06.05.2013 Views

nalgures - Asociación Cultural de Estudios Históricos de Galicia

nalgures - Asociación Cultural de Estudios Históricos de Galicia

nalgures - Asociación Cultural de Estudios Históricos de Galicia

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Juan A. Granados Loureda<br />

bre, siendo acusada por todas partes, no sin razón, <strong>de</strong> traidora y pusilánime, al impedir <strong>de</strong><br />

esta manera que las tropas <strong>de</strong> Sanjuán y Heredia pudieran llegar a tiempo <strong>de</strong> <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r la<br />

capital. Cuando aún permanecía Napoleón sin entrar en la ciudad en su campamento militar<br />

<strong>de</strong> Chamartín, emitió sus célebres cuatro <strong>de</strong>cretos en los que, en un acto <strong>de</strong> pura paradoja<br />

política, <strong>de</strong>claraba abolidos los <strong>de</strong>rechos feudales, suprimido el Tribunal <strong>de</strong> la Inquisición<br />

por ser atentatorio a la soberanía y a la autoridad civil, reducidos drásticamente los conventos<br />

<strong>de</strong> los “monjes holgazanes”, nacionalizando sus bienes y, finalmente, trasladadas las<br />

aduanas interiores, en suma, un ataque frontal a los estamentos privilegiados españoles,<br />

gesto sin duda beneficioso para muchos pero nada valorado por el pueblo por tratarse <strong>de</strong> una<br />

imposición <strong>de</strong>l invasor.<br />

Por su parte Moore, hostigado por el entusiasmo un tanto malsano <strong>de</strong> Frere, quien a la sazón<br />

era amigo íntimo <strong>de</strong> George Canning, algo que no <strong>de</strong>be olvidarse, continuaba tomando las<br />

medidas necesarias para aprestarse a actuar. Tan claro resultaba que Sir John se veía impelido<br />

a mantener su honor ante el ministro plenipotenciario permaneciendo en España todo lo<br />

posible, que los mismos franceses fueron conocedores <strong>de</strong> esta curiosa insistencia. Así, el<br />

propio Soult confirma en sus memorias que: “Era urgente que llegase el Emperador para<br />

salvar Madrid <strong>de</strong> una ruina cierta. Unos cuantos días <strong>de</strong> <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>n hubieran bastado para<br />

causar un mal irreparable. Por otra parte, un ejército inglés se acercaba a Salamanca y se<br />

temía que fuese a socorrer la capital. El ministro inglés acreditado en la Junta Central, el<br />

señor Freyre, insistía con vehemencia al comandante <strong>de</strong> este ejército, Sir John Moore, en<br />

que viniera a ayudar a Madrid” 58 , y más a<strong>de</strong>lante: “Inglaterra estaba representada en la<br />

Junta Central <strong>de</strong> Madrid por un agente <strong>de</strong> espíritu ardiente, el señor Freyre, que se había<br />

<strong>de</strong>jado seducir por la jactancia <strong>de</strong> los españoles. No paraba <strong>de</strong> hablar a su gobierno <strong>de</strong>l<br />

patriotismo español, <strong>de</strong> las victorias y <strong>de</strong> la resistencia que iban a ofrecer a los franceses. El<br />

gabinete inglés se equivocó gracias a este hombre, que fue el responsable <strong>de</strong> la insuficiencia<br />

y la conservación <strong>de</strong> los efectivos establecidos anteriormente” 59 . Decidido pues, a actuar,<br />

mandó Moore regresar a Baird que ya había retrocedido 80 Km hacia Villafranca cuando<br />

ambos conocieron el <strong>de</strong>sastre <strong>de</strong> Tu<strong>de</strong>la y pensaban todavía en la retirada. Entretanto, el<br />

grueso <strong>de</strong>l ejército se preparó para avanzar hacia Valladolid. Poco <strong>de</strong>spués el general fue<br />

informado <strong>de</strong> la caída <strong>de</strong> Madrid, algo que ya esperaba, por lo que <strong>de</strong>cidió continuar con sus<br />

planes <strong>de</strong> batalla como si tal situación no hubiera ocurrido, mientras aún conservara alguna<br />

posibilidad, por muy remota que ésta pareciese. Sin embargo, su carta a Frere fechada en<br />

Salamanca el 12 <strong>de</strong> diciembre muestra con toda viveza el fatalismo que abrigaba Sir John ya<br />

a estas alturas, francamente alejado <strong>de</strong> una verda<strong>de</strong>ra moral <strong>de</strong> combate:<br />

“Los franceses tienen en el norte <strong>de</strong> España entre 80.000 y 90.000 hombres. Corre la<br />

voz <strong>de</strong> que van a llegar más y me lo creo, porque muchas <strong>de</strong> las cartas interceptadas<br />

nombran una séptima y octava división que se está preparando para entrar en Espa-<br />

58 Cfr. en: Las memorias <strong>de</strong>l mariscal Soult, las tropas napoleónicas en <strong>Galicia</strong> 1808-1809. op. cit., pág. 49.<br />

59 Cfr. en: Memorias <strong>de</strong>l mariscal Soult, op. cit., pág. 55.<br />

296 NALGURES • TOMO II • AÑO 2005

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!