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el ...narrativas contaminadas - D-Scholarship@Pitt - University of ...

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gran reformista, especie de arquetipo que mira con desdén al común de los<br />

mortales. Aunque los reformistas son personas inevitables en la vida nacional,<br />

ahora mismo como hace cien años, los diarios aparecen llenos de artículos<br />

reformistas, o de gente reformista. Todos hemos sido alguna vez reformistas.<br />

(Bajo <strong>el</strong> samán 105-7) 170<br />

Desde esta perspectiva, y reduciendo la discusión a las tres nov<strong>el</strong>as representativas d<strong>el</strong><br />

inicio de los treinta en Venezu<strong>el</strong>a, pasamos a analizar Cubagua estableciendo una r<strong>el</strong>ación tácita<br />

y constante con Doña Bárbara y Las lanzas coloradas, pues tuvieron éstas una inscripción<br />

inmediata como obras paradigmáticas de un momento que fue visto, justamente, como de<br />

esplendor de la narrativa venezolana. Si bien difieren, principalmente, en que <strong>of</strong>recen visiones<br />

unidimensionales d<strong>el</strong> país y de su historia −no obstante, pesimista la de Uslar Pietri y optimista<br />

la de Gallegos−, sus cualidades y sus propuestas estaban articuladas a la discusión hegemónica o<br />

por la hegemonía. Como vimos en Araujo, en <strong>el</strong>las se daba un ordenamiento d<strong>el</strong> antes y después,<br />

un paso en una dirección determinada y con una receta que puede ser ya reconocida como la<br />

historia política d<strong>el</strong> país. Mientras que la complejidad pluridimensional de Cubagua aportaba lo<br />

que no ha tenido ninguna otra; no asumirse como renovadora a ultranza ni como conclusiva de<br />

ningún proceso, sino <strong>of</strong>recerse como un no-lugar contrafactual, <strong>el</strong> espacio de un extraño oráculo<br />

literario y político, lleno de potenciales resonancias que no fueron oídas. 171 Pero, Cubagua no fue<br />

una generación espontánea de la literatura venezolana, ni un tour de force, como parecieran<br />

sugerir algunos de los críticos que la han estudiado. Fue <strong>el</strong> resultado de un estudio y reflexión<br />

170 “Algo sobre Cubagua”. El Nacional. Caracas, 13.12.1959.<br />

171 Vilanova explica que “la nov<strong>el</strong>a superaba ampliamente lo que hoy se denomina ‘horizonte de la expectativa’, no<br />

sólo d<strong>el</strong> lector contemporáneo, sino también <strong>el</strong> de los nov<strong>el</strong>istas latinoamericanos y <strong>el</strong> de los críticos en general [...]<br />

(234) Miliani afirma que Doña Bárbara y Las lanzas coloradas deslumbraron al público y opacaron Cubagua, a lo<br />

que se le suma <strong>el</strong> su “ruptura de cánones” que le restara posibilidad de éxito (Introducción a Cubagua xxxii). Lo que<br />

no explican estos autores es porqué, luego de apagado tal deslumbre y habituados a los experimentalismos<br />

narrativos, la obra no ha sido todavía plenamente rescatada.<br />

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