Principios y directrices recomendados sobre Derechos Humanos y

tienen por objeto reducir el sufrimiento y los
daños causados a las víctimas y ayudar en su
recuperación y rehabilitación. Señala además
que, si bien no son obligatorias, la aplicación de
esas disposiciones puede acarrear importantes
beneficios, por ejemplo, aumentando la probabilidad
de que las víctimas cooperen en las investigaciones
y las actuaciones penales, y previniendo
mayores daños, como que vuelvan a ser víctimas
de la trata. Aunque esos requisitos no son vinculantes,
los Estados Partes deben estudiar la posibilidad
de aplicarlos y se les insta a hacerlo en la
mayor medida posible, dentro de las limitaciones
de recursos, entre otras (párr. 62).
Los requisitos del Convenio Europeo sobre la trata
de seres humanos en lo que atañe al apoyo y la
asistencia a las víctimas son mucho más estrictos
que los del Protocolo. Reflejan cabalmente la prioridad
que asignan a esta cuestión los Principios y
Directrices sobre la trata de personas. Los Estados
Partes en el Convenio Europeo sobre la trata de
seres humanos deben proporcionar a todas las
víctimas que se encuentren dentro de sus respectivos
territorios una serie de mecanismos diseñados
para ayudar a las víctimas en su recuperación
física, psicológica y social. Esa asistencia también
debe extenderse a las personas que han sido
provisionalmente identificadas como víctimas y, lo
que es fundamental, no pueden reservarse exclusivamente
a aquellas que han convenido en actuar
como testigos (arts. 10 2) y 12 6)). Debe incluir,
como mínimo, alojamiento adecuado y seguro,
apoyo psicológico y asistencia material en el nivel
de subsistencia, acceso a tratamiento médico de
urgencia, servicios de traducción e interpretación,
asesoramiento e información, asistencia con los
procedimientos judiciales y, en el caso de los niños,
acceso a la educación (art. 12 1)). Se prevén
disposiciones añadidas para las víctimas que se
encuentran legalmente en el territorio del Estado
Parte (art. 12 3) y 4)). La Convención de la SAARC
pide a los Estados Partes que creen hogares y albergues
de protección para la rehabilitación de las
víctimas y que dispongan lo necesario para que las
víctimas cuenten con asesoramiento jurídico, atención
psicológica y asistencia sanitaria (art. IX 3)).
Los acuerdos y declaraciones normativas de rango
regional sin fuerza jurídica obligatoria afirman
la importancia de velar por que las víctimas de
la trata de personas reciban apoyo y asistencia.
En Europa, esos documentos incluyen el Plan de
la UE sobre mejores prácticas 324 , la Opinión de
octubre de 2005 del Grupo de Expertos de la
Comisión Europea 325 , la Opinión de mayo de
2004 del Grupo de Expertos de la Comisión
Europea 326 , el Plan de Acción de la OSCE 327 y la
Declaración de Bruselas 328 . En África, incluyen el
Plan de Acción de Uagadugú 329 , la Declaración
sobre la Trata de Personas de la CEDEAO 330 y
el Plan de Acción Inicial de la CEDEAO 331 . En
América Latina, incluyen las Recomendaciones
de la OEA sobre la Trata de Personas 332 y la
resolución 2348 de la Asamblea General de la
OEA 333 . En Asia, el Memorando de Entendimiento
324
Plan de la UE sobre mejores prácticas, párr. 4 vii).
325
Grupo de Expertos en la trata de seres humanos de la
Comisión Europea, Opinión de 11 de octubre de 2005
en relación con la conferencia «Tackling human trafficking:
Policy and best practices in Europe» y la documentación
conexa, 2.
326
Grupo de Expertos sobre trata de seres humanos de
la Comisión Europea, Opinión de 18 de mayo de 2004
sobre el período de reflexión y el permiso de residencia
para las víctimas de la trata de seres humanos, párr. 3.
327
Plan de Acción de la OSCE, secc. V.
328
Declaración de Bruselas, párr. 13.
329
Plan de Acción de Uagadugú, págs. 1 y 2.
330
Declaración de la CEDEAO sobre la Trata de Personas,
párr. 4 y 5.
331
Plan de Acción Inicial de la CEDEAO, págs. 4 y 5.
332
Recomendaciones de la OEA sobre la Trata de
Personas, secc. IV 1) y 2).
333
OEA, Esfuerzos de Cooperación Hemisférica para
Combatir la Trata de Personas y II Reunión de Autoridades
Nacionales en Materia de Trata de Personas, adoptado en
la cuarta sesión plenaria, 5 de junio de 2007, AG/RES.
2348 (XXXVII O/07), preámbulo, párr. 1.
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