Periodoncia.Eley.6a.Ed
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Relación entre los tratamientos periodontal y restaurador 403<br />
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.<br />
tiva el soporte de los dientes, que por lo demás son menos capaces de resistir<br />
las fuerzas oclusivas aplicadas sobre ellos y más especialmente las<br />
fuerzas adicionales aplicadas sobre ellos por la prótesis.<br />
Resulta esencial que cualquier enfermedad periodontal se trate de<br />
forma efectiva antes de llevar a cabo un trabajo protésico fijo o removible.<br />
Si la periodontitis crónica avanzada persiste, el pronóstico de la dentición<br />
restante y de cualquier prótesis será extremadamente malo. En algunas<br />
situaciones con periodontitis crónica avanzada, puede ser necesario<br />
proporcionar prótesis provisionales como parte de una transición planificada<br />
hacia una prótesis completa. Sin embargo, estas prótesis nunca son<br />
estables y siempre reducen en cierta medida la vida de la dentición restante.<br />
El objetivo de cualquier prótesis es extender la carga oclusal de los dientes<br />
que faltan a tantos dientes remanentes como sea posible y evitar la<br />
sobrecarga de los dientes de soporte. En las bocas controladas periodontalmente,<br />
la elección suele estar entre las opciones dentosoportadas, un esquelético,<br />
una prótesis parcial removible de cromo-cobalto y un puente fijo. Se<br />
tiende a limitar el uso de prótesis fijas dentosoportadas a tramos edéntulos<br />
cortos, donde los dientes pilares tienen un soporte y salud periodontales<br />
buenos, y a usar prótesis removibles en situaciones en las que falta un<br />
mayor número de dientes y, en consecuencia, existen menos dientes pilares.<br />
El diseño de una prótesis de cromo-cobalto se dirige a distribuir la<br />
carga oclusal hacia todos los dientes de soporte posibles utilizando apoyos<br />
oclusales. También pretende minimizar la tensión sobre los dientes pilares<br />
mediante fuerzas recíprocas aplicadas sobre ellos con brazos de retención.<br />
Además, con su diseño esquelético, uno de los objetivos es (donde sea<br />
posible) dejar descubiertos los márgenes gingivales de los dientes de<br />
soporte y reducir de esta forma su retención de placa y evitar el traumatismo<br />
gingival. Sin embargo, las prótesis de cromo-cobalto aún pueden<br />
aplicar una tensión excesiva sobre los dientes pilares si el espacio desprovisto<br />
de dientes es largo y especialmente en los lugares donde existe un<br />
extremo libre. En estas situaciones, se puede producir la inclinación y la rotación<br />
de los dientes pilares y esto puede reducir su vida funcional. Además,<br />
los movimientos de un extremo libre pueden causar traumatismo gingival<br />
y de la mucosa. Estas tendencias se pueden minimizar con una amplia<br />
distribución de las cargas oclusales y brazos de retención.<br />
Estas fuerzas son mucho más lesivas con las prótesis parciales removibles<br />
acrílicas mal diseñadas. Los dientes con soporte periodontal reducido<br />
pueden rotar por retenedores mal ajustados y componentes de la prótesis<br />
mal encajados y se puede causar un traumatismo gingival considerable<br />
sobre los tejidos blandos por el movimiento de la prótesis. Además, estas<br />
dentaduras retienen la placa y causarán irritación gingival si no se mantienen<br />
escrupulosamente limpias.<br />
Después de la colocación de una dentadura parcial nueva habrá un período<br />
de adaptación periodontal y el resultado dependerá en gran parte de su diseño.<br />
Los problemas descritos con anterioridad pueden solventarse colocando<br />
una prótesis fija dentosoportada (puente). Sin embargo, es más caro y requiere<br />
una gran experiencia clínica y técnica.<br />
Valderhaug et al. (1993) realizaron un estudio longitudinal de 15 años de<br />
duración en el que se incluyeron un total de 108 puentes realizados en 102<br />
pacientes y llevados a cabo por estudiantes sénior en una universidad de<br />
odontología en Noruega. La cantidad de placa acumulada era similar en los<br />
dientes con corona y en los dientes de control, pero se observó una gingivitis<br />
acusada con mayor frecuencia en los dientes con corona con márgenes subgingivales.<br />
Se apreció un ligero incremento de la profundidad promedio de<br />
la bolsa en los dientes con corona, pero no en los dientes de control, aunque<br />
no se pudieron detectar diferencias en los niveles de soporte óseo. También<br />
hubo un incremento regular en la aparición de caries secundaria alrededor de<br />
los dientes pilares desde el 3,3% en el quinto año hasta el 12% a los 15 años.<br />
Estos hallazgos dejan claro que las coronas de los dientes pilares deberían<br />
tener márgenes supragingivales siempre que sea posible. La higiene oral y la<br />
dieta deberían ser monitorizadas continuamente, al igual que el estado periodontal<br />
y de la caries.<br />
La cantidad de soporte alrededor de los dientes pilares es crucial en el<br />
éxito de un puente. Esto suele basarse en la ley de Ante, que propone que<br />
en un puente fijo, la zona de la superficie radicular insertada del diente pilar<br />
debería ser igual o mayor que la zona de superficie radicular equivalente de<br />
los dientes que se van a sustituir. La aplicación global de esta «ley» supone<br />
una gran limitación en el uso de puentes en pacientes con un soporte periodontal<br />
reducido. Sin embargo, puesto que los cuadros periodontalmente<br />
saludables son producidos primero y mantenidos después, se ha demostrado<br />
que se puede conseguir una función satisfactoria con puentes con un<br />
diseño de arco cruzado soportado por dientes con un soporte periodontal<br />
muy reducido (Nyman y Lindhe, 1979; Nyman y Ericsson, 1982). En muchos<br />
de estos casos, los puentes satisfactorios se realizaron con el soporte<br />
de sólo el 16% de la supuesta área de la raíz de los dientes sustituidos. Sin<br />
embargo, estos puentes implicaban toda la arcada y tuvieron la máxima<br />
ventaja del soporte de arco cruzado. También da buenos resultados aumentar<br />
la longitud clínica de la corona de los dientes implicados con pérdida de<br />
inserción tratados periodontalmente. Esto permite la preparación de pila <br />
res con buena retención y, además, favorece la provisión de márgenes supragingivales<br />
cuando la estética lo permite.<br />
Estos tipos de puentes probablemente son preferibles a las prótesis parciales<br />
removibles en los casos con soporte periodontal reducido, en especial<br />
donde existe movilidad dental. Esto se debe a que el puente fijado en la<br />
arcada completa tiene mayor rigidez y proporciona una distribución más<br />
favorable de la función de los dientes restantes. Además, los mecanorreceptores<br />
dentro del ligamento periodontal limitan la fuerza generada por los<br />
músculos de la masticación mediante un mecanismo de retroalimentación<br />
y, por tanto, limitan las fuerzas oclusales sobre el puente.<br />
Sin embargo, como ya se ha comentado antes, existen tres limitaciones<br />
importantes en este tipo de trabajo. Primero, es más costoso, por lo que<br />
queda fuera del alcance de muchos pacientes de esta categoría. Segundo, y<br />
más importante, sólo tendrá éxito si la enfermedad periodontal se trata primero<br />
de forma efectiva y, después, se mantiene tanto una buena higiene oral<br />
como un mantenimiento regular cada 3 meses. Tercero, este trabajo es extremadamente<br />
exigente en cuanto a la experiencia clínica del dentista y del<br />
técnico dental. Esto se debe a que todas las coronas deben encajar de forma<br />
perfecta con márgenes sin filtraciones que son fáciles de limpiar y toda la<br />
oclusión debe estar en balanceo en las posiciones de intercuspidación, retrasada,<br />
lateral y protrusiva.<br />
Diseño Del Póntico<br />
Los pónticos deben estar diseñados de forma que pueda llevarse a cabo de<br />
forma efectiva la limpieza interproximal de los dientes pilares. Esto significa<br />
que tiene que poder pasarse el hilo de seda dental a través del espacio<br />
interproximal entre los pilares y los pónticos. También tendría que poderse<br />
pasar el hilo de seda dental por debajo de la superficie interna del puente<br />
para limpiar la superficie adyacente a la mucosa del puente. Si se proporciona<br />
este diseño, se puede pasar el hilo de seda dental utilizando un enhebrador<br />
o un hilo tipo Superfloss con su extremo rígido. Entonces se pueden<br />
alcanzar las superficies proximales tanto de los pilares como de la superficie<br />
inferior del puente.<br />
El diseño ideal para un póntico posterior es el denominado póntico en<br />
forma de bala (fig. 30.8A). Tiene un punto de contacto con la mucosa del<br />
reborde edéntulo y amplios espacios interproximales para permitir el<br />
acceso al hilo de seda dental. Su superficie oclusal también es algo estrecha<br />
en comparación con el diente natural correspondiente con el fin de<br />
reducir las cargas oclusales sobre él. No obstante, este diseño no es posible para<br />
los pónticos anteriores por consideraciones estéticas. Suelen tener un diseño<br />
de apoyo único, que se extiende ligeramente sobre la superficie vestibular<br />
de la cresta (fig. 30.8B). La superficie interna debería hacer pendiente<br />
hacia arriba a partir del margen vestibular de forma que pase claramente<br />
de la superficie de la cresta palatalmente. La superficie inferior debería<br />
ser suave y ligeramente convexa para una limpieza fácil. Las dimensiones<br />
anteroposterior de la cara vestibular deberían parecerse al diente al que<br />
sustituyen, pero también tendrían que tener espacios interproximales suficientemente<br />
anchos para permitir un buen acceso del hilo de seda dental<br />
(fig. 30.8C). Es esencial que todas las superficies interproximales de las