10.05.2013 Views

Retablo del Alto Aragón - Instituto de Estudios Altoaragoneses

Retablo del Alto Aragón - Instituto de Estudios Altoaragoneses

Retablo del Alto Aragón - Instituto de Estudios Altoaragoneses

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

TEMAS VARIADOS<br />

Nosotros vamos buscando el encanto luminoso en las gran<strong>de</strong>s<br />

luces, que nos <strong>de</strong>slumbran y no nos <strong>de</strong>jan ver las pequeñas luces,<br />

las pequeñas cosas amables, los pequeños placeres que producen<br />

encanto. Yo asimilaría esas pequeñas cosas con encanto a los duen<strong>de</strong>s<br />

y a los fantasmas, a todo aquello con que tratan maléficamente<br />

<strong>de</strong> encantarnos. La vieja <strong>de</strong> las cucarachas me resulta fantasmagórica.<br />

Kafka, en cambio, aunque se expresa <strong>de</strong> un modo duro,<br />

cruel, tiene duen<strong>de</strong>, quiere que la humanidad prescinda <strong>de</strong> todo<br />

aquello que hace <strong>de</strong>saparecer el encanto <strong>de</strong> la vida.<br />

Cuando las personas o las cosas poseen un «qué sé yo», un algo<br />

que no po<strong>de</strong>mos <strong>de</strong>finir, pero que nos atrae amablemente, <strong>de</strong>cimos<br />

que tienen duen<strong>de</strong>. Sí, lo tiene el flamenco, la jota, que lo <strong>de</strong>be<br />

<strong>de</strong> tener gran<strong>de</strong>, ya que me pone la carne <strong>de</strong> gallina, un callejón<br />

sin salida, un viejo monasterio; ¡tantas cosas!, pequeñas en sí mismas,<br />

pero gran<strong>de</strong>s para el que sabe <strong>de</strong>scubrir ese duen<strong>de</strong>. ¿Qué<br />

encanto tendría un castillo inglés sin su duen<strong>de</strong>? Yo creo que<br />

Cardús, cuando estudiaba en Alemania, hizo amistad con algunos<br />

<strong>de</strong> ellos en esos castillos <strong>de</strong> Baviera que mandó construir el Rey<br />

Luis el Loco. Sí, el duen<strong>de</strong> amigo le dijo dón<strong>de</strong> estaban los cientos<br />

<strong>de</strong> castillos que encontró en la provincia <strong>de</strong> Huesca, o tal vez le<br />

diera recomendaciones para los duen<strong>de</strong>s españoles. Yo los veo por<br />

todas partes y se me plantea un dilema: ¿verda<strong>de</strong>ramente hay<br />

muchos?, ¿o es que entre unos pocos llegan a hacerse presentes en<br />

aquellos objetivos que les marca el Gran Duen<strong>de</strong>?<br />

Aunque los veo, no he conseguido hacerme amigo ni <strong>de</strong> uno<br />

<strong>de</strong> ellos, como mi pariente Cardús, para preguntarle la clave <strong><strong>de</strong>l</strong><br />

dilema. Para mí que son pocos, pero cuando escuchan las llamadas<br />

<strong>de</strong> la gente sencilla, acu<strong>de</strong>n presurosos. Eso <strong>de</strong>be <strong>de</strong> ocurrir,<br />

y si las personas tienen sensibilidad conectan con los duen<strong>de</strong>s. No<br />

sé tampoco si tienen mucho trabajo. Cuando logre esa tan <strong>de</strong>seada<br />

amistad con un duen<strong>de</strong>, le pienso pedir que me saque <strong>de</strong> este<br />

laberinto. Pue<strong>de</strong> ocurrir que exista paro duendil. Si así ocurre,<br />

constituirá una agonía para él no po<strong>de</strong>r don<strong>de</strong>ar, como para tantos<br />

parados el no po<strong>de</strong>r trabajar. En tanto me sacan o no <strong><strong>de</strong>l</strong> laberinto,<br />

intento salir yo solo. Me parece que cada vez los llaman<br />

menos porque a la gente se le va embotando la sensibilidad, se le<br />

ha puesto un caparazón <strong>de</strong> egoísmo, <strong>de</strong> consumismo. No somos<br />

sensibles como antes, y otros que lo son viven muy apresurados y<br />

439

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!