El Mapa escolar: un instrumento de la política ... - unesdoc - Unesco

El mapa escolar :
un instrumento de la política de educación
regionales, quienes, a su vez, lo harían en los funcionarios
centrales. Llevado esto al extremo, el mapa escolar termina
por convertirse en otro instrumento más al servicio de una
planificación burocrática.
(b) El riesgo de que se legitimicen decisiones básicamente injustas
y anti-democráticas. Una amplia consulta a los grupos interesados
efectuada previamente a la toma de decisión, constituye un
excelente medio de reunir información acerca de los deseos de la
población, y en ningún caso esa consulta debe servir de pretexto
o de encubrimiento para una determinada política. La diversidad
de opiniones expresadas por diferentes colectividades (suponiendo
que éstas estén debidamente informadas - y es éste el papel del
mapa escolar - y que dichas opiniones lleguen a un consenso)
es tal, que le permitirá al poder central adoptar la política que
su elección, la misma, sin duda que hubiese adoptado sin proceder
a una consulta.
(c) El riesgo de que detenten el poder los grupos más fuertes y mejor
organizados. Si, para evitar los dos riesgos antes señalados, se
procede de modo tal que las decisiones sobre el mapa escolar sean
asumidas exclusivamente por aquellos órganos en los que se ejerce
la participación - lo que, aunque utópico, es teóricamente posible -,
puede surgir un peligro todavía mayor: que grupos organizados
que tienen una representación marginal (pero que disponen de
tiempo para desempeñarse en los asuntos políticos), se apoderen
en su propio provecho de la representación en las comisiones
encargadas del mapa escolar. La experiencia de la participación
universitaria en los Estados Unidos muestra cuan real es este
riesgo. Pero, la situación puede ser más grave aún cuando, como
sucede en algunos países, la "élite" local (el jefe de policía, el
comandante militar, los hombres de negocios, el presidente de un
club social, etc. ) so capa de la "participación popular" participa
en una nueva forma de planificación "popular", en nombre de los
pobres y de los oprimidos.
En resumidas cuentas, y sin pretender con ello agotar el tema, debe
reconocerse con lucidez, que si la participación sólo sirve para
ocultar temporalmente a cada miembro de la comunidad las exigencias
reales de la vida colectiva, conduciría, sin ningún género de dudas, ya
sea a una reacción de los reflejos de autoridad que parecerían entonces,
sanos y deseables, ya sea a la legitimación de un proceso político
especialmente regresivo. Y sería una curiosa paradoja que se ahogara
la democracia adoptando la participación.
E. CONTENIDO DEL PRESENTE TRABAJO
Como ha podido advertirse, el mapa escolar plantea el problema del
poder de planificar y de decidir en materia de educación. En las
páginas que siguen no daremos ninguna fórmula para resolverlo. Se
trata, en efecto, de un problema político que no es posible zanjar con
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