LA BIBLIOTECAN° 4-5 | Verano 2006Tribunas literarias, memoria editorialTribunas literarias, memoria editorialLA BIBLIOTECAN° 4-5 | Verano 2006Si bien la línea expresada porestas publicaciones (La Antorcha,Ideas y Brazo y Cerebro) rechazóel “antiorganizacionismo” tantocomo el “individualismo” y nonegó la lucha y la organizaciónsindical, creyó que éstas últimaspodían conducir sólo al mejoramientoeconómico y el ascensosocial, pero no a la emancipación.La verdadera emancipación revolucionariasería resultado de unatransformación más compleja enlos individuos y los grupos, paralo cual la propaganda cobrabauna importancia fundamental.gauchescas, como el Martín Fierro, elFausto criollo y Juan Moreira. La utilizaciónde la figura del gaucho dentrodel anarquismo se remonta al sigloXIX y su expresión mayor se alcanzacon el suplemento ilustrado MartínFierro de La Protesta, editado entre1904 y 1906. Por este camino puedevislumbrarse un intento de interpelara un sujeto autóctono para ligarlo a<strong>las</strong> prácticas ácratas. Este trabajo conel localismo, a través de la temáticagaucha, es un ejemplo interesantepero al mismo tiempo infrecuente enun movimiento fiel a una concepcióninternacionalista, que lo hizo muyvulnerable a los embates recibidosdesde el Estado,sobre todo a partirde la campañade argentinizaciónaceleradaen la década de1910, en torno alos festejos por elCentenario.Resulta difícilconocer el alcancereal de estegrupo en la zona,aunque sabemosque el periódico,al año de habersalido, tenía unatirada de 1.000ejemplares de cuatro páginas. Peroese mismo año decide separarse de laFederación Obrera Comarcal adheridaa la FORA debido a diferenciasimportantes en la forma de construcción.De esta forma La Pampa Librenos permite visualizar no sólo el desplieguedel movimiento anarquistaen el interior del país, sino tambiénun debate importante dentro delanarquismo. <strong>Las</strong> disidencias con laFORA y con La Protesta radicabanen la forma a adoptar para propagar<strong>las</strong> ideas y en el tipo de organizaciónsindical de la región. La organizaciónsindical propuesta por la FORA sehacía difícil en el área rural. Los trabajadoresrurales, especialmente losestibadores, eran obreros golondrinascuya movilidad producía la pérdidaautomática de <strong>las</strong> conquistas obtenidas,con la llegada de los nuevos a laregión, poniendo al descubierto <strong>las</strong>falencias en la forma de organizacióny crecimiento. La Pampa Libre, juntoa otras editoriales anarquistas comoLa Antorcha, Ideas y Brazo y Cerebro,resaltaron este problema y apostarona otras formas de organización y propaganda.Si bien la línea expresadapor estas publicaciones rechazó el“antiorganizacionismo” tanto comoel “individualismo” 6 y no negó lalucha y la organización sindical, creyóque estas últimas podían conducirsólo al mejoramiento económico y e<strong>las</strong>censo social, pero no a la emancipación.La verdadera emancipaciónrevolucionaria sería resultado de unatransformación más compleja en losindividuos y los grupos, para lo cualla propaganda cobraba una importanciafundamental. Estas diferenciasse verán reflejadas también en <strong>las</strong> distintasempresas editoriales. Toda estadiscusión, que en apariencia puedeparecer menor, remite a discrepanciasimportantes y constitutivas de <strong>las</strong> distintascorrientes del anarquismo, quemerecerían todo un apartado.Como resultado de <strong>las</strong> discrepancias,La Protesta anunció en 1924su decisión de romper toda c<strong>las</strong>e derelaciones con estas publicaciones,y en septiembre del mismo año laFORA resolvió en reunión de delegadosaislar a los grupos de esos medios,no consintiéndoles injerencia en losorganismos federados y retirándolestodo concurso material y moral. Deesta forma el 4 de agosto de 1924 laeditorial cambió de sede y el periódicopasó a llamarse Pampa Libre.<strong>Las</strong> discusiones violentas y los problemasque suponía el alejamiento de laFORA no impidieron que Pampa Librecontinuara funcionando y creciendo.Hacia el año 1926 realizó un cambioen el diseño e incluyó nuevas seccionesque incluían una página literaria, otradedicada a la prisión de Sierra Chica,una sección sobre federaciones, otrasobre Latinoamérica, una más dedicadaal antimilitarismo, llamada “Abajo<strong>las</strong> armas”, y un suplemento en italiano:“L’Aura dei Liberi”.Complementando la tarea del periódicola editorial publicó, en 1924, LaAnarquía de Enrrico Malatesta; en1927, El evangelio de la hora, de PabloBerthelot y en 1929, El ideal humanode Luis (sic) Fabbri, entre otros.Tomar a Pampa Libre nos otorga,entonces, la posibilidad de ver el arraigodel anarquismo en el interior, asícomo también la riqueza de sus variantes.Pero es una pequeña muestra deun gran abanico de editoriales quedeben ser recuperadas y estudiadas,para poder recomponer un entramadode ideas, que fueron muchas vecesignoradas o simplificadas.IV. Editorial ReconstruirDurante más de 150 años <strong>las</strong> ideasanarquistas fueron constituyendo diferentesvertientes que interpelaron larealidad con mayor o menor acogida.La corriente sindical y el anarcosindicalismofueron la expresión de ampliossectores obreros en el mundo. En <strong>Argentina</strong>gozó de una posición mayoritariahasta por lo menos 1915; a partirde allí <strong>las</strong> modificaciones en <strong>las</strong> condicionespolíticas y sociales permitieronel avance de <strong>las</strong> tácticas sindicalistas,socialistas y más tarde comunistas. Elanarquismo, en franco retroceso enel campo sindical (aunque la FORAsupo protagonizar algunas acciones enla década de 1930), comenzó a variarsu composición y a buscar nuevas formasque pudieran nuclear a sus militantese impulsar una construcciónrenovadora. La cárcel de Villa Devoto,en 1931, fue el lugar que ofrecióel marco para realizar un congreso demilitantes (presos tras el golpe militarde 1930) de diferentes vertientes, pararevitalizar el movimiento. Como resultadonació el Comité Regional deRelaciones Anarquistas (CRRA) cuyotrabajo produjo, tras varios años, elcongreso a partir del cual se formó laFederación Anarco Comunista <strong>Argentina</strong>(FACA), en octubre de 1935.La FACA fue la primera organizaciónespecífica anarquista argentina, y seconstituyó en una nueva expresión delmovimiento, tras varios años de debateentre los detractores y los defensores del“especifismo” 7 . Esta polémica se sumaa <strong>las</strong> complejidades del pensamientoácrata, sus variantes y posibilidades ynos alerta del error que podemos cometercon una mirada simplificadoray superficial del mismo.La FACA comienza una intensa actividadque abarca desde campañas porlos presos políticos (como el caso delos presos de Bragado), ayuda a la RevoluciónEspañola, hasta la formaciónde una corriente sindical. En el campoeditorial, que es el que nos ocupa, creóel periódico Acción <strong>Libertaria</strong> como suórgano, que perduró hasta 1971; y enjunio de 1946 impulsó la edición del422 42307. Tribunas literarias.indd 422-423 13/11/06 21:45:51
LA BIBLIOTECAN° 4-5 | Verano 2006Tribunas literarias, memoria editorialTribunas literarias, memoria editorialLA BIBLIOTECAN° 4-5 | Verano 2006Reconstruir, con varias décadasde trabajo, es la expresiónde una parte del anarquismo,que –aunque dado ya pormuerto por muchos historiadoresy estudiosos– persistióen la reflexión y recuperaciónde <strong>las</strong> ideas y <strong>las</strong> prácticasgeneradas durante más de unsiglo, con el convencimientode su riqueza y su utilidadpara una transformación profundade la realidad social.periódico Reconstruir, que se transformóen revista bimestral en agosto de1959 y que llegó hasta abril de 1976.La revista fue impulsada por FernandoQuesada, sindicalista y periodista deformación autodidacta, como muchosanarquistas, que llegó a fundar el sindicatode artes gráficas y que trabajó enmedios como Clarín, Primera Plana yTodo es Historia. El cuerpo de redactoresy la administración estuvieronintegrados por reconocidos militanteslibertarios como Gerardo Andujar,Jacobo Prince (delegado de la FACAdurante la Guerra Civil Española y directordel diario Solidaridad Obrera),Jorge Ballesteros, Carlos de la Reta,Roberto Cúneo, Manuel Carreira ymás tarde Dardo Batuecas, FernandoBertral y Oscar Pereyra. La revista llegóa tirar más de dos mil ejemplares,con setecientos suscriptores fijos.Como en el caso de <strong>las</strong> otras dos editorialesque tratamosanteriormente,Reconstruirnace como periódicoy amplía sutarea hasta constituirseen unaeditorial. En estecaso, la desa-paricióndel periódicoy la revista Reconstruirno produjola disolución dela editorial, quepasó a convertirseen el sello de la Federación <strong>Libertaria</strong><strong>Argentina</strong> 8 hasta nuestros días.La mirada sobre la editorial Reconstruirnos ubica en otro momento delmovimiento anarquista, muy distintoa <strong>las</strong> primeras décadas del siglo XX.Si en sus comienzos pudo perfilarsecomo una expresión de amplios sectoresobreros y populares, hacia <strong>las</strong>egunda mitad del siglo pasado surepercusión quedó acotada a sectoresminoritarios de la escena política. Locierto es que esta nueva etapa, de lejaníacon un gran auditorio, le imprimeespeciales características, teñidas porel peso del pasado y con la dificultadde articular un aparato reflexivo yconstructivo que amplíe su inserciónen el presente. Si bien sus planteossobre la libertad y la igualdad, comosu cuestionamiento al ordenamientojerárquico como fuente de iniquidad,siguieron siendo aportes incuestionables,sus ecos no resonaban en una<strong>Argentina</strong> que sintonizaba mejor conla ola de los movimientos de liberaciónnacional, y que se sumergía en lamilitarización casi forzada.La editorial Reconstruir no hizo hincapiéen la reedición de los clásicosdel anarquismo sino que recogió reflexionesteóricas contemporáneassobre temas ideológicos o políticos.En esta vertiente podemos ubicar libroscomo El anarquismo mas allá dela democracia de Luce Fabbri, Bolcheviquismoy anarquismo; La voluntadde poder como factor histórico y Artistasy rebeldes, todos del historiador yteórico anarquista Rudolf Rocker;Arte, poesía y anarquismo, del escritory teórico del arte Herbert Read, Capitalismo,democracia y socialismo libertario,de Agustín Souchy, La ideologíaanarquista del filósofo argentino ÁngelCappelletti, entre otros. Tambiénse buscó abordar temáticas actuales decada período. Aquí podemos ubicartextos como Testimonios de la revolucióncubana, de Agustín Souchy, en1960, La revolución popular húngara:hechos y documentos (compilación deartículos sobre la revolución húngarapublicada en 1957); La solución federalistaen la crisis histórica argentinade Juan Lazarte, etc. Una lectura sobremomentos de la historia argentinaaparecen en El otro Rosas y en Antes ydespués de Caseros de Luis Franco, o enuna biografía de Alejandro Korn escritapor Francisco Romero. También seeditaron libros cuyos autores, sin serexactamente anarquistas, se acercan amiradas libertarias, como Homenaje aCataluña de George Orwell y Ni víctimasni verdugos de Albert Camus. Enuna etapa más avanzada comienzan aaparecer, con la Colección Perfiles y laColección Testimonio, <strong>las</strong> memorias ybiografías de quienes fueron militantessignificativos como Fernando Quesada,Jacobo Maguid, Jacobo Prince,Luis Danussi, Ángel Borda, y relatossobre <strong>las</strong> vivencias en la Revolución Españolao procesos carcelarios como Elproceso de Bragado por Pascual Vuotto.Otra colección iniciada recientemente,Archivo, publica libros de carácter técnicoy de consulta, como los catálogoselaborados por la Biblioteca Archivode Estudios Libertarios (Bael).La revista Reconstruir merecería una investigaciónaparte que escapa a <strong>las</strong> posibilidadesde este artículo, ya que en sus101 números bimestrales desde 1959hasta 1976 retrata <strong>las</strong> intenciones y derroterosde este sector del movimientoanarquista. La nota editorial aparecidaen el primer número da cuenta de unobjetivo central que es la búsqueda denuevas respuestas, desde el campo libertario,para una realidad que habíacambiado profundamente desde los comienzosdel movimiento local:El Grupo Editor rehusa los repositoriosdoctrinarios, sobre los cuales muchagente descansa indefinidamente. Losnuevos tiempos y –sobre todo– los que seavecinan, obligan no sólo a modernizarcostumbres y tradiciones que parecíaninamovibles, sino también a modificaraquel<strong>las</strong> actitudes mentales que no soncompatibles con <strong>las</strong> soluciones más racionales,tanto en lo cultural como en lo político,social y económico. Nuestra revistano desea más que contribuir a esa tarea,dentro de sus posibilidades 9 .Reconstruir, con varias décadas de trabajo,es la expresión de una parte delanarquismo, que –aunque dado ya pormuerto por muchos historiadores yestudiosos– persistió en la reflexión yrecuperación de <strong>las</strong> ideas y <strong>las</strong> prácticasgeneradas durante más de un siglo,con el convencimiento de su riquezay su utilidad para una transformaciónprofunda de la realidad social.V.Hasta aquí hemos realizado un somerorecorrido por algunas empresaseditoriales anarquistas. Nuestro recorteintentó abarcar la editorial más importantede una época del anarquismocomo La Protesta, dar una imagen dela existencia de emprendimientos enla zona rural pampeana mediante LaPampa Libre y avanzar en el tiempohacia la segunda mitad del siglo XX,cuando para la mayoría de los investigadoresel anarquismo resulta inexistente,mediante Reconstruir.Pero como dijimos al comienzo, éstees un recorte mezquino, al que habríaque sumar muchos otros gruposeditoriales que merecen un estudioprofundo, para poder así conformarun verdadero mapa. Una rápida enumeraciónnos retrotrae a <strong>las</strong> primerasdécadas del siglo XX con <strong>las</strong> edicionesde Bautista Fueyo, <strong>las</strong> publicacionesde la Liga de Educación Racionalista,424 42507. Tribunas literarias.indd 424-425 13/11/06 21:45:52
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