27.11.2014 Views

Pulsa aquí para seguir leyendo y descargar el ... - La Web Cristiana

Pulsa aquí para seguir leyendo y descargar el ... - La Web Cristiana

Pulsa aquí para seguir leyendo y descargar el ... - La Web Cristiana

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

177<br />

¿Lo estás entendiendo, ahora? Cuando se te dice que al recibir <strong>el</strong> Espíritu Santo en Pentecostés,<br />

los que allí estaban hablaban en lenguas y predicaban la palabra con denuedo, lo que se te está<br />

mostrando es que la única forma de predicar la palabra de Dios sin contaminaciones, es por medio<br />

de la unción y plenitud d<strong>el</strong> Espíritu Santo. No me digas lo que estás pensando; yo lo pensé primero.<br />

Y, finalmente, la cuarta perla, nos muestra que Pablo hablaba acerca d<strong>el</strong> Reino de Dios, dice,<br />

Discutiendo y Persuadiendo. Quiero recordarte, y muy especialmente <strong>para</strong> mis compatriotas argentinos,<br />

que discutir no es necesariamente p<strong>el</strong>earse con alguien, sino examinar atenta y particularmente una<br />

materia.<br />

Casi una conferencia profunda sobre un tema profundo, carente de expresiones voluntaristas, de<br />

cliché evangélico y aullidos innecesarios. En mi tierra, así como algún líder político exitoso puso de<br />

moda dar discursos a los gritos, así también algún predicador que gustaba de dar aullidos, puso de<br />

moda <strong>el</strong> aullido santo.<br />

Persuadir, mientras tanto, no es convencer mediante artilugios manipuladores de conciencias,<br />

sino inducir, mover, obligar a alguien, con irrefutables razones, a creer en algo. Esto era lo que Pablo<br />

hacía <strong>para</strong> mostrar al Reino de Dios. <strong>La</strong> pregunta que surge, es: ¿Quién está haciendo algo parecido,<br />

hoy?<br />

078 – Testificando a Tiempo Completo<br />

(Hechos 28: 17) = Aconteció que tres días después, Pablo convocó a los principales de los<br />

judíos, a los cuales, luego que estuvieron reunidos, les dijo: yo, varones hermanos, no habiendo<br />

nada contra <strong>el</strong> pueblo, ni contra las costumbres de nuestros padres, hendido entregado preso<br />

desde Jerusalén en manos de los romanos; (18) los cuales, habiéndome examinado, me querían<br />

soltar, por no haber en mí ninguna causa de muerte.<br />

(19) Pero oponiéndose los judíos, me vi obligado a ap<strong>el</strong>ar a César; no porque tenga de que<br />

acusar a mi nación.<br />

(20) Así que por esta causa os he llamado <strong>para</strong> veros y hablaros; porque por la esperanza<br />

de Isra<strong>el</strong> estoy sujeto con esta cadena.<br />

(21) Entonces <strong>el</strong>los le dijeron: nosotros ni hemos recibido de Judea cartas acerca de ti, ni<br />

ha venido alguno de los hermanos que haya denunciado o hablado algún mal de ti.<br />

(22) Pero querríamos oír de ti lo que piensas; porque de esta secta nos es notorio que en<br />

todas partes se habla contra <strong>el</strong>la.<br />

(23) Y habiéndole señalado un día, vinieron a él muchos de la posada, a los cuales les<br />

declaraba y les testificaba <strong>el</strong> reino de Dios desde la mañana hasta la tarde, persuadiéndoles<br />

acerca de Jesús, tanto por la ley de Moisés como por los profetas.<br />

(24) Y algunos asentían a lo que se decía, pero otros no creían.<br />

Esto es un clásico de la r<strong>el</strong>igión estructural y organizada. A nadie, pero absolutamente a nadie de<br />

los que se decían representantes d<strong>el</strong> Dios de Isra<strong>el</strong>, le preocupaba demasiado si Pablo hablaba con la<br />

verdad o no. Lo que sí les preocupaba era que no lo estaba haciendo con <strong>el</strong> permiso ni las metodologías<br />

acostumbradas.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!