03.04.2013 Views

Volumen VI - Novela - Banco de Reservas

Volumen VI - Novela - Banco de Reservas

Volumen VI - Novela - Banco de Reservas

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Cuando volví a la tienda, estaba como idiota. Mi mujer me miraba sin compren<strong>de</strong>r. Sintió<br />

temor <strong>de</strong> acercárseme. Permanecí largo rato sentado en una caja y luego le or<strong>de</strong>né:<br />

—Arregla nuestras cosas.<br />

Me oyó asombrada, pero obe<strong>de</strong>ció. Abrí una botella <strong>de</strong> ron y comencé a beber. Casi no<br />

oía a Cleto, que habiendo presenciado el suceso, me <strong>de</strong>cía:<br />

—¡Yo sabía que uté era macho, vale! ¡Así se le habla a ese carajo! ¡Eso mieida!<br />

d<br />

Se fue mi última noche <strong>de</strong> finca. Amaneció. A las ocho <strong>de</strong> la mañana llegaron los oficinistas<br />

con otro bo<strong>de</strong>guero. En sus rostros se notaba cierta pena, porque <strong>de</strong> cuantos hay en este<br />

<strong>de</strong>partamento por encima <strong>de</strong> los encargados <strong>de</strong> tiendas, creo que son los únicos humanos.<br />

La voz <strong>de</strong>l que tomaba el inventario sonaba monótona:<br />

—Seis botellas <strong>de</strong> ron, a treinta. Siete latas <strong>de</strong> mantequilla, a treinta y cinco. Sesenta<br />

yardas <strong>de</strong> tela, a cuarenta. Diez botellas <strong>de</strong> vino, a treinta y cinco…<br />

El nuevo bo<strong>de</strong>guero vaciaba graneros. Yo sumaba las ór<strong>de</strong>nes y contaba fichas <strong>de</strong> carne.<br />

Mi mujer sollozaba en la casa. Los habitantes <strong>de</strong>l batey cercaban la bo<strong>de</strong>ga preguntando:<br />

—¿Qué pasando a compai bo<strong>de</strong>guel?<br />

¿Lo van a traladar?<br />

—¡Tan buena persona!<br />

¿Será botao?<br />

Los más, <strong>de</strong>spreocupadamente <strong>de</strong>cían:<br />

—Da lo mismo. No hay bo<strong>de</strong>guero bueno. Tó son ladrone.<br />

Vieja Mercé lloraba. Gemía:<br />

—¡Ay, Danielito! ¡Ay, Danielito! ¿Quién me dará el pan ahora pa mi hijo lisiao? ¿Quién…?<br />

Nica y Manuela, también lloriqueando, consolaban a mi mujer. Viejo Dionisio no estaba<br />

en casa. Cleto andaba por el batey vecino.<br />

Los que tomaban el inventario terminaron. Liquidaron las partidas. La voz <strong>de</strong> un oficinista<br />

dijo:<br />

—Tienes cuatro pesos y un centavo <strong>de</strong> over, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el último inventario a esta fecha.<br />

Yo me había cargado tres pesos por temor a tener déficit.<br />

Firmamos los papeles y salí <strong>de</strong> la tienda para no entrar más.<br />

¡Qué sensación! Yo no era el mismo. Tropezaba al andar. No sabía estar libre. ¡Ay, la<br />

bo<strong>de</strong>ga! Tenía ganas <strong>de</strong> llorar.<br />

Me fui con los oficinistas al pueblo. Mi mujer quedó en el batey. A las tres horas me<br />

hallaba <strong>de</strong> regreso en un camión. El gentío cercó el vehículo y la casa, mientras cargábamos<br />

los escasos muebles. Me entristecían las <strong>de</strong>mostraciones <strong>de</strong> afecto <strong>de</strong> las gentes, que ahora<br />

sinceramente sentían mi partida.<br />

Viejo Dionisio y Cleto ya habían regresado. El mayordomo casi no hablaba. De rato en<br />

rato, sólo <strong>de</strong>cía:<br />

—¡Miren que vaina! ¡Trabajar con eto maldito e una <strong>de</strong>gracia! ¡Miren que vaina!<br />

El policía, malhumorado, como gruñendo, murmuraba entre dientes:<br />

—¡Qué jodienda! ¡Maidita sea!<br />

Y escupía a diestra y siniestra.<br />

Después… yo creo que estuve algo idiota, porque no podía <strong>de</strong>finir mi verda<strong>de</strong>ro estado,<br />

a pesar <strong>de</strong> que a mi lado mi mujer sollozaba.<br />

853

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!