You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
mi vida.<br />
—No po<strong>de</strong>mos administrarte drogas, si es eso lo que buscas. Siento que tengas<br />
malos sueños. ¿Quieres que <strong>de</strong>jemos la luz encendida?<br />
—¡No te rías <strong>de</strong> mí! —dijo En<strong>de</strong>r—. Tengo miedo <strong>de</strong> volverme loco.<br />
<strong>El</strong> doctor había acabado <strong>de</strong> vendarle. Mazer le dijo que podía irse. Se fue.<br />
—¿De verdad tienes ese miedo? —preguntó Mazer.<br />
En<strong>de</strong>r reflexionó y no estaba seguro.<br />
—En mis sueños —dijo En<strong>de</strong>r—, nunca estoy seguro <strong>de</strong> ser yo.<br />
—Los sueños extraños son una válvula <strong>de</strong> escape, En<strong>de</strong>r. Por primera vez en<br />
tu vida estás viviendo bajo una pequeña presión. Tu cuerpo busca la forma <strong>de</strong><br />
compensarla, nada más. Ya eres un chico gran<strong>de</strong>. Es hora <strong>de</strong> que <strong>de</strong>jes <strong>de</strong> tener<br />
miedo a la noche.<br />
—De acuerdo —dijo En<strong>de</strong>r.<br />
Y entonces tomó la <strong>de</strong>cisión <strong>de</strong> no volver a hablar <strong>de</strong> sus sueños con Mazer.<br />
Los días <strong>de</strong>sfilaban, con batallas cada día, hasta que al final En<strong>de</strong>r se instaló<br />
en la rutina <strong>de</strong> la <strong>de</strong>strucción <strong>de</strong> sí mismo. Comenzó a dolerle el estómago. Le<br />
pusieron a dieta, pero enseguida perdió el apetito. « ¡Come!» , <strong>de</strong>cía Mazer, y<br />
En<strong>de</strong>r se llevaba mecánicamente la comida a la boca. Pero si nadie le <strong>de</strong>cía que<br />
comiera, no comía.<br />
Otros dos jefes <strong>de</strong> escuadrón se <strong>de</strong>rrumbaron como Petra; la presión sobre<br />
los <strong>de</strong>más creció. Ahora el enemigo les triplicaba o cuadruplicaba en número en<br />
todas las batallas; a<strong>de</strong>más, se retiraban con may or rapi<strong>de</strong>z cuando las cosas les<br />
iban mal, y se reagrupaban y prolongaban las batallas cada vez más; algunas<br />
veces duraban horas, hasta que al final <strong>de</strong>struían a la última nave enemiga. En<strong>de</strong>r<br />
comenzó a cambiar a sus jefes <strong>de</strong> batallón en la misma batalla, haciendo entrar a<br />
los que estaban frescos y <strong>de</strong>scansados para que ocuparan el lugar <strong>de</strong> los que<br />
estaban empezando a mostrar torpeza y falta <strong>de</strong> reflejos.<br />
—¿Sabes una cosa? —le dijo Bean una vez al tomar el mando <strong>de</strong> los cuatro<br />
cazas restantes <strong>de</strong> Hot Soup—, este <strong>juego</strong> no es tan divertido como solía ser.<br />
Un día en una práctica, cuando En<strong>de</strong>r estaba instruyendo a sus jefes <strong>de</strong><br />
batallón, la sala se ennegreció y se <strong>de</strong>spertó en el suelo, con la cara<br />
ensangrentada allá don<strong>de</strong> había golpeado los controles.<br />
Entonces le metieron en la cama y estuvo muy enfermo tres días. Recordaba<br />
haber visto caras en sus sueños, pero no eran caras reales, y lo sabía incluso<br />
mientras creía que las veía. Creía algunas veces que veía a Valentine, y algunas<br />
veces a Peter; algunas veces a sus amigos <strong>de</strong> la Escuela <strong>de</strong> Batalla, y otras veces<br />
a los insectores viviseccionándole. Una vez parecía muy real, cuando vio al<br />
coronel Graff inclinado sobre él, hablándole en voz baja, como un padre<br />
afectuoso. Pero entonces se <strong>de</strong>spertó y sólo encontró a su enemigo, Mazer<br />
Rackham.<br />
—Estoy <strong>de</strong>spierto —dijo En<strong>de</strong>r.