Untitled - Fundación de Historia Natural Félix de Azara

716 Entre Pasados y Presentes II
E‐¿Cómo supieron que fue él
Chango‐Porque entró en el escritorio y afanó, en la oficina
E‐¿Pero tiene llave
Chango‐No, pero entra con una cucharita, la pone así (muestra con la mano) y
entra.
E‐¿Le encontraron la plata
Chango‐Sí, la tenía guardada
E‐¿Y qué hicieron
Chango‐¡Lo fajaron, le dieron! (se ríe) Gritaba “yo no fui, yo no fui”
E‐¿Ya había robado antes él
Chango‐Sí ya…es chorro de hace rato…a mí también me robó…le saca el mate, la
azúcar, los cigarrillos, encendedor
E‐¿tiene amigos Valdovino
Chango‐Sí…otro compadrito…
E‐¿Tienen azúcar y yerba en el taller ¿Eso no se lo roban
Chango‐No porque cuando nos vamos se guardan las cosas en un armario. Se traba
con una maderita, si llega a faltar algo se da cuenta…por que si no…
Los empleados también sufren el riesgo de ser víctimas de robos. Aunque
hay lugares resguardados a los cuales muy pocos pacientes tienen acceso, ningún
ámbito está absolutamente aislado ya que los ayudantes tienen picaportes
que funcionan como llaves para abrir las puertas. De manera que la defensa
más común es la amenaza de persecución y eventuales represalias hacia quien
atente contra la propiedad de los empleados.
Otra forma de apropiación es el arrebato. Este tipo de comportamiento
muchas veces no aparenta una modalidad violenta ya que puede ser que la víctima
sea alguien con retardo profundo, quizás con poca capacidad de reacción.
Esto no implica que sea tan fácil quitar algo. A veces ellos mismos defienden
sus posesiones y otras veces otro individuo o un grupo asume la defensa de la
parte más débil. En este sentido, podría decirse que existen “cuidadores” de
otros pacientes, aunque con características diferentes de las observadas por
otras investigaciones en pabellones de mujeres (Balzano 2004). El cuidado entre
los varones incluye la vigilancia contra el robo pero, también, los regalos y préstamos
de productos de uso cotidiano –a veces para consumir conjuntamente–
como el mate o los cigarrillos.
El intercambio como eje de relaciones sociales
Karl Polanyi (1976) al definir el enfoque sustantivo del significado de lo económico
plantea la dependencia del hombre respecto de la naturaleza y de sus
semejantes, lo cual requiere un intercambio para su satisfacción material. La
obtención por parte de los pacientes de otros bienes de los que provee la administración
de la Colonia implica una actuación mediada por intercambios simbólicos
de diversa complejidad. Esto difiere de la mirada paternalista sobre las