12.05.2013 Views

El César vs. el Estado

El César vs. el Estado

El César vs. el Estado

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

luz y los votanlavos se regeneren de la ceguera; sin <strong>el</strong>la (la ceguera), es<br />

posible que se les quiten las ganas de votar.<br />

»Por lo que a usted respecta, le digo que realmente es bueno<br />

interpretando su pap<strong>el</strong> de escudero e hila sus discursos de manera<br />

desordenada pero también prudente e ingeniosa; debería abandonar <strong>el</strong><br />

consumo de drogas para que la cabeza no se le revu<strong>el</strong>va con tanta<br />

imaginación. No sé cómo irá <strong>el</strong> diálogo de su majestad <strong>el</strong> rey con <strong>el</strong><br />

caballero don Quijote pero por <strong>el</strong> silencio que hay alrededor, parece que<br />

ningún ciudadano ni ciudadana se esté perdiendo lo que allí se dice.<br />

—¡Sea’esidenta! —dijo Sancho—, ya que desconoce <strong>el</strong> uso d<strong>el</strong><br />

masculino genérico, haga <strong>el</strong> favor de hacer uso de la cortesía y diga<br />

primero ciudadanas para decir ciudadanos después.<br />

La presidenta, que es de las que donde las dan las toman, ha devu<strong>el</strong>to<br />

a Sancho la patada de tan importante parida; como <strong>el</strong> escudero no se<br />

toma nada de manera personal, ha interpretado una parida como lo que<br />

es, algo que en este momento se está pariendo. Pero reparó en que si la<br />

presidenta tenía suficiente ironía como para pronunciar comentarios con<br />

dobles intenciones en <strong>el</strong> filo d<strong>el</strong> desprecio, también debería tener<br />

capacitada su hipocresía para recibirlos. Veremos por dónde sale la<br />

parida porque Sancho es de los que saben devolver coces.<br />

Efectivamente, <strong>el</strong> silencio se esparcía por los círculos cercanos a los<br />

contertulios y la gente se fue apiñando tan rápido, tan prieta y tan<br />

calladamente, que cuando <strong>el</strong> Centro de Seguridad Monarcal (CSM) quiso<br />

reaccionar, se encontró en un grande aprieto. «¡Houston, tenemos un<br />

problema!» se escuchaba que decían. La intervención de don Quijote<br />

facilitó que los dos círculos se acercaran y recolocó <strong>el</strong> paisaje d<strong>el</strong><br />

escenario. Ligeros movimientos inconscientes en estas seis células que<br />

protagonizaban <strong>el</strong> retablo, los fueron arrejuntando hasta que los dos<br />

círculos d<strong>el</strong> Servicio de Seguridad Secreta (SSS) que los resguardaban,<br />

pasó a ser uno sólo doble.<br />

De todas partes venían los visitantes d<strong>el</strong> «Mercado Medieval» pero<br />

principalmente d<strong>el</strong> área metropolitana noreste de la Comunidad, de<br />

Madrid y d<strong>el</strong> sur de Guadalajara. Sin embargo, <strong>el</strong> CSM consideró que<br />

entre los artesanos también podría haber ciudadanos d<strong>el</strong> norte que al ser<br />

más recios y levantiscos, podrían provocar cualquier altercado que se<br />

contagiara rápidamente a los demás. Había que hacer lo que fuera para<br />

no intuir: «La situación está fuera de control». ¡Como si no empezaran a<br />

saber que ya estaba fuera de su control! Los ciudadanos se van a dar<br />

382

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!