Untitled - Fundación de Historia Natural Félix de Azara

Vidas paralelas, “inocentes” y “mártires”… | Sabina Regueiro 505
tos” y “mentiras” 3 , para evadir esta persecución de la cual es objeto. Estos relatos
sobre la vida privada de los narradores tienen su contrapartida en el ámbito
público, en el férreo control de la información por parte del estado característico
de una dictadura, compartido por todos los ciudadanos.
Los familiares relatan la progresiva desaparición de una variedad de ámbitos
“para no desaparecer” a partir de diversas categorías y el abandono de distintas
clases de actividades, proyectos y relaciones por parte de los militantes que
andaban “escondidos”, donde la “ilegalidad” suele asociarse a la clandestinidad
en general. Se remarca la idea de una transformación, de un pasaje de un
estado a otro, de una militancia a otra, que conlleva también la marca en el
relato de lo que después sucederá: la desaparición.
“Estaban bastante bien, después bueno, vino toda esta etapa” “había empezado la
facultad pero tuvo que dejar por todo este asunto de las corridas y todo esto” “no
tenía posibilidad de conseguir un laburo en blanco porque era todo ilegal” “los servicios
estaban en todos lados” “estaban todos marcados en esa época” “la mayoría
de la gente tuvo que exiliarse o borrarse o desaparecer, entre comillas, de los lugares
más conocidos” (Elena, hermana, ama de casa)
Las narraciones de los familiares transmiten una clara idea de “cambio” en la
forma de vida –“deja”, “cambia”, “pierde” –. La necesidad de “borrarse”, “exiliarse”,
“desaparecer”, al estar “marcados”. La asociación entre “desaparecer”
y escapar a la persecución ofrece una de las conexiones narrativas explícitas
entre clandestinidad y desaparición.
Los narradores hacen referencia a una incipiente desaparición, marcada por
una transformación de las relaciones familiares, a partir del alejamiento característico
de ese momento. Algunos relatos sugieren una especie de clandestinización
de las relaciones familiares a partir de la estructuración de vidas
“descompartimentadas”, marcadas por el desconocimiento y la ausencia.
“Hacíamos reuniones, pero reuniones así, medio clandestinas porque si no nos agarraban...”
“¿cómo era el término que manejaban ellos siempre Descompartimentado”
“me explicaron una cosa así: para llegar a un domicilio tenían que no mirar
dónde iban y dar muchas vueltas antes de llegar, cosa de que después se les olvidara
ese lugar. Eran manejos a los que yo no tenía alcance en ese momento, como yo
estaba afuera” “Y de esa etapa, de la última, es en realidad cuando más me hubiera
gustado tener un acercamiento con él (su hermano desaparecido). Tanto es así, que
para el casamiento de ellos no estuve. Precisamente, porque no tenía que conocer la
casa donde estaban parando” (Elena)
“Alguna Navidad, ellos no vinieron porque ya los andaban buscando. Entonces
tenían que irse a otro lado, no sé dónde se habrán refugiado” (Rafael, hermano,
geógrafo)
3. Estas categorías son utilizadas por los narradores y no implican ninguna valoración de mi parte.