Pulsa aquà para seguir leyendo y descargar el ... - La Web Cristiana
Pulsa aquà para seguir leyendo y descargar el ... - La Web Cristiana
Pulsa aquà para seguir leyendo y descargar el ... - La Web Cristiana
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
253<br />
Tenemos casi una tendencia natural a huir de las cosas profundas, experimentando una<br />
llamativa y curiosa adhesión <strong>para</strong> con todo lo liviano, frívolo, morboso y falto de consistencia espiritual.<br />
Por esta razón han tenido tanto éxito pensamientos y hasta r<strong>el</strong>igiones de dudosas o carentes bases<br />
sólidas.<br />
Por esta misma razón, además, han proliferado tantos falsos predicadores. Nadie lee su Biblia lo<br />
suficiente como <strong>para</strong> saber si lo que se le está diciendo es realmente así. Además, entre alguien que<br />
examina puntillosamente versículo por versículo y alguien que grita desaforadamente mil veces la misma<br />
palabra, mucha gente sincera y fi<strong>el</strong> concurrentes a una iglesia, se quedan con lo último.<br />
¿Qué estoy procurando decir?: que entre examinar cuidadosamente un texto bíblico por espacio<br />
de varios minutos, o lanzarse a un jolgorio de oración en lenguas que nadie interpreta por varias horas,<br />
muchos cristianos optan por esto último.<br />
No lo descalifico, yo tengo <strong>el</strong> don de lenguas, gracias a Dios, y lo amo, pero lo prioritario es lo<br />
prioritario. Y la Palabra de Dios es Su esencia y es prioridad conocerla. Todo lo demás, absolutamente<br />
todo, es <strong>para</strong> añadirlo, nunca <strong>para</strong> anteponerlo.<br />
Hace algunos días cometí un error no grave pero bastante visible en mi blog. Confieso que no<br />
fue intencional ni pre<strong>para</strong>do, simplemente fue un error mío. Tres hermanos me enviaron correos<br />
haciéndom<strong>el</strong>o notar. ¡Gloria a Dios por <strong>el</strong>los! Pero a mi blog lo leen más de tres mil personas por día.<br />
Somos permanentes proyectadotes de responsabilidades. Cuestiones que nos atañen<br />
directamente, siempre son derivadas a otros mediante la técnica de la excusa o la traslación de culpas.<br />
Desde Adán culpando a Eva y Eva culpando a la serpiente, esa parecería ser nuestra política diaria. Y<br />
cuando algo se conmueve por eso, jugamos <strong>el</strong> rol de víctimas.<br />
Ningún miembro de una iglesia se va de <strong>el</strong>la por causa de sus propios problemas interiores;<br />
siempre lo hace porque <strong>el</strong> pastor le hizo esto o aqu<strong>el</strong>lo. Pero ningún pastor tampoco reconoce que la<br />
declinación de su iglesia se debe a su falta de unción, alimento y ministerio ordenado divinamente;<br />
siempre es porque la gente es conflictiva, ordinaria y desobediente. Aprende de Dios; Él jamás le echa la<br />
culpa a nadie. ¡Y mira que le sobran candidatos!<br />
Cuando leemos y r<strong>el</strong>eemos <strong>el</strong> texto donde Jesús da las pautas <strong>para</strong> ver o ingresar al Reino al<br />
anciano Nicodemo, no podemos menos que sentir que aún nos falta mucho, quizás muchísimo. Dios es<br />
justo y sabe perfectamente quienes buscan caminar en dirección al Reino y a quienes no les interesa<br />
hacerlo, así que no caben culpas ni subestimaciones. Serán los de Él y no serán los extraños.<br />
No obstante, algunas de las marcas culturales que anuncian a la sociedad que todavía no se ha<br />
entrado a militar dentro d<strong>el</strong> Reino de Dios, servirán <strong>para</strong> identificar y advertir. Reaccionar ante los<br />
imponderables de la misma manea que reacciona <strong>el</strong> mundo y bailar alegremente al ritmo de los<br />
sistemas seculares, es una de esas marcas negativas. Pero hay otras.<br />
Vivir de un modo tal en que todos puedan comprobar que nuestras pasiones siguen siendo<br />
pasiones y nada nos ha hecho cambiar. <strong>La</strong> forma de llevar nuestras diferentes r<strong>el</strong>aciones. Y cuando<br />
hablo de r<strong>el</strong>aciones, hablo de las más complejas y problemáticas: familiares, sentimentales y de<br />
amistad.<br />
Es altamente importante y sumamente necesario que comprendas con claridad lo que ahora te<br />
diré: Un amigo, un padre o hijo, o un novio, o novia d<strong>el</strong> Reino no es ni puede ser similar a uno d<strong>el</strong> mundo<br />
secular. Y no es discriminación r<strong>el</strong>igiosa, es mandato divino.