09.05.2013 Views

DESPUES DE LA LLUVIA - Rebelión

DESPUES DE LA LLUVIA - Rebelión

DESPUES DE LA LLUVIA - Rebelión

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

por el despertar de la conciencia obrera. Hijo de un pescador, conoció las penosas condiciones<br />

laborales y vitales de los hijos de la mar. Elegido alcalde de Tocopilla en los comicios de<br />

abril de 1971, durante su mandato impulsó la creación de una cooperativa de viviendas o<br />

construyó la red de agua potable para las poblaciones.<br />

El 11 de septiembre partió a la pampa hacia las cinco de la mañana para ayudar a un<br />

grupo de trabajadores a reparar una rotura de cañerías; de regreso, a la una de la tarde, se<br />

tropezó en el centro de la ciudad con su esposa, ambos tenían noticias del golpe y Marco se<br />

encaminó a la sede de su Partido. “Se demoró bastante y cuando llegó a la casa le tenía<br />

hecho el bolso, donde la empleada, que también era comunista y tenía mucha más experiencia,<br />

había puesto lo necesario. Le dije que tenía salir de Tocopilla, pero me respondió:<br />

‘¡Cómo me voy a ir! Tengo una responsabilidad con la ciudad, con mis compañeros, con el<br />

Partido”. Durante todo aquel día muchas personas llegaron a su casa, entre ellas el gobernador<br />

comunista de Tocopilla, Mario Arqueros, su esposa y sus tres hijos.<br />

Marco de la Vega incluso trabajó en la alcaldía hasta que el 16 de septiembre por la<br />

tarde fue detenido en su casa por varios carabineros. Pocos días después Isabel, la mayor de<br />

sus tres hijos con 11 años, pudo verle en la cárcel. “Mi papá me dijo que estuviera tranquila,<br />

que cuidara a mi mamá y a mis hermanos. Recuerdo que lloré. Me impresionó porque no<br />

tenía los cordones en los zapatos... Siempre estuvo tranquilo, pero le vi avejentado. Me dijo<br />

que pronto se iba a arreglar su situación”. 304<br />

No volvió a estar junto a él jamás. Hacia las seis de la madrugada del 15 de octubre<br />

dos camiones militares trasladaron a la cárcel de Antofagasta a un numeroso grupo de<br />

presos políticos que iban a ser juzgados, como era común en aquellos días, por “cabecillas<br />

del Plan Z”, “traición a la patria” o “instructores de guerrillas”. El 17 de octubre Hilda y<br />

Lucía Moreno, esposa de Arqueros, viajaron a esta ciudad con la esperanza de poder visitarles.<br />

Al día siguiente el puma aterrizó en el regimiento Esmeralda de Antofagasta, donde el<br />

general Joaquín Lagos, comandante de la primera división del ejército 305 , recibió a su par,<br />

quien le ocultó su condición de oficial delegado. Por la noche “en mi domicilio y antes de<br />

pasar a comer –aseguró el general Lagos en su declaración judicial de 1986 306 – pregunté al<br />

general Arellano cómo estaba la forma de la administración de justicia con relación a la<br />

política del comandante en jefe que él traía; me contestó que nada de importancia había y<br />

que al día siguiente conversaríamos respecto a detalles que ya había hablado con el auditor.<br />

Estando comiendo, llamó por teléfono el comandante Arredondo; yo lo atendí. Era para<br />

304 Entrevista a Isabel de la Vega. Mayo de 2002.<br />

305 Sobre la estructura y organización de las Fuerzas Armadas, véase: Sohr, Raúl: Para entender a los militares.<br />

Melquíades. Santiago de Chile, 1989.<br />

306 Declaración judicial del general Joaquín Lagos realizada el 3 de julio de 1986 ante el Primer Juzgado del<br />

Crimen de Antofagasta por la desaparición de Mario Silva, Miguel Manríquez y Marco de la Vega.<br />

Consultada en la sección de Documentos de El Mostrador: http://www.elmostrador.cl<br />

158

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!