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<strong>La</strong> parábola de la levadura ha sido diversamente interpretada. Ciertos comentaristas han creído<br />
ver en <strong>el</strong>la una imagen de la influencia saturadora d<strong>el</strong> Evang<strong>el</strong>io que, de una manera quizás escondida,<br />
penetra en todos los medios y por la tierra entera.<br />
Sin embargo, se ha de tener en cuenta que en todos los otros pasajes bíblicos la levadura es<br />
consistentemente un símbolo de iniquidad. De la misma manera que la cizaña se mezcla con <strong>el</strong> trigo<br />
hasta la siega, así la levadura introducida en la harina produce un fermento de corrupción que irá en<br />
aumento hasta la apostasía y <strong>el</strong> juicio que ha de caer sobre <strong>el</strong>la.<br />
<strong>La</strong> parábola de la cizaña y la de la levadura muestran diferentes aspectos de la misma realidad:<br />
<strong>el</strong> proceso de corrupción conducente a la apostasía en <strong>el</strong> seno d<strong>el</strong> testimonio de la Iglesia en la tierra<br />
hasta la intervención d<strong>el</strong> Señor en juicio sobre una cristiandad apóstata. Así, hasta que todo fue<br />
leudado, en lugar de significar que todo <strong>el</strong> mundo será ganado <strong>para</strong> <strong>el</strong> Evang<strong>el</strong>io, tiene un significado<br />
diametralmente opuesto.<br />
<strong>La</strong> explicación más simple y sencilla que se me ocurre respecto a este texto, y luego de ver<br />
algunas posturas de afamados teólogos, es que la levadura no es ni buena ni mala en sí misma, es<br />
levadura. Leuda la masa de lo que es bueno y también de lo que es malo.<br />
Por lo tanto, cuando se habla de esta parábola, y dentro d<strong>el</strong> contexto en <strong>el</strong> que Jesús la expone,<br />
es indudable que tiene que ver con la extensión d<strong>el</strong> Reino de Dios, de la recuperación d<strong>el</strong> mismo de<br />
manos d<strong>el</strong> usurpador y de la victoria final que la iglesia tendrá sobre las potestades malignas.<br />
(Mateo 13: 44) = Además, <strong>el</strong> reino de los ci<strong>el</strong>os es semejante a un tesoro escondido en un<br />
campo, <strong>el</strong> cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por <strong>el</strong>lo va y vende todo lo que<br />
tiene, y compra aqu<strong>el</strong> campo.<br />
Estoy totalmente persuadido que la interpretación más clara y precisa de esta parábola, tiene que<br />
ver con <strong>el</strong> precio a pagar por cada uno de nosotros <strong>para</strong> acceder al Reino. ¿Precio?, te preguntas tú;<br />
¡Pero si la salvación es por gracia!<br />
Cierto, pero ni yo ni la Biblia estamos hablando de tu salvación; estamos hablando de tu ingreso<br />
o no al Reino. ¿Y no es lo mismo? Trataré de demostrarte con Palabra y no con verborragia “pulpística”<br />
que no, que no es lo mismo.<br />
En su carta a los Filipenses, 3:7-8. Pablo dice a propósito de esta idea: Pero cuantas cosas<br />
eran <strong>para</strong> mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo. Y ciertamente, aún<br />
estimo todas las cosas como pérdida por la exc<strong>el</strong>encia d<strong>el</strong> conocimiento de Cristo Jesús, mi<br />
Señor, por amor d<strong>el</strong> cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, <strong>para</strong> ganar a Cristo.<br />
¿De verdad habías pensado, creído u oído predicar y enseñar, que esto hablaba de salvación?<br />
No. Pablo fue salvo inmediatamente que se encontró con Jesús durante su viaje a Damasco, cuando<br />
cayó al su<strong>el</strong>o, (Por impacto d<strong>el</strong> Espíritu Santo y sin existencia bíblica de caballo alguno) y simplemente<br />
dijo: Señor; ¿Qué quieres tú que yo haga?<br />
Bien; lo que Jesús quería que él hiciese, es exactamente lo mismo que quiere que hagas tú,<br />
servir al Reino de los Ci<strong>el</strong>os. Y <strong>para</strong> hacerlo es, tal como aquí lo señala <strong>el</strong> apóstol, necesario que<br />
mueras a todas las obras y placeres de la carne. ¿Estás conmigo?<br />
Por ese motivo, no voy a añadirle nada más al texto que sigue, ya que es exactamente un calco,<br />
casi una repetición semántica d<strong>el</strong> que hemos visto. Sólo se especifica la calidad puntual d<strong>el</strong> tesoro<br />
escondido, que ahora pasamos a ver que es una perla de gran valor.