Untitled - Fundación de Historia Natural Félix de Azara

Cadenas operativas líticas en el sitio Laguna Las Flores Grande… | Mariana S. Vigna 75
mismas se encuentran en constante interacción contribuyendo así a la complejidad
de los productos que se observan en el registro arqueológico (Escola 2004).
De esta manera, en cuanto a la expeditividad se pudo identificar el predominio
de artefactos confeccionados sobre lascas con mínimas modificaciones así como
la presencia de artefactos con filos naturales utilizados. Por otra parte, también
se utilizaron estrategias conservadoras debido a la escasez de materia prima lítica
que se evidencian a través de los artefactos con filos complementarios, el alto
uso de la talla bipolar, el uso de la talla bifacial y el uso de una forma base “lasca
de flanco de núcleo” cuyo filo natural fue utilizado.
Con respecto a la utilización del sitio, un punto que resulta interesante es que
si bien el tamaño de la muestra artefactual es pequeño, dentro de la misma
encontramos diferentes grupos tipológicos. En particular, llamó la atención la
recurrencia de los artefactos con puntas, para los que se propone –en el sentido
de Nelson (1991)– que se trata de artefactos confiables y con formas especializadas.
Es decir, que en este sitio se habrían llevado a cabo actividades especializadas
vinculadas a la perforación ya sea de huesos, madera, cerámica o cueros
para la tecnología y vestimenta. Otra evidencia de artefactos especializados son
los fragmentos de artefactos confeccionados por abrasión y pulido. Por otra
parte la alta presencia de ARS supone actividades generalizadas. Es decir que,
además de la producción lítica, se llevaron a cabo otras actividades. Esto está
evidenciado por la alta presencia de alfarería y, a pesar de que no tenemos evidencias
de huesos, maderas o cueros –por procesos postdepositacionales–,
sabemos por el análisis microscópico que los artefactos líticos fueron utilizados
(Vigna 2007). Entonces, la aplicación de las estrategias expeditiva y conservada
en la confección de los artefactos permitió obtener diferentes tipos de diseños
con los que se aprovechó la roca intensivamente y que a su vez permitían realizar
diferentes actividades.
Finalmente, para hablar de las formas de aprovisionamiento de las materias
primas, consideramos importante tener en cuenta las distancias a las que se
hallan ubicadas las canteras del sitio así como las distintas localizaciones de las
mismas. Así tenemos que las canteras de ftanita, ortocuarcita GSB, calcedonia y
cuarcita Formación Balcarce en el sistema serrano de Tandilia se hallan ubicadas
a una distancia aproximada de 200 km. La misma distancia puede aducirse
para la caliza silicificada localizada en las canteras uruguayas (González et al.
2005). Finalmente la metacuarcita y granito provenientes del sistema serrano de
Ventania se ubican a 300 km aproximadamente del sitio.
Asimismo hay que tener en cuenta que –según González (2005)– los grupos
que habitaron en el curso inferior del río Salado son cazadores‐recolectores
complejos, que muestran una redundancia en la ocupación de los sitios, implicando
un sedentarismo en términos de una base residencial que no se traslada
frecuentemente o que era usada con reiteración. De esta manera, la autora propone
que mediante de partidas logísticas, los grupos adquirirían las rocas de
forma directa, pero esto sólo sería válido para las materias primas que aparecen
en mayores porcentajes, en este caso, la ftanita y la ortocuarcita del GSB. En este
punto también se destaca que aunque la muestra es acotada, la presencia de fta‐