13.07.2015 Views

El pueblo mapuche - Folklore Tradiciones

El pueblo mapuche - Folklore Tradiciones

El pueblo mapuche - Folklore Tradiciones

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Esta fuerza recóndita, agente que imprime movimiento a las cosas, era a la que losaborígenes aplicaron la denominación de alma o espíritu, por un proceso de asimilación, sinque el nombre correspondiera al conjunto de sus emociones características.Como las ciencias etnológica y etnográfica no disponen de un término cualquiera querefleje con precisión la índole del sentimiento indígena, hay necesidad de seguir usando lasexpresiones alma y espíritu sin que signifiquen la concepción teológica del cristianismo.Se producían las percepciones en la mentalidad de los aborígenes de un modo especial, quedifería sustancialmente del que rige las funciones mentales de las sociedades civilizadas.Para el individuo de colectividad ya adelantada, las ideas o representaciones pertenecen a laclase de hechos meramente intelectuales. Si se representa cualquier objeto, se fija tan sóloen sus caracteres materiales, es decir, en su forma, color, tamaño, etc. <strong>El</strong> americanoprimitivo percibía de otra manera: suponía penetrados de cierta virtud o fuerza oculta a losseres vivos y objetos inanimados, de los cuales su actividad mental poco diferenciada nohacía distinción; si percibía caracteres objetivos, no estaban sobre los de origen mágico ysagrado. Le causaban siempre ciertas emociones, sentimientos y pasiones que noexperimenta el civilizado, esperaba o temía algo de ellos.Su ignorancia de las causas de los fenómenos naturales, lo inducía a creer que tambiénestos eran debidos a un poder secreto y misterioso, porque en todo lo que se movía obrabauna acción intencional, semejante a la que lo impulsaba a él mismo.Por esta característica exclusiva de las sociedades primitivas, a las que pertenecían lasamericanas prehistóricas y contemporáneas de la conquista, las representaciones colectivasde estos indios sobre los seres, las cosas y los fenómenos naturales iban acompañadasinvariablemente de un fondo emocional.Aumentaba este elemento emocional la misma vida de los indígenas o el funcionamientosocial de las agrupaciones, como la multitud de ceremonias sagradas, más formulistas queen los <strong>pueblo</strong>s civilizados; el vértigo de las danzas, los fenómenos del éxtasis y del sueño,el contagio de las emociones.Otro rasgo de la mentalidad especializada de las razas americanas era la percepciónsingular, de un solo individuo, de fenómenos y seres que se manifestaban en presencia demuchas personas. Si el civilizado oye o ve singularmente un objeto, se encuentra, sin duda,en un estado de alucinación. No sucedía lo mismo en las colectividades indígenas deAmérica: todas aceptaban como testimonio irrevocable la percepción singular del adivino ychupador de enfermedades, del operador en las ceremonias sagradas, de los visionarios,videntes y locos; ellos únicamente veían y hablaban con espíritus y seres escondidos paralos demás.De esta singularidad en percibir nadie se asombra, porque no todos han adquirido la técnicade comunicación con los poderes invisibles.Falla la experiencia, por otra parte, en la percepción del indígena. Esta facultad que nosfacilita el conocimiento de la realidad, no le hace falta, puesto que está reemplazada por las

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!