Volumen VI - Novela - Banco de Reservas

INTRODUCCIÓN | guillermo Piña-Contreras
Las intertextualidades ocultas en Enriquillo son muchas: las que operan a nivel de la
concepción del mundo del autor, y a nivel de las concepciones literarias del escritor. Entre las
primeras, toda una corriente humanista del siglo xVIII es perceptible. En cuanto a las segundas,
el romanticismo tiene un papel muy importante en la obra del escritor dominicano.
La intertextualidad y la re-escritura de atala, la famosa novela de François-René de Chateaubriand,
publicada en 1801, en Enriquillo, merece particularmente nuestra atención. La
importancia de esta obra en América Latina, a principios del siglo xIx, da lugar, en efecto,
a numerosas obras, principalmente a la primera gran novela de la literatura dominicana.
En Enriquillo, varias intertextualidades de atala pueden ser detectadas, pero la re-escritura
de la novela de Chateaubriand da otros resultados: poner en conflicto las dos civilizaciones.
En atala, la crítica se refiere a las dos civilizaciones, pero más a la indígena porque considera
a los indios como salvajes que rechazaban la religión cristiana. Galván, por su parte, no
critica a los indios de la isla Española: para él los salvajes son los de otras tierras del Continente
que hacen la guerra a los españoles. Pero su héroe, Enriquillo, nunca es criticado, ni
siquiera en el momento de la rebelión cuando su actitud lo enfrenta al imperio español. En
la famosa novela dominicana no se critica nunca las costumbres ni los hábitos de los indios
que poblaban la isla de Santo Domingo. En la famosa obra de Chateaubriand el indio es
visto de otra manera: “Aquellos mismos Indios cuyas costumbres son tan interesantes, y
aquellas mismas mujeres que tan tierna solicitud me habían manifestado, pedían entonces
a gritos mi muerte, y naciones enteras retardaban su regreso para gozar del placer de ver
sufrir espantosos tormentos a un indefenso joven” 83 . Para el escritor dominicano una crítica
de esta índole es inadmisible. El quiere que sus indios sean perfectos: recordemos la pequeña
república modelo constituida por Enriquillo, o todavía mejor, las costumbres devotas de los
rebeldes del bahoruco.
El préstamo de Galván a Chateaubriand es evidente. Por ejemplo, los dos indios, Enriquillo
y Chactas, son instruidos; las dos mujeres, Mencía y Atala, son de padres españoles.
Igualmente los protectores de los indios eran españoles: para Enriquillo, don Francisco de
Valenzuela, y para Chactas, el padre de Atala. Tampoco olvidemos que el padre Aubry es
la referencia literaria del personaje de la novela que representa al padre de Las Casas. En
los dos textos, la rebelión es provocada por las dos mujeres. Sin embargo, estos intertextos
permiten a Galván dar una visión diferente de la de Chateaubriand que responsabiliza de
la revuelta tanto a los europeos como a los indios. En la novela dominicana, contrariamente
a la del gran escritor francés, exonera a los indios y echa la culpa ciertos colonos, cuya
perversidad les hizo actuar desconsideradamente, pero no al sistema, aunque ponga, muy
a pesar suyo, la Corona española en tela de juicio.
Las similitudes entre Enriquillo y atala –el mundo de los europeos en América, las dos
rebeliones, los personajes–, son mucho menores que las notorias diferencias que las separan.
A saber que Atala se rebela contra su propia tribu. Mencía, al seguir a su marido, se enfrenta
a los españoles. Galván quiere dar otra visión de la vida en “común” entre los conquistadores
y los indios, contar, de una manera muy diferente a la de Chateaubriand, el Continente
americano. La primera edición completa de Enriquillo, en 1882, marca un hito en la literatura
indigenista de América Latina.
83Chateaubriand, F. R., La Atala, El René, El último abencerrage, Trad. Manuel M Flamant, Paris, Librería de Rosa
y bouret, 1869, p.62.
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