04.11.2014 Views

Descargar PDF - Instituto Universitario General Gutiérrez Mellado

Descargar PDF - Instituto Universitario General Gutiérrez Mellado

Descargar PDF - Instituto Universitario General Gutiérrez Mellado

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

50 ¿QUO VADIS AFGANISTÁN?<br />

miles de kilómetros cuadrados, que delimita el horizonte máximo de<br />

las pretensiones de ambos gigantes; o, dicho con otras palabras, una<br />

regresión actualizada a esos viejos tiempos de una realidad<br />

decididamente pre-estatal que a duras penas había sido abandonada.<br />

Sin embargo, las potencias extranjeras no tienen la culpa de<br />

todo lo que le pasa a Afganistán. La mayor parte de males afganos se<br />

deducen de pautas endógenas. En este sentido, la sensación que<br />

tuvieron los británicos que llegaron a Kabul en 1809 no pudo ser más<br />

descorazonadora. Tras más de medio siglo de éxitos rimbombantes (o<br />

eso se suponía), allí no había nada que recordara ni por asomo a una<br />

administración digna de tal nombre. Los informes de la época relatan<br />

que se encontraron ante una país “anárquico” (recordemos que esta<br />

palabra significa inexistencia de Estado), sin “cortes de justicia”, “ni<br />

algo que recordara a una policía organizada”, no llegando a entender<br />

“cómo una nación (sic) puede subsistir a semejante desorden” (Weber,<br />

2001: 60). Esta era la situación antes de que el influjo británico se<br />

dejara notar en aquellas tierras. Conviene no olvidarlo.<br />

Por lo demás, esos visitantes pronto descubrirían en sus<br />

propias carnes que aunque esas gentes tuviesen dificultades para<br />

construir un Estado, o una nación, o ambas cosas, o algo que se<br />

pareciera a alguna de ambas cosas, tenían una notoria facilidad para<br />

hacer valer su identidad, o la amalgama de identidades que convergen<br />

en esas tierras, frente a cualquier intromisión extranjera. Y no lo digo<br />

para recordar lo que todo el mundo sabe acerca de las sucesivas<br />

derrotas de la Corona británica al norte del paso del Khyber, sino para<br />

insinuar que Afganistán se ha parecido un poco más a una nación<br />

cuando algún agente externo ha actuado como galvanizador de las<br />

gentes que habitan dicho territorio. Cuestión distinta es que eso haya<br />

sido suficiente. Pues tendremos ocasión de comprobar que no es así.<br />

De todos modos, los británicos no se quedaron mucho tiempo.<br />

Lo de Afganistán fue un caso de protectorado, más que de colonia. De<br />

guarniciones comparativamente escasas que, a pesar de su relativa<br />

discreción, de vez en cuanto soliviantaban a la población local y<br />

tenían que hacer precipitadamente las maletas para volver a cruzar ese<br />

fatídico paso en dirección a Peshawar, o para morir en el intento. Así<br />

las cosas, el Reino Unido no llegó a actuar como, digámoslo<br />

académicamente, federador externo de las diferentes tribus afganas.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!