13.06.2013 Views

el ...narrativas contaminadas - D-Scholarship@Pitt - University of ...

el ...narrativas contaminadas - D-Scholarship@Pitt - University of ...

el ...narrativas contaminadas - D-Scholarship@Pitt - University of ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

haya declarado de “izquierda”, y que los manifiestos hayan querido introducir una<br />

dimensión política en la interpretación final de los alcances de su proyecto.<br />

(“Pap<strong>el</strong>es de trabajo” 16)<br />

Pero, paso seguido, este crítico expresa la desconfianza de una posible “neutralidad<br />

ideológica”, en cuanto “puede ir para un lado u otro [izquierda como derecha], según las<br />

circunstancias” (ibíd. 16), que pareciera recordar la inestabilidad entre comunismo y fascismo<br />

vivido en la Europa de entreguerras. Pero de ser acertada esta percepción, habría que separar una<br />

constitución anarquizante de las vanguardias de la asunción política propiamente militante, sin<br />

que se nieguen una a la otra. De esta manera, se escaparía d<strong>el</strong> punto de vista prescriptivo 35 que<br />

reduce <strong>el</strong> fenómeno de las vanguardias (qué y cuál manifestación) al lecho de Procusto de sus<br />

límites explicativos, y se vería como una suerte de discusión interna, con resultados diversos.<br />

Pudiéramos pensar desde aquí las vanguardias como un ejercicio crítico y contestatario<br />

en <strong>el</strong> plano mismo de lo social (es decir, no sólo en <strong>el</strong> ámbito de lo literario, de la tradición<br />

artística), expresado en la asunción de un énfasis que pr<strong>of</strong>undizó <strong>el</strong> sentido renovador y la<br />

retórica agresiva (Schwartz 9), como rechazo de valores sociales, éticos, políticos y culturales,<br />

imperantes entre los grupos hegemónicos de las primeras décadas d<strong>el</strong> siglo XX. Expresión<br />

entonces, en Latinoamérica, de un proceso de radicalización antioligárquica de los grupos<br />

medios en ascenso y d<strong>el</strong> proletariado, 36 en un momento que Rama afilia al surgimiento d<strong>el</strong><br />

35 Incluso, esta voluntad de instrumentalización de las vanguardias, incorporaría a Lukács, quien rechaza “su<br />

carácter de protesta, porque esa protesta es abstracta, carente de perspectiva histórica, ciega para las fuerzas que<br />

luchan en contra <strong>el</strong> capitalismo” (Burger 159). Desde aquí, la negación social de Adorno, la carencia de función<br />

como inscripción en la praxis social de Burger, y <strong>el</strong> rechazo por insuficiencia de Lukács se ubican en una misma<br />

perspectiva prescriptiva: es vanguardia en la medida en que sirve o no sirve en una constitución social determinada.<br />

36 Para Osorio, esta conjunción es una “‘oposición antioligárquica’ (burguesía y capas medias, con participación y<br />

presión de sectores populares), que hace que su tónica programática, por lo menos en sus momentos ascendentes<br />

iniciales, sea antioligárquica y antimperialista, y adquiera un carácter de masas en un grado hasta entonces nunca<br />

visto (La formación de la vanguardia 41). El autor no deja de marcar <strong>el</strong> carácter contradictorio, sin embargo, de sus<br />

respectivos proyectos históricos.<br />

37

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!