Descargar PDF - Instituto Universitario General Gutiérrez Mellado
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CAPÍTULO 8 143<br />
LA CAÍDA DE KABUL Y LA FORMACIÓN DE LA OPOSICIÓN A LOS TALIBÁN<br />
La llama la encendieron los hazaras. Los enfurecidos<br />
descendientes de Gengis Khan no pensaban repetir sus errores del<br />
pasado. No confiaban en los talibán. Debemos tener presente que en<br />
Mazar-e-Sharif estaba la sepultura de Abdul Ali Mazari, su líder<br />
histórico, fallecido en las extrañas circunstancias que ya conocemos<br />
mientras permanecía bajo custodia talibán. Así que se lanzaron a una<br />
persecución sin cuartel por las callejuelas de Mazar. Pronto se les<br />
sumaron las fuerzas uzbekas del general Malik. Su suerte estaba<br />
echada. Las fuentes disponibles hablan de unos 2.000 combatientes<br />
talibán muertos en la jornada del 28 de mayo de 1997. Algunos de<br />
ellos eran pakistaníes, por cierto. De modo que los restos de las<br />
unidades talibán huyeron despavoridos de Mazar-e-Sharif, en<br />
dirección a Kunduz, donde se rehicieron. Se trataba de su primera<br />
derrota significativa –escaramuzas al margen- desde que iniciaran su<br />
andadura triunfal allá por 1994, en las proclives tierras de Kandahar.<br />
Pero lo peor aún estaba por llegar. Efectivamente, con el<br />
tiempo se fueron descubriendo fosas comunes en las que aparecían<br />
cadáveres de talibán y, probablemente, de pastunes no vinculados al<br />
movimiento que eran asesinados por el mero hecho de pertenecer a<br />
esa etnia. Las fuerzas de Malik se encargaron de estas matanzas. Se<br />
habla de 20.000 cadáveres encontrados en esas fosas (Griffin, 2001:<br />
267). Aunque esa cifra podría estar algo hinchada. Los talibán<br />
tampoco se quedaron cortos. En el mes de septiembre, enrabietados<br />
por la derrota, entraron en el pequeño pueblo hazara de Qazil Abad, al<br />
sur de Mazar-e-Sharif. Mataron a unas setenta personas, “algunas<br />
degolladas y otras desolladas vivas” (Rashid, 2001: 104).<br />
Los talibán volvieron a recuperar el aliento en ese mismo<br />
verano, asediando Bamiyán, en zona hazara. Pero la ofensiva final<br />
contra Mazar-e-Sharif se dio en 1998. Maimana fue ocupada en julio.<br />
Mazar-e-Sharif cayó de nuevo en sus manos en agosto. A Bamiyán le<br />
sucedió lo mismo en septiembre. Masud se refugió en el valle del<br />
Panshir. Los talibán aún no controlaban todo Afganistán, pero se<br />
habían sacado de encima buena parte de sus quebraderos de cabeza.<br />
En todo caso, decidieron dejar su huella para que los habitantes del<br />
lugar no tuviesen ni tiempo para reaccionar. En Mazar-e-Sharif<br />
iniciaron una nueva cacería de hazaras. Esta fue brutal. Duró dos días<br />
con sus noches. No se sabe a ciencia cierta cuánta gente murió. Fueron<br />
varios miles de civiles de todas las edades y de ambos sexos. Los