15.05.2013 Views

el judaísmo y la mujer

el judaísmo y la mujer

el judaísmo y la mujer

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

298/<br />

www.wzo.org.il/es<br />

concedió] El sumo sacerdocio [descendiente de su hijo<br />

Levi], <strong>el</strong> reinado [de su hijo Iehuda], <strong>el</strong> aceite consagratorio,<br />

y cuando Leá tenía sus hijos, Raj<strong>el</strong> se entristecía,<br />

quizás temiendo que <strong>la</strong> tome Esav “ya que<br />

no tenía hijos”... y cuando tuvo a Iosef pudo afirmar<br />

“Dios me quito mi vergüenza” y no hay vergüenza sino<br />

<strong>la</strong> que provoca <strong>el</strong> incircunciso. Y le l<strong>la</strong>mó Yosef –y<br />

aumentarás-, para que Dios le conceda otro hijo.<br />

Parashat Vayetze, 20<br />

Este midrash proyecta <strong>el</strong> temor de caer en manos de malvados que<br />

tenía Leá, al contexto de <strong>la</strong> esterilidad.<br />

El midrash Tanjuma [Varsovia], nos dice:<br />

“Pero, <strong>el</strong> Santo Bendito Sea, cuando una persona,<br />

<strong>el</strong>eva una oración en voz queda inmediatamente<br />

le oye. ... y así aprendemos de Leá que no tenía<br />

más mérito que esposarse con Esav, y Raj<strong>el</strong> con Yaacov,<br />

pero...Leá estaba sentada en los cruces de caminos<br />

y preguntaba sobre <strong>la</strong>s acciones de Esav y le decían<br />

que era una ma<strong>la</strong> persona, que derramaba sangre,<br />

asalta a los andantes, todo rojo, que hace todas<br />

<strong>la</strong>s abominaciones de Dios. Cuando Leá oía <strong>el</strong>lo se ponía<br />

a llorar hasta que sus ojos se debilitaban, y decía:<br />

Raj<strong>el</strong> y yo salimos de <strong>la</strong> misma matriz, Raj<strong>el</strong> desposará<br />

al justo Yaacov y yo al malvado?<br />

Por <strong>el</strong>lo está escrito que sus ojos eran racot, y vio Dios que Leá “era<br />

odiada”, es decir que odiaba <strong>la</strong>s acciones de Esav, pero Raj<strong>el</strong> que oía <strong>la</strong>s acciones<br />

de Iaacov estaba alegre y orgullosa, y cuando ambas se casaron con<br />

Yaakov, dijo <strong>el</strong> Santo Bendito a ésta que lloró y sufrió por odiar <strong>la</strong>s acciones<br />

de Esav y rogaba ante Mí para que no <strong>la</strong> aleje d<strong>el</strong> justo (Yaakov), a <strong>el</strong><strong>la</strong><br />

le daré primero hijos, por <strong>el</strong>lo está escrito “y vio Dios que Leá era odiada”.<br />

Parashat Vaietze, 4<br />

Aquí los hijos aparecen como compensación por acciones. Leá, oraba. Desde<br />

<strong>la</strong>s profundidades de su dolor. Desde <strong>el</strong> pozo de su congoja. Y su oración<br />

es oída.<br />

El midrash es quien nos rev<strong>el</strong>a otra comparación interesante entre<br />

<strong>la</strong>s dos hermanas. Intenta explicar los silencios y <strong>la</strong>s pa<strong>la</strong>bras a partir de decirnos:

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!