09.05.2013 Views

Tres tistres tigres - Diario de un chico trabajador

Tres tistres tigres - Diario de un chico trabajador

Tres tistres tigres - Diario de un chico trabajador

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Se abrió la boca. Le dijo a Cué, Él es mono, hablando <strong>de</strong> Cué en esa tercera<br />

persona afectada, afectiva, popular en Cuba, en La Habana. Sabidulzura <strong>de</strong><br />

la nación. Parese <strong>un</strong> cromo. Se cerró. No <strong>de</strong>bías abrirte n<strong>un</strong>ca Beba Gardner.<br />

Solamente en la oscuridad, dijo Cué. Hablaba <strong>de</strong> su belleza. Sonrió. Qué<br />

belleza. (La <strong>de</strong> Beba.) Cué miraba <strong>de</strong> nuevo para atrás y como nos <strong>de</strong>tuvo<br />

<strong>un</strong>a luz (el tiempo convencional que interrumpe la natural solución <strong>de</strong><br />

continuidad <strong>de</strong>l espacio) en el Malecón le preg<strong>un</strong>tó a Magalena:<br />

—¿Nosotros nos conocemos?<br />

—Yo lo visto a usté mucho por televisión y lo oigo y eso.<br />

—¿No nos hemos visto antes? En persona.<br />

—Pue<strong>de</strong> sel. A lo mejor en casa Códac o por la rampa.<br />

—¿Antes no?<br />

—¿Cuándo ante? —me pareció notar <strong>un</strong> aire <strong>de</strong> sospecha en su<br />

lejanía.<br />

—Cuando eras más joven. Hace tres o cuatro años, tendrías tú catorce<br />

o quince.<br />

—No recueldo, la veldá.<br />

La beldad no recordaba. Menos mal. También fue buena la<br />

interrupción <strong>de</strong> Beba, que le dijo, Bueno galán te pones <strong>de</strong> acuerdo con tu<br />

corazón o qué pasa, quién te gutta más, <strong>de</strong>fínete este niño. Tú preciosa,<br />

claro, dijo Cué, sin <strong>de</strong>sdorar lo presente, pero eres la única. Es que creía que<br />

la conocía <strong>de</strong> niña, pero a mí no me gustan las niñas, sino las mujeres. De<br />

pene en pecho. Ah bueno, dijo Beba, la cosa cambia. Ta mejor así.<br />

Magalena se rió. Cué se rió. Consi<strong>de</strong>ré mi <strong>de</strong>ber imitarlos, no sin antes<br />

preg<strong>un</strong>tarme si Beba sabría lo que quería <strong>de</strong>cir la palabra pene. Nadie me<br />

respondió, ni siquiera yo mismo. ¿Vamos o no vamos? dijo Cué y Beba dijo<br />

sí y Magalena saltó <strong>de</strong> contento y me miró, prometedora. Me froté,<br />

mentalmente, las manos. Es <strong>un</strong> ejercicio dificil, no crean. Arsenio Cué me<br />

miró, <strong>de</strong>fraudador. Las manos <strong>de</strong>l espíritu se crisparon.<br />

—Silver Starr.<br />

Su voz era, también, prometedora, pero con <strong>un</strong>a duda o <strong>un</strong>a preg<strong>un</strong>ta<br />

como acento.<br />

—Yeah?<br />

—Sheriff Silver Starr, We're r<strong>un</strong>ning outa gas. Afectaba <strong>un</strong> acento<br />

tejano. Ahora era <strong>un</strong> marshal <strong>de</strong>l oeste. O cheriff adjoint.<br />

—Gas? You mean no gasoline?<br />

—Horses all right. Trouble in July. I mean the silver, Starr. Long<br />

o'women but a little this si<strong>de</strong> of short on moola or mazuma. Remember? A<br />

nasty by-product of work. We need some fidutia, pronto!

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!