Untitled - Fundación de Historia Natural Félix de Azara

674 Entre Pasados y Presentes II
35 años”, los comerciantes de la zona donaron mercadería y llegaron a participar
más de tres mil personas.
No deja de ser llamativo que, existiendo otras opciones para vincular la fábrica
al barrio –como la organización de un comedor o de un centro cultural–
ambas cooperativas se decidieron por una propuesta educativa. Justifican esta
elección en las características de las instalaciones disponibles. Ambas cuentan
con espacios con entradas propias e independientes a las áreas de producción.
En el caso de la Cooperativa Maderera Córdoba son las oficinas que utilizaba el
ex dueño y en el caso de la Cooperativa 19 de Diciembre es la antigua casa del
cuidador. Ambos espacios son adecuados para ser usados como aulas y poseen
instalaciones sanitarias propias.
Esta independencia de los espacios favorece el desarrollo de los emprendimientos
por dos razones. Por un lado, evita que los estudiantes tengan que atravesar
las áreas de taller al ingresar a la escuela, minimizando los riesgos de
accidente y las distracciones que esto podría ocasionar a los trabajadores: “los
chicos no pueden andar por la fábrica, no es que molesten sino que cada uno
debe tener su lugar”. Por otro lado, evita que el ruido de las máquinas dificulte
el dictado de las clases.
Sin embargo, también es un factor que permite que ambos emprendimientos
funcionen paralelamente sin estar obligados a una comunicación constante. No
obstante, esto no implica que no exista otro tipo de vinculación. Los educadores
varias veces han invitado a los trabajadores para que charlen con los chicos
sobre sus experiencias como cooperativistas y como especialistas en sus respectivos
rubros. Estas charlas no son solamente una estrategia para fortalecer los
lazos, sino que también son una herramienta didáctica interesante que permite
trabajar una relación fundamental para esta propuesta educativa como es el
vínculo entre educación y trabajo.
En esta vinculación hay también un acuerdo tácito según el cual las ERTs se
ocupan del mantenimiento de las instalaciones de los bachilleratos 4 y la CEIP
de los estudiantes: “que los muchachos se ocupen de los chicos y nosotros nos
ocupamos de la otra parte”.
Por lo que hemos podido observar hay un diálogo fluido entre los coordinadores
de los bachilleratos con el presidente de cada cooperativa. Este es un vínculo
aún en construcción y su desarrollo depende en gran medida del
desarrollo cotidiano de cada una de las cooperativas.
Otro aspecto relevante en esta relación son los horarios disponibles. Este
acceso independiente no implica que los bachilleratos manejen un horario por
fuera del horario general de la cooperativa, es decir, la oferta horaria en la cual
pueden desarrollarse es limitada. Los tres bachilleratos que existen en ERTs
funcionan desde las 13 a las 17 hs. lo que reduce las posibilidades de los trabajadores
de asistir a las clases. Este problema se intenta subsanar con un régimen
flexible de cursada. Esto implica que los estudiantes pueden adaptarla a sus
horarios irregulares de trabajo o modificarla en función de otro tipo de activida‐
4. En el Bachillerato de la Cooperativa Maderera Córdoba existe un contrato de comodato que estipula
esta división de responsabilidades, éste fue exigido por el Gobierno de la CABA para su habilitación.