09.05.2013 Views

Tres tistres tigres - Diario de un chico trabajador

Tres tistres tigres - Diario de un chico trabajador

Tres tistres tigres - Diario de un chico trabajador

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—Tenemos que leerla en la barbería.<br />

—O en el <strong>de</strong>ntista —dije yo.<br />

Me miró, a través <strong>de</strong>l espejito, con ojos gratos. Era mi educación<br />

sentimental. Llámenme Wilhelmeister, no Ismael.<br />

—Y usté, tú que hase allí? —preg<strong>un</strong>tó Magalena.<br />

—Trabajo <strong>de</strong> incónnito.<br />

Sentí que Cué me miraba con más fuerza que la potencia <strong>de</strong> los<br />

<strong>de</strong>cibeles <strong>de</strong>l ¡cómo! conj<strong>un</strong>to <strong>de</strong> Magalena y Beba. Decidí ignorar a Cué.<br />

Soy <strong>un</strong> rebel<strong>de</strong> en su salsa.<br />

—Es <strong>un</strong>a broma. Mo<strong>de</strong>sto que él es —dijo Cué.<br />

—Mo<strong>de</strong>sto Mussorgsky, para servir a uste<strong>de</strong>s y al zar.<br />

Me pareció que ellas no entendieron. Desatendí a Cué.<br />

—Acá—dijo Cué—es <strong>un</strong>o <strong>de</strong> los primeros periodistas <strong>de</strong> Cuba y<br />

cuando digo primero no quiero <strong>de</strong>cir que entrevistó a Colón al <strong>de</strong>sembarcar,<br />

a<strong>un</strong>que tenga cara <strong>de</strong> indio.<br />

Se rieron. Ventajas <strong>de</strong> la radio.<br />

—Y hablando <strong>de</strong> Colón y eso—dijo Cué—. ¿A dón<strong>de</strong> dirigimos esta<br />

carabela?<br />

—O esta cara bella—dije yo aludiendo a Magalena. Sonrisa. Ellas no<br />

sabían. Respondían a Cué. Trigueñas in<strong>de</strong>cisas. Escoge tú que nosotras<br />

cantamos o bailamos o lo que sea. Equisygriegazétera.<br />

—Qué les parece <strong>un</strong> club, bar o cabaré.<br />

—Yo no puedo ir —dijo Beba.<br />

—Ella no pue<strong>de</strong> —dijo Cué.<br />

—Y vamo siempre j<strong>un</strong>ta—dijo Magalena.<br />

—¿Don<strong>de</strong> quieren ir entonces las siamesas?<br />

Me pareció oír en la voz <strong>de</strong> Cué <strong>un</strong>a nota, nada musical, <strong>de</strong> cansancio.<br />

Malo. Pánico en la bolsa. Pue<strong>de</strong> haber <strong>un</strong> crac erótico.<br />

—No sé—dijo Beba—. Digan uste<strong>de</strong>.<br />

Peor. Estábamos en el circo máximo <strong>de</strong> siempre. «Cojan <strong>un</strong>a mujer,<br />

acarícienla, pregúntenle qué quiere y tendrán <strong>un</strong> círculo vicioso», lonescué.<br />

«Incapaces <strong>de</strong> separar el fin <strong>de</strong>l principio. Animales felices», Alcmeón <strong>de</strong><br />

Cuétona. «Ojalá todas las mujeres tuvieran <strong>un</strong>a sola cabeza (mai<strong>de</strong>n-head)».<br />

Cuéligula. Hablaba <strong>de</strong> nuevo.<br />

—Bueno y <strong>un</strong> lugar limpio y mal alumbrado? Como el Johnny's?<br />

—El Yoni no ta mal. No verdá Beba.<br />

Beba lo pensó. Nos miró a todos <strong>un</strong>o a <strong>un</strong>o y luego hizo <strong>un</strong> juego <strong>de</strong><br />

perfiles: se quedó mirando el perfil <strong>de</strong> Cué mientras me mostraba su línea <strong>de</strong><br />

rostro, implacable. Linda boca. Una Ava Gardner <strong>de</strong>l sobrio. Eva <strong>de</strong>l ebrio.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!