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Las Armas y las letras.pdf - Federación Libertaria Argentina

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LA BIBLIOTECAN° 4-5 | Verano 2006Nombres, linajes y recorridosNombres, linajes y recorridosLA BIBLIOTECAN° 4-5 | Verano 2006Según se planteaba en <strong>las</strong>páginas de Nosotros, la críticadebía acompañar en unamisión estratégica <strong>las</strong> obrasde valor a la vez que debíaestablecer criterios específicospara su legitimación, y realizaraquello que en palabras deÁlvaro Melián Lafinur constituíael “ideal de cultura ydifusión literaria y artística”.lo que podría denominarse críticoartistamás ligado a algunos modernistasargentinos, uno de cuyos casosparadigmáticos fue Luis Berisso 14 .En un mundo literario en el que lospocos libros de crítica no eran pensadoscomo obras orgánicas sino que,tributarios del modo de producciónperiodística seformaban comorecopilaciones–tal el caso deBurbujas de vidao de <strong>Las</strong> nuevastendencias literariasde ManuelUgarte 15 y, enparte también, elde Nuestros poetasjóvenes–, unmundo en el cualensayo y crítica, constituían segúnGiusti y en ese momento, génerosexóticos 16 , es decir, ausentes, el críticodebía plantear su tarea como estudioriguroso y extenso. La aparición deAlmafuerte o de Ideaciones de JuanMás y Pí, libro este último a propósitodel cual reflexionaba sobre eldescuido y desinterés por parte delos críticos nacionales, de los estudios“de aliento” dedicados a escritoreso temáticas particulares 17 , así como<strong>las</strong> opiniones sobre la severa educaciónliteraria de Rojas y su laborsostenida, mostraban ese imperativo.Encuadrada en un marco de “amplitudy tolerancia” y la “más estrictaneutralidad acerca de lo que en ella[la revista Nosotros] se piensa y sedice” 18 , la crítica era entendida comoafirmación de tales valores y comodiscurso eficaz en la educación delgusto literario a través de un discursoespecializado, entre cuyas premisasbásicas se pudo contar aquello quemás tarde Giusti denominó “pasióncomunicativa”, “anhelo de comprendery explicar” 19 . En Visto y vividoafirmaría que la crítica, en tanto“historia del espíritu, es creaciónde valores: descubre, fija, revisa” 20 .Asimismo, y según se planteaba en <strong>las</strong>páginas de Nosotros, la crítica debíaacompañar en una misión estratégica<strong>las</strong> obras de valor a la vez que debíaestablecer criterios específicos para sulegitimación, y realizar aquello queen palabras de Álvaro Melián Lafinur–otro crítico de Nosotros– constituíael “ideal de cultura y difusión literariay artística” 21 . Para Giusti dicho valordependía y debía medirse según <strong>las</strong>propias condiciones de produccióninherentes al estado del mundo cultural.Así, en 1907 podía escribir:Por más que el mérito de tal o cual librosólo sea escaso, sin embargo se imponeen estas notas bibliográficas el elogio, lafrase de aliento para su autor, si es queel libro, en su valor meramente relativo,revela un digno esfuerzo o una sana aspiraciónde arte. Y la razón es obvia.Nuestra literatura –si es que existe– notiene sino un valor relativo. Por lo tantono se puede usar a su respecto el mismocriterio que se emplearía al juzgar la literaturaeuropea 22 .Se trataba entonces de una crítica quesin dejar de polemizar mostraba sucarácter estratégico, augurando porvenires“fecundos” cifrados en <strong>las</strong> correccionesde los errores del presente, oque apuntando al futuro promisoriode algún escritor, se detenía en el juiciosobre sus “intenciones” y sus característicasmorales. Así, por ejemplo, enun gesto ambivalente (y burlón) Giustise refirió a El enigma interior, libromarcado por la experiencia modernistade la poesía francesa (simbolista), y aManuel Gálvez, a quien, dicho sea depaso, fustigaría una y otra vez, no sóloen <strong>las</strong> páginas de Nosotros 23 :Otro libro más, El enigma interior,impregnado todo él de una indefiniblemelancolía. Diríase llegado del boulevard.Podrá haber en ello un motivode censura, pero ésta no ha de ser sinorelativa. Cierto es que esos versos suenanextrañamente en nuestro idioma, porque,en verdad, a pesar de toda nuestra buenavoluntad por imitar a los demás –a losnoruegos, a los rusos, a los japoneses, ¡quésé yo!– y por dejar de ser americanos,aún no hemos logrado acostumbrarnos aese parisienismo excesivo. (…)El defecto fundamental de El enigmainterior es su carencia de originalidad.Verlaine sobre todo –dejo de lado otrasvisibles influencias– pesa sobre este libro.Pero Gálvez es sincero consigo mismo. Élsiente a sus poetas predilectos, con ellos seha compenetrado y como ellos se expresa.En sus versos se advierte la sinceridad delos sentimientos que canta. No es, pues,un vulgar imitador.Mas, dejo ya de hacer hincapié en estelamentable defecto de El enigma interior,para pasar a considerarlo desdeotros puntos de vista más interesantes.Es un libro delicado y a ratos intenso.Rasgos hay en él que revelan toda unalma de artista. Pero es un libro desigual.Felices expresiones, bellos versos,codéanse en él con tropiezos verdaderamente<strong>las</strong>timosos.En general, luego de los análisis sobreaspectos disciplinares, como podíanserlo la cuestión del verso libre a propósitode El enigma interior de ManuelGálvez 24 , el uso o la elección del epítetoen <strong>Las</strong> Barcas de Banchs, o la realizacióna veces defectuosa del soneto en Joyelesde Juan Aymerich, muchas de <strong>las</strong> notascontenían –sobre todo si se trataba deautores noveles– una especie de codaen la que Giusti, desde su propia poéticacrítica, aconsejaba abiertamente osolicitaba a los escritores la depuraciónde la lengua literaria o el abandonode ciertos tópicos. Verdaderos actosde habla, estos envíos, explicitabanun tipo de valoración que franqueabalos límites del gusto y del saber literarios.Así, por ejemplo, en relación conEnrique Banchs, cuyo descubrimientocomo poeta nunca dejaría de enorgullecerlo25 , Giusti anticipaba:Si a su imaginacióndesbordante,a su potente inspiración,comparablescon <strong>las</strong> delos más grandespoetas, une, comoparece que está encamino de hacerlo,el estudio, un arterefinado, la nitidezen todo, sinconcesión algunaal desgano intelectual,Banchs notardará en ser unpoeta completo.También, opinaba(pedía o recomendaba) sobre la convenienciade que narradores y poetascultivaran determinadas temáticas endesmedro de otras. La explicación queGiusti no daba, había que buscarla nosolamente en cuestiones propias de lalógica de funcionamiento del mundoliterario que mostraban la declinacióndel modernismo, sino además en unaconcepción de la literatura y de la culturade signo clásico, a <strong>las</strong> que reconocíaun papel básico, formativo, modeladorTambién, opinaba (pedía orecomendaba) sobre la convenienciade que narradoresy poetas cultivaran determinadastemáticas en desmedrode otras. La explicación queGiusti no daba, había que buscarlano solamente en cuestionespropias de la lógica de funcionamientodel mundo literarioque mostraban la declinacióndel modernismo, sinoademás en una concepción dela literatura y de la cultura designo clásico, a <strong>las</strong> que reconocíaun papel básico, formativo,modelador de la sociedad a laque pertenecían.192 19302. Nombres, linajes y recorrido192-193 192-193 13/11/06 21:32:33

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