09.05.2013 Views

Zygmunt Bauman La cultura como praxis

Zygmunt Bauman La cultura como praxis

Zygmunt Bauman La cultura como praxis

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

46 LA CULTURA COMO PRAXIS<br />

espacio debe ser emergente, no artificioso; y, aun así, solo puede<br />

ser un orden momentâneo, y un orden que ni puede modelar<br />

de manera alguna Ia figura de ordenes futuros ni determinar<br />

su aparición.<br />

<strong>La</strong> primera percepción de Ia futilidad de Ia concepción sistêmica<br />

de <strong>cultura</strong> fue ei formidable logro de Claude Lévi-Strauss,<br />

cuyo trabajo inspiro buena parte de los argumentos de Ia primera<br />

edición de este libro. Más que un inventario de un número<br />

fínito de valores supervisando todo ei campo de interacción<br />

o un código estable de preceptos conductuales relacionados y<br />

complementarios, Lévi-Strauss describió Ia <strong>cultura</strong> <strong>como</strong> una<br />

estructura de elecciones, una matriz de permutaciones posibles,<br />

finitas en número, pero prácticamente incontables. Hágase<br />

notar, de paso, que, aunque él rechazase tener ningún parentesco<br />

con esta estratégia, ei concepto de formación discursiva<br />

de Michel Foucault, capaz de generar proposiciones contradictorias<br />

sin perder Ia identidad propia, apenas era concebible<br />

sin ei cambio decisivo dei discurso <strong>cultura</strong>l impreso con gran<br />

poder de persuasión por Lévi-Strauss.<br />

<strong>La</strong> pasión ordenadora de los científicos sociales se extiende<br />

por su propio pátio; luego, Lévi-Strauss fue prontamente tachado<br />

de estructuralista, de Ia misma forma que ei filo revolucionário<br />

de Ia sociologia de Georg Simmel fue despuntado, domesticado<br />

y difuminado durante anos clasificándolo <strong>como</strong> «formalista».<br />

Sin embargo, este extrano «estructuralista» hizo más que<br />

ningún otro pensador para hacer estallar Ia concepción ortodoxa<br />

de Ia estructura <strong>como</strong> un vehículo de reproducción monótona,<br />

repetitiva e idêntica a si misma. En Ia perspectiva de Lévi-<br />

Strauss, Ia estructura se ha convertido de jaula en catapulta, de<br />

un dispositivo que recorta/trunca/encadena/entorpece en un<br />

determinante de libertad, de un arma de Ia uniformidad en una<br />

herramienta de Ia variedad, de un escudo protector de Ia estabilidad<br />

en motor de un cambio inacabable, siempre incompleto.<br />

Además, Lévi-Strauss nego acaloradamente Ia existência de algo<br />

r<br />

IL<br />

INTRODUCCIÓN 47<br />

así <strong>como</strong> Ia estructura de una «sociedad» o «<strong>cultura</strong>». Si bien es<br />

cierto que todas Ias actividades humanas, desde Ia narración de<br />

mitos hasta Ia cocina y los nombres de Ias mascotas, pasando por<br />

Ia elección de cónyuge, están estructuradas, Ia idea de estructura<br />

<strong>como</strong> tal no es sino una abstracción de esta restricción dei azar<br />

sobre los tipos infinitamente variados de interacciones humanas.<br />

Con ei tiempo, esa estratégia, que en su momento ya se experimento<br />

<strong>como</strong> una liberación, ha demostrado ser un paso decisivo.<br />

Acabo con muchas cuestiones estériles que ocupaban<br />

Ias mentes y Ias prácticas de los estudiosos de Ia <strong>cultura</strong>, encerrando<br />

a muchos de ellos en un callejón sin salida. Personalmente,<br />

encontre que ei rasgo más atractivo de Ia revolución levistraussiana<br />

fue ei final dei alineamiento de Ia <strong>cultura</strong> con ei<br />

«lado continuista» dei dilema entre continuidad y discontinuidad.<br />

Ya no cabia volver a contemplar Ia <strong>cultura</strong> <strong>como</strong> una restricción<br />

de Ia capacidad inventiva dei ser humano, <strong>como</strong> un<br />

instrumento de Ia monótona e invariable reproducción de Ias<br />

formas de vida, resistente ai cambio a menos que fuerzas externas<br />

Io empujasen hacia él. <strong>La</strong> <strong>cultura</strong> de Lévi-Strauss era una<br />

fuerza dinâmica en si misma (apenas quedaba un paso desde su<br />

postura hasta Ia iteración de Jacques Derrida, Ia novedad engranada<br />

en cada acto de repetición), y Ia propia oposición entre<br />

continuidad y discontinuidad parecia perder mucho de su poder<br />

perturbador. Entonces los antiguos adversários parecían aliados<br />

leales en un proceso sin fin de creatividad <strong>cultura</strong>l: Ia continuidad<br />

pasaba a ser pensada <strong>como</strong> una inacabable cadena de<br />

permutaciones e innovaciones.<br />

Supongo que ei mensaje de Lévi-Strauss resultó algo debilitado<br />

por Ia atención que presto, en detrimento de otros aspectos,<br />

a otro dilema desorientador, ei de sincronia versus diacronía.<br />

Tal vez a ello se anadió Ia mala suerte de ser manipulado<br />

por Jean-Paul Sartre en Ia famosa polêmica en torno a historia e<br />

historicidad, durante Ia cual ei tema derivo hacia unas posiciones<br />

y enfoques que, desde ei punto de vista de Ia teoria <strong>cultura</strong>l,

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!