12.05.2013 Views

El César vs. el Estado

El César vs. el Estado

El César vs. el Estado

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

A Sancho se le quedó seco <strong>el</strong> seso y no se avino a más d<strong>el</strong>etreos<br />

porque de todos es conocida la lentitud con la que r<strong>el</strong>aciona los detalles y<br />

que su memoria es blanda de natural; así que no quiso indagar en más<br />

puntualizaciones. Ya había olvidado <strong>el</strong> discurso en <strong>el</strong> que don Quijote se<br />

presenta a los civilizombis y que tanta impresión le había causado y no<br />

estaba para prestar demasiada atención a nada más. Menos aún cuando la<br />

descripción de lo que venía podía turbarle la siesta para la que, ahora sí,<br />

se había acomodado utilizando las alforjas.<br />

Como si fuera por arte de magia<br />

o por la influenza de la Magistral,<br />

de la plaza de los Santos Niños<br />

ha desaparecido <strong>el</strong> caos social<br />

que ahora se reparte incondicional<br />

por las distintas casetas prefabricadas<br />

d<strong>el</strong> material que sea sin que se sepa.<br />

Como sucede en las inauguraciones,<br />

al final hay que improvisar<br />

y todos ponen de su parte<br />

porque hay que colaborar con ahínco<br />

para facilitar que <strong>el</strong> dios dinero<br />

entre después hasta los bajos fondos<br />

de sus descosidos bolsos.<br />

La atención de los carpinteros<br />

estaba en las desvencijadas casetas<br />

porque al no estar niv<strong>el</strong>adas,<br />

tuvieron que hacer un apaño<br />

82<br />

para que nadie lo notara<br />

menos los que lo tenían que notar:<br />

los libros que se utilizaron<br />

para niv<strong>el</strong>ar a las «chapusetas».<br />

Mientras que las dejen bien ancladas<br />

para que no se las lleve nunca<br />

<strong>el</strong> soplido de un lobo feroz<br />

que deja a los cerditos sin casetas,<br />

los ciudadanos se pueden sentir<br />

satisfechos sin descalabrar<br />

gracias al poluto hacer<br />

de la democrática estupidez.<br />

Como viene siendo habitual,<br />

no nos vamos a meter en detalles<br />

para no alargar <strong>el</strong> r<strong>el</strong>ato<br />

y que nadie se imagine cómo es<br />

la cutre realidad de Matrix.<br />

La brisa movía las hojas de los árboles que no sabían si reverdecer o<br />

amarillear. Los otoños traen semanas tan primaverales que las novedades<br />

empiezan a exigir que se rescriban las características de las estaciones. <strong>El</strong><br />

sonido de las hojas acariciadas por la brisa fresca invitaba al descanso de<br />

manera tan intensa, que <strong>el</strong> software de Sancho se desconectó fácilmente<br />

de todo lo acontecido. Desde que retornó al preguntar la diferencia entre<br />

lo auténtico y lo real, su sistema operativo ha recibido suficiente<br />

información como para tomarse un respiro. Lo que suceda con los<br />

sapiens lectores es algo que se escapa de nuestro control. ¡F<strong>el</strong>ices sueños!

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!