Comentario Biblico San Jeronimo 01.pdf - Comunidad San Juan

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29 y 30 fueron añadidas aún más tarde. No obstante, la eliminación de
Bet-Anat y Bet-Semes en el v. 38 no nos proporciona todavía el total
de diecinueve. Es muy dudoso que estas ciudades puedan considerarse
como una adición a la lista en que aparecen. De hecho, las diferencias
de vocalización y de orden en las palabras conceden una probabilidad
muy pequeña por lo que toca a una dependencia de Jue 1 y Jos 21; sólo
con razones muy débiles se puede evitar la conclusión de que hallamos
unas efectivas listas de ciudades (de origen desconocido) en los vv. 15,
29-30 («Majaleb... Rejob») y en 35-38 (-» 56, infra).
55 11. subía hacia el oeste: Parece haberse perdido parte del texto;
de hecho, lo que resta no contiene la frontera occidental de Zabulón.
No obstante, quizá la palabra hebrea que traducimos por «oeste» (yammáh)
fuera el nombre de una ciudad; si la contamos como ciudad, tenemos
efectivamente el número de doce (v. 15). La ausencia de la
frontera occidental podría tener entonces otra explicación; el v. 11 describe
el límite sur. 12-13. Estos versículos describen el límite oriental.
14. Aquí tenemos el límite septentrional. Los puntos occidentales de los
límites sur y norte («Jannatón..., valle de Yiftaj-El») son fronteras naturales;
quizá no deben entenderse como elementos de la frontera occidental
(Noth). 15. Noth afirma que esta lista fue tomada de Jue 1,30,
que sólo tiene las formas «Quitrón» y «Nahalol»; al parecer, las otras
ciudades se han perdido. Es mucho más probable que el v. 15 nos dé una
lista de ciudades independiente de Jue 1. 20-21. Noth dice que Rabbit,
Quisyón, Rémet y En-Gannim fueron tomadas de Jos 21,28-29. La estructura
del texto en Jos 19, así como las variaciones en el orden de
palabras y la vocalización en Jos 21, no proporcionan ningún apoyo a
esta hipótesis.
25-26. Este pasaje describe probablemente la frontera meridional de
Aser. Pudo incluir toda la llanura de Esdrelón (Noth), pero en este
punto no hay acuerdo. Los restantes datos no nos permiten trazar una
frontera completa; muchos de los puntos fronterizos están incluidos, sin
duda, en las otras tribus galilaicas, pero el redactor se contenta con una
ligera referencia a Zabulón (v. 27; cf. v. 34). 28. Masal: Una pequeña
corrección del texto hebreo, que lee «a la izquierda», nos da esta ciudad,
probablemente la misma que Misal en el v. 26. Noth relaciona el origen
de Masal, Abdón y Rejob con los nombres de 21,30-31. Entonces debe
decir que Jelcat fue omitida en 18,28 porque aparecía en 19,25, mientras
que Masal fue conservada aunque aparecía en 19,26. Pero es muy
dudoso que 19,28 dependa de 21,30-31. Sidón la Grande: El texto
hebreo puede querer incluirla como un puesto fronterizo; de ser así,
Sidón y Tiro (v. 29) deberían considerarse como adiciones posteriores,
puesto que llevan la línea fronteriza prematuramente hasta la costa del
mar (Noth); cf. 11,8. Los israelitas nunca ocuparon estas ciudades
(Jiram de Tiro fue amigo de David y Salomón, 1 Re 5,1-12). 30. Ummá
debe leerse quizá como en el griego, «Akko». Noth asegura que las cinco
ciudades de esta lista fueron tomadas de Jue 1,31, pero es muy dudoso.
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33-34. Esta es tal vez la frontera norte de Neftalí. 34. Neftalí limitaba
también con Isacar por el sur, pero el redactor no lo dice.
56 35. las ciudades fortificadas eran: Esta introducción es única en
los caps. 13-19; en lo que sigue tenemos, sin duda, una lista de ciudades.
Además de eliminar Bet-Anat y Bet-Semes de la lista (-» 54, supra),
Noth atribuye Jammat, Raqcat (v. 35) y Quedes (v. 37) a Jos 21,
32. Sugiere también que esta lista de ciudades fortificadas parece formar
una línea que va de sur a norte, al oeste del Jordán; era probablemente
la frontera oeste del Dan septentrional, cuya frontera este, al este del
Jordán, se contiene quizá en Nm 34,7-12. Aparte la falta de sólidas
pruebas textuales, esta teoría choca con varias dificultades serias. En
primer lugar, la supuesta frontera este del Dan septentrional es probablemente
una ampliación ideal del territorio israelita; en segundo lugar,
la teoría debe suponer que el redactor suprimió una localidad de las
fronteras danitas y luego quitar artificialmente una sección a la tribu
de Benjamín, donde podía haber sido colocada la lista danita (cf. 18,14).
Aunque la lista danita de ciudades originariamente no formaba parte
del documento de fronteras (Cross y Wright han intentado descubrir
una frontera en los vv. 42-46 siguiendo el discutible método de Noth
—es decir, eliminando las «adiciones» tomadas de Jos 21 y Jue 1—,
pero sus resultados son «sólo hipotéticos»), el redactor la empleó porque
con ella cubría la región considerada como el primer sitio donde se
asentó Dan. Esta teoría, sin embargo, supone que el redactor sintió la
necesidad de dar unas fronteras a Dan, necesidad que no sintió por
Simeón, aun cuando sabía que Dan era una de las tribus septentrionales:
un grupo por el que manifiesta menor interés. Si él intentaba armonizar
su lista con la mención de las ciudades danitas del sur que aparecen en
Jos 21 y Jue 1 (hipótesis muy dudosa), tenía otra posibilidad más fácil
y razonable: atribuir esas pocas ciudades a Dan, mencionar luego la
migración al norte (cosa que hace en los vv. 47-48) y, finalmente, describir
las fronteras septentrionales que, por hipótesis, tenía en su documento
de fronteras. En una palabra: es más probable que el documento
original de fronteras contuviera sólo los límites del Dan meridional,
actualmente omitidos a causa de la migración de Dan hacia el norte.
57 L) Parte de Dan (19,40-48). Noth afirma que esta lista se encuentra
en un estado más primitivo que el precedente material galilaico:
no se da el número total de ciudades en la conclusión; además, esta lista
no contiene adiciones tomadas de Jue 1. En cambio, existe una semejanza
entre esta lista y Jue 1,35 que permitió al redactor quitar la lista
danita de su lugar original en la provincia judaíta y asignárselo a Dan
(cf. comentario a 15,20-63, esp. v. 45). Pero Cross y Wright dicen con
razón que la lista danita no puede ser reinsertada en la lista judaíta y,
por tanto, debe considerarse como independiente de ella. Kallai-Kleinmann
(VT 8 [1958], 139) la tiene por una fuente separada, basada probablemente
en el segundo distrito israelita de Salomón (1 Re 4,9). Noth
acepta también este distrito como base para la lista danita (cf. comentario
a 18,14 y 19,35-38). 41. Dado que Noth considera esta lista origi-
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