar el censo general. Aquí, como en el caso<br />
anterior, el y elep indicaría una especie de unidad de población dentro<br />
de la tribu en vez de los «miles» de la traducción habitual.<br />
12 d) OBLIGACIONES DE LOS CLANES LEVÍTICOS (4,1-49). 2. los<br />
quehatitas: Este clan parece haber disfrutado de cierta preeminencia<br />
entre los levitas, tal vez porque contaba en sus filas con los hijos de<br />
Amram, padre de Moisés y Aarón (Ex 6,18.20).<br />
B) Leyes y normas diversas (5,1-6,27). Todas estas normas proceden<br />
de P; se asemejan a algunas de las leyes del Código de <strong>San</strong>tidad<br />
de Lv 17-26. No obstante, esta sección ha sido redactada con el espíritu<br />
de Lv 11-15, casi obsesivamente preocupado por la pureza ritual.<br />
5:13-16 NÚMEROS 263<br />
13 a) EXPULSIÓN DE LOS IMPUROS (5,1-4). Los israelitas estaban<br />
obligados a defender la pureza de su campamento. El motivo de esta<br />
drástica medida era religioso y no meramente higiénico. Debajo de esta<br />
norma estaba la creencia de que los israelitas podían incurrir en el desagrado<br />
divino por cualquier contacto con gente impura. Su inhabilidad<br />
se consideraba contagiosa. La ley del campamento en los vv. 1-4 es comparable<br />
a las análogas normas de pureza de 1QM 7,3-7. El NT tiene sus<br />
propias normas de pureza, pero les ha dado una nueva dimensión espiritual<br />
(1 Cor 5,7-13; 2 Cor 6,16-18; Ap 21,27).<br />
14 b) RESTITUCIÓN (5,5-10). Esta norma es un complemento de la<br />
ley contenida en Lv 5,14-26, la ley fundamental sobre la posesión injusta.<br />
8. pariente: Esta persona era el «redentor» (go'el), el pariente<br />
obligado a defender la propiedad en la familia. Una vez hecha la restitución,<br />
el culpable estaba obligado a ofrecer un sacrificio de reparación<br />
Casam). La multa adicional, una quinta parte del valor total, que había<br />
de ser pagada al pariente o al sacerdote, no formaba parte del sacrificio.<br />
será para el sacerdote: Como adición a la ley del Lv se estipula que, si<br />
no hay pariente, la restitución vaya a parar al sacerdote como representante<br />
de Yahvé.<br />
15 c) JUICIO POR ORDALÍA (5,11-31). Lv 20,10 decretaba la sentencia<br />
de muerte cuando se demostraba que ambas partes eran culpables<br />
de adulterio. En defecto de pruebas legales, se había buscado un procedimiento<br />
para determinar la culpabilidad o la inocencia de una mujer<br />
sospechosa. La legislación sacerdotal había transformado una antigua<br />
práctica en una ceremonia coherente con la fe en Yahvé. De Vaux observa<br />
que en el Próximo Oriente antiguo no existía ningún paralelo de<br />
esta ordalía (De Vaux, IAT 224). Por el contrario, en Israel no hallamos<br />
rastro alguno de la práctica ampliamente atestiguada —en Asiría,<br />
Babilonia y Nuzi— de arrojar a la persona sospechosa al río. Esta ordalía<br />
era judicial y se la menciona en el Código de Hammurabi (ANET<br />
166). El ritual israelita atribuye el castigo de la mujer culpable a Yahvé<br />
y no a un efecto mágico del agua que ella había sido obligada a beber.<br />
15. un décimo de efá: El efá es una medida para áridos; aquí se trataría<br />
de unos dos litros y medio. 18. el agua amarga de la maldición: Si<br />
la mujer era culpable, la bebida la haría estéril para siempre, lo cual<br />
era un castigo espantoso para una sociedad que tenía en tan alta estima<br />
la prole numerosa. El agua era santa porque se le había mezclado polvo<br />
del suelo del tabernáculo. El llevar la cabeza descubierta era signo de<br />
vergüenza o de duelo. 23. pondrá por escrito estas imprecaciones: Empleando<br />
algún tipo de tinta, el sacerdote debía escribir las maldiciones<br />
sobre un rollo y luego disolver lo escrito en el agua.<br />
16 d) NORMAS PARA EL NAZIREATO (6,1-21). Un názir era un hombre<br />
o una mujer consagrado a Dios por un determinado período de<br />
tiempo. En ninguna otra parte del Pentateuco se hace mención de los<br />
nazireos. Durante el período de consagración, el názir no podía tomar<br />
vino ni ninguna otra bebida fermentada; no se podía cortar el cabello<br />
y tenía prohibido todo contacto con un cadáver. Las normas de Nm