Sección Segunda: Los Actores del Conflito - DHnet
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PRIMERA PARTE SECCIÓN SEGUNDA CAPÍTULO 1<br />
Con un panorama un poco más claro gracias a los informantes y documentos de la evaluación sobre PCP-<br />
SL, se desprendió que el terrorismo urbano era utilizado como un instrumento para coadyuvar al desarrollo<br />
de la subversión. Concluyeron que «mientras nosotros podamos controlar el terrorismo en una ciudad va a<br />
dar la apariencia de que todo está tranquilo [...] y podremos trabajar». 204 Sobre esta base, decidieron neutralizar<br />
los aparatos militares de Lima Metropolitana —los destacamentos especiales, zonales y los grupos de activistas,<br />
«O sea, los que llevaban bombas»—. 205 Lograron —insistiendo en ello— debilitar al Comité Regional<br />
Metropolitano <strong>del</strong> PCP-SL. Como conocemos ahora, el resultado de esto fue la progresiva acumulación de<br />
poder, crecimiento y militarización de Socorro Popular, el organismo generado por PCP-SL en Lima, frente al<br />
debilitado Comité Metropolitano. Esto fue evidente hacia el año 1985.<br />
En 1983, la DIRCOTE capturó a los integrantes de cinco destacamentos especiales <strong>del</strong> Comité Metropolitano,<br />
incluyendo a su mando político, un estudiante de la Universidad Nacional de Ingeniería llamado Alcibíades<br />
Chávez Díaz. 206 Esto sucede después <strong>del</strong> atentado perpetrado por los mismos al local principal de Acción<br />
Popular el 22 de octubre, el día que se iba a realizar el Plenario General Departamental de Lima. Como<br />
consecuencia <strong>del</strong> mismo, muere un agente de seguridad y tres miembros de AP quedan heridos. Investigando<br />
lo acontecido, un alférez de la DIRCOTE logra capturar a Chávez Díaz, que tenía todas las cartas de sujeción<br />
<strong>del</strong> «Metro». Éste fue un duro golpe para el Comité Metropolitano. Se prosiguió luego con las capturas de<br />
importantes cuadros de los destacamentos zonales y especiales <strong>del</strong> mismo. La DIRCOTE logró detener sus<br />
acciones por tres o cuatro meses tras haber capturado a varios de sus miembros. Sin embargo, éstos fueron<br />
liberados por los jueces —a quienes se les llamaba «los pantalones mojados»— 207 y se volvieron a reagrupar,<br />
pues no se aceptaron las cartas de sujeción como prueba fehaciente de comisión de <strong>del</strong>ito (DIRCOTE 2003).<br />
Pero no sólo la DIRCOTE logró avances estos años. En diciembre de 1983, la Jefatura de la PIP en Huaraz<br />
—a cargo <strong>del</strong> coronel Héctor Jhon Caro— detuvo a Antonio Díaz Martínez, alto mando <strong>del</strong> PCP-SL desde sus<br />
inicios y quien moriría como consecuencia de la represión al motín de El Frontón en 1986. Este hecho fue resaltado<br />
por el Ministro <strong>del</strong> Interior, quien declaró públicamente que, con la detención de Díaz Martínez, se<br />
lograba por primera vez capturar a una figura prominente <strong>del</strong> PCP-SL. La DIRCOTE impide posteriormente<br />
su fuga <strong>del</strong> penal El Sexto, en medio <strong>del</strong> motín de presos comunes de 1984. 208<br />
Así, la DIRCOTE y otras unidades policiales capturaron —y seguirían capturando— a varios subversivos<br />
que serían liberados posteriormente durante el proceso judicial o gracias a beneficios penitenciarios. Entre<br />
otros, el 20 de julio de 1984, la DIRCOTE detuvo a Laura Zambrano, conocida como la «camarada Meche»,<br />
quien llegó luego a ser parte <strong>del</strong> Comité Central. Asimismo, en abril de 1985, miembros de la unidad detuvieron<br />
a Sybila Arredondo y a miembros de la Asociación de Abogados Democráticos. Meses después, tras una<br />
campaña pública que pedía la liberación de la viuda de José María Arguedas y, en opinión de los jueces, sin<br />
haber logrado pruebas fehacientes sobre su vinculación con el PCP-SL, estas personas fueron puestas en libertad.<br />
Por esa fecha, aún no se sabía nada concreto sobre los cargos que tenían los detenidos y los motivos por<br />
los cuales se reunían. Se sabía de su vinculación con el PCP-SL; pero ningún policía sabía que precisamente<br />
entre ellos se encontraban los siguientes miembros <strong>del</strong> partido: «Vire», el responsable de Socorro Popular;<br />
«Luisa», la segunda llamada Sybila Arredondo; «Germán», cuyo nombre era Hugo Deodato Juárez Cruzatt y<br />
era jefe <strong>del</strong> departamento de propaganda <strong>del</strong> PCP-SL; Emma Rengifo Saavedra, la responsable <strong>del</strong> Comité<br />
Regional Sur; y «Nancy», Margie Evelin Clavo Peralta y que usaba la identidad falsa de Lucy Aydee Aranguren<br />
Gil (Jiménez 2000: 550-551).<br />
A pesar de que fiscales y jueces señalaban una deficiente actuación policial en la etapa de investigación<br />
prejudicial para la actuación de pruebas, ello no significó un esfuerzo adicional de su parte por ahondar en<br />
las investigaciones o llevar un mejor control de las acciones policiales. En realidad, el conjunto <strong>del</strong> sistema<br />
de administración de justicia soportaba una serie de inconvenientes que no fueron enfrentados a tiempo. 209<br />
204 CVR. Entrevista. 23 de agosto de 2002. Coronel PIP (r) Palacios.<br />
205 Ibídem.<br />
206 Ibídem.<br />
207 CVR. Entrevista. 20 de marzo de 2003. Coronel PIP (r) Palacios.<br />
208 CVR. Entrevista. 10 de diciembre de 2002. Teniente general PNP (r) Reyes. En efecto, el general Reyes Roca, segundo director de la<br />
DIRCOTE (enero de 1984 - junio de 1987), recibe como encargo directo de Pércovich evitar que Díaz Martínez escapara. <strong>Los</strong> agentes de la<br />
DIRCOTE lo detienen cuando pretendía escapar alegando ser rehén (CVR. Entrevista. 20 de marzo de 2003. Coronel PIP (r) Palacios).<br />
209 Para un desarrollo más puntual sobre la problemática, véase el capítulo sobre Poder Judicial.<br />
TOMO II PÁGINA 118