Sección Segunda: Los Actores del Conflito - DHnet
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LOS ACTORES ARMADOS<br />
Entretanto, las acciones subversivas se sucedían también en Lima, donde se produjeron, entre otros, atentados<br />
contra la sede de la embajada de los Estados Unidos. Ante la sensación de que había perdido el control<br />
de la situación, arreciaron las críticas contra el gobierno. En agosto se declaró el estado de emergencia en todo<br />
el país, mientras que el Consejo de Ministros declaraba emergencia en Lima y El Callao por sesenta días (decreto<br />
supremo 036.82.IN). El ministro Manuel Ulloa afirmó que existía coordinación o coincidencia entre los<br />
atentados terroristas y los conflictos laborales, aludiendo a las huelgas de construcción civil y otras. La labor<br />
<strong>del</strong> ministro <strong>del</strong> Interior, José Gagliardi, quien llegó a plantear la necesidad <strong>del</strong> diálogo, era crecientemente<br />
cuestionada y diversas fuerzas políticas exigían que las Fuerzas Armadas asumieran el combate contra la subversión.<br />
El análisis de Guzmán apuntaba en la misma dirección:<br />
[…] la situación obliga a que las Fuerzas Armadas se vean obligadas a una mayor y directa participación ante el<br />
fracaso de los operativos policiales. Se debe aplicar con firmeza y decisión la consigna de: quien no teme morir en<br />
mil pedazos, se atreve a desmontar al emperador. 33<br />
La creciente sensación de desgobierno suscitada por el asesinato de funcionarios públicos y los continuos<br />
asaltos a puestos policiales en Ayacucho, precipitaron la decisión <strong>del</strong> ingreso de las Fuerzas Armadas<br />
en la lucha contrasubversiva. El 27 de diciembre 1982, Belaunde dio un ultimátum de 72 horas «para que<br />
los terroristas entreguen las armas» antes de que las Fuerzas Armadas tomaran el control de la zona de<br />
emergencia. De esta forma, el general Roberto Clemente Noel Moral fue nombrado jefe <strong>del</strong> Comando Político<br />
Militar de la Zona de Emergencia y, el 31 de diciembre, dos mil miembros de las Fuerzas Armadas tomaron<br />
posesión de las provincias en emergencia. Las provincias de Huanta y La Mar fueron asignadas a la<br />
Infantería de Marina bajo la dirección <strong>del</strong> comandante Vega Llona. 34 Comenzaba la etapa más cruenta <strong>del</strong><br />
conflicto armado interno en la sierra <strong>del</strong> sur central.<br />
1.4. EL PCP-SL ENTRE 1983 Y 1985<br />
<strong>Los</strong> dos primeros planes militares <strong>del</strong> PCP-SL ―Plan de Inicio de la Lucha Armada y Plan de Desplegar la<br />
Guerra de Guerrillas― transcurrieron, en conjunto, desde mayo de 1980 hasta enero de 1983. En dos años, el<br />
PCP-SL se había instalado sólidamente en las zonas rurales de Ayacucho, contando para ello con su carácter<br />
radicalmente autárquico pero, sobre todo, con la aceptación o la neutralidad de sectores sociales significativos,<br />
especialmente campesinos, persuadidos por el discurso de justicia e inclusión propuesto por los subversivos,<br />
sin imaginar los estragos que la violencia iba a producir en sus vidas en los años siguientes.<br />
La Infantería de Marina —denominada «los navales» por la población local— tomó a su cargo el control<br />
de la provincia de Huanta el 21 de enero 1983. Una de las primeras medidas que la Marina de Guerra aplicó<br />
en Huanta fue agrupar a los campesinos en núcleos poblados y organizarlos en Comités de Defensa Civil, al<br />
estilo de las Aldeas Estratégicas organizadas por el ejército estadounidense en Vietnam y las Patrullas de Autodefensa<br />
Civil de Guatemala. En la mayoría de los casos, la medida provocó resentimientos y una resistencia<br />
pasiva entre los comuneros de estos pueblos, debida no solamente a la incertidumbre económica que implicaba<br />
su mudanza, sino también a la profunda rivalidad que desde tiempo atrás existía muchas veces entre algunas<br />
comunidades que ahora estaban obligadas a convivir.<br />
A pesar de la cruenta actividad contrasubversiva desplegada por los militares, el PCP-SL no se replegó.<br />
Por el contrario, decidió dar un paso a<strong>del</strong>ante, pues Guzmán consideraba que en los primeros dos años de su<br />
lucha armada habían ganado una sólida base social entre el campesinado:<br />
¿Cómo se explica que no nos han podido golpear seriamente, incluso con semejante genocidio? El de 1983, 1984,<br />
¿cómo explican esto? [...] Habría que ver las relaciones que hay con la gente, ese tipo de relaciones que hay. 35<br />
En marzo <strong>del</strong> 1983, el PCP-SL realizó una reunión de Comité Central Ampliado en la cual se acordó llevar<br />
a cabo el tercer plan militar, Conquistar Bases de Apoyo. Se establecieron cuatro tareas políticas: la reorganización<br />
general <strong>del</strong> partido, la formación <strong>del</strong> Ejército Guerrillero Popular, la formación <strong>del</strong> comité organizador<br />
33 Batir 2, Dirección Central <strong>del</strong> PCP-SL, diciembre de 1982.<br />
34 Posteriormente asesinado por un destacamento <strong>del</strong> PCP-SL en 1988 en La Paz, Bolivia.<br />
35 CVR. Entrevista. Base Naval <strong>del</strong> Callao, 29 de octubre de 2002.<br />
TOMO II PÁGINA 41