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Psicologia recreativa - Konstantin Platonov-

Este libro no es un manual de psicología ni siquiera una exposición popular de verdades muy conocidas hace tiempo. Su autor, notable psicólogo, ha reunido en él numerosas cuestiones que interesan a la juventud, y en relatos cortos, entretenidos y accesibles, ha dado respuestas a ellas desde la posición de los conocimientos modernos. En efecto, ¿a quién no le interesa hoy cómo debe ser el hombre de la futura sociedad comunista; cómo desarrollar la voluntad, la memoria, ser atento; qué es la conciencia, el deber y el amor desde el ángulo de la ciencia psicológica; puede el pensamiento transmitirse a distancia; qué es el sueño; tienen conciencia el perro y la hormiga, y otras muchas cosas?

Este libro no es un manual de psicología ni siquiera una exposición popular de
verdades muy conocidas hace tiempo.
Su autor, notable psicólogo, ha reunido en él numerosas cuestiones que interesan a
la juventud, y en relatos cortos, entretenidos y accesibles, ha dado respuestas a
ellas desde la posición de los conocimientos modernos.
En efecto, ¿a quién no le interesa hoy cómo debe ser el hombre de la futura
sociedad comunista; cómo desarrollar la voluntad, la memoria, ser atento; qué es la
conciencia, el deber y el amor desde el ángulo de la ciencia psicológica; puede el
pensamiento transmitirse a distancia; qué es el sueño; tienen conciencia el perro y
la hormiga, y otras muchas cosas?

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<strong>Psicologia</strong> <strong>recreativa</strong> www.librosmaravillosos.com <strong>Konstantin</strong> <strong>Platonov</strong><br />

manera que simultánea e igualmente puede hacer tantas cosas como sean<br />

necesarias, en tanto que la capacidad del hombre para distribuir su atención es muy<br />

limitada.<br />

En esa discusión ambas partes tenían razón. Todas las ventajas enumeradas de las<br />

computadoras electrónicas frente al cerebro humano son evidentes. Un robot puede<br />

hacer mejor que el hombre las operaciones cuyo éxito se determina por la<br />

velocidad, la fuerza, el aguante, la resistencia hacia los factores exteriores<br />

desfavorables para el hombre, cálculos incluso por la fórmula más compleja, y la<br />

ejecución simultánea de varias operaciones diferentes. Hay que citar dos<br />

argumentos más en favor de la cibernética.<br />

Es indiscutiblemente correcta la tesis fundamental de la cibernética de que<br />

dondequiera que los procesos de dirección transcurran —en un mecanismo o en un<br />

organismo—, y por muy diversos que sean, están siempre subordinados a ciertas<br />

leyes comunes. Los modelos cibernéticos ayudan a comprender mejor el trabajo del<br />

cerebro humano. El método del modelado siempre enriqueció la ciencia.<br />

El segundo, y con frecuencia olvidado argumento, es que la cibernética es una<br />

ciencia muy joven. Como es sabido, se considera que nació en 1948. Por eso no<br />

debemos medir sus posibilidades sólo por su nivel actual.<br />

Pero los versos de Vladímir Lífshits recitados por Lena también contienen la verdad.<br />

No se trata de que la computadora electrónica más compleja tiene unas 10 4 -10 6<br />

válvulas, mientras que el cerebro humano tiene más de 10 10 células nerviosas y de<br />

que la sensibilidad de los analizadores es mayor que en los aparatos existentes. El<br />

cerebro es, en efecto, "el aparato más fino y perfecto en la Tierra", como dijo<br />

Pavlov. Pero esas diferencias entre el cerebro humano y la máquina electrónica, así<br />

como sus dimensiones, son, en lo fundamental, solamente cuantitativas. Mucho más<br />

importante es la diferencia cualitativa.<br />

La técnica electrónica tiene que recorrer un largo camino para hacer una abeja<br />

electrónica y modelar todos sus instintos. Es evidente que la técnica recorrerá ese<br />

camino. Mas existen diferencias cualitativas entre el cerebro humano y la máquina<br />

que nunca serán superadas.<br />

Así como el físico puede decir con seguridad que nadie construirá nunca un motor<br />

eterno, así el matemático puede decir que nadie resolverá nunca con ayuda de la<br />

Colaboración de Sergio Barros 340 Preparado por Patricio Barros

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