06.12.2012 Views

El martillo y la hoz y otros cuentos - Isliada

El martillo y la hoz y otros cuentos - Isliada

El martillo y la hoz y otros cuentos - Isliada

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

CIENCIA FICCIÓN<br />

—<strong>El</strong> nueve ruso —dijo Cintras.<br />

—Cinco con siete del gordo.<br />

Marquito miró <strong>la</strong> pisto<strong>la</strong> que le acababan de dar y levantó<br />

nueve dedos. —Del americano —explicó.<br />

<strong>El</strong> Cara asintió comp<strong>la</strong>cido. —Tengo, y bueno —dijo—.<br />

Aluminio con acero para todo el mundo, de <strong>la</strong>s rápidas que se<br />

pueden disparar en lo que sea.<br />

Comenzó a sacar cargadores de pisto<strong>la</strong>, que primero miraba a<br />

<strong>la</strong> luz cenital del techo de <strong>la</strong> furgoneta y después repartía o ponía<br />

en el suelo.<br />

<strong>El</strong> Coco y Cintras se pusieron como niños con juguetes nuevos;<br />

Marquito cambió <strong>la</strong> expresión.<br />

—Les voy dando de esto por si se cayó un conecto que tenemos<br />

—explicó <strong>El</strong> Cara—, para conseguir Akás en el camino allá;<br />

más ade<strong>la</strong>nte sabremos si hay o no. Ah, los Akás no son chinos,<br />

son del tiempo de los rusos, pero están en tal<strong>la</strong>.<br />

De repente <strong>El</strong> Cara se calló y miró por una ventana.<br />

—¡Yuzaima! —gritó—. ¿Por dónde tú me estás llevando?<br />

Desde el asiento del conductor respondió una voz de mujer.<br />

—Estoy buscando <strong>la</strong> autovía de Reg<strong>la</strong>, como me dijiste.<br />

<strong>El</strong> Cara agitó <strong>la</strong> cabeza. —¡No hay tiempo! —dijo—. Vamos<br />

por el túnel; coge por el cuarto conducto.<br />

—¿Qué tú quieres hacer en <strong>El</strong> Morro a estas horas? —<br />

preguntó <strong>la</strong> conductora—. Además, nos van a parar.<br />

—En esa carrilera y en este carro, no. Parece de reparticiones.<br />

A <strong>la</strong> salida del túnel nos arreg<strong>la</strong>mos; lo importante es cruzar <strong>la</strong><br />

bahía —<strong>El</strong> Cara se sumergió de nuevo en su saco de equipo.<br />

Mientras, los <strong>otros</strong> hombres cambiaban sus cargadores por los<br />

nuevos. —No me los mezcles, Cintras —pidió <strong>El</strong> Coco.<br />

—Vienen pintados —dijo Marquito—. No hay pérdida.<br />

<strong>El</strong> Coco se dio palmetazos en varios puntos del chaquetón,<br />

comprobando como por instantes el traje se ponía rígido con los<br />

239

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!