10.05.2013 Views

Volumen VI – Psicopatología de la vida cotidiana (1901

Volumen VI – Psicopatología de la vida cotidiana (1901

Volumen VI – Psicopatología de la vida cotidiana (1901

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

D.'^ Quien ha tenido <strong>la</strong> oportunidad <strong>de</strong> estudiar por medio<br />

<strong>de</strong>l psicoanálisis <strong>la</strong>s mociones anímicas escondidas <strong>de</strong> los<br />

seres humanos pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cir también algo nuevo sobre <strong>la</strong><br />

cualidad <strong>de</strong> los motivos inconcientes que se expresan en <strong>la</strong><br />

superstición. En los neuróticos —con frecuencia muy inte-<br />

Ugentes— aquejados <strong>de</strong> estados obsesivos y <strong>de</strong> un pensar<br />

obsesivo, se discierne <strong>de</strong> <strong>la</strong> manera más nítida que <strong>la</strong> superstición<br />

proviene <strong>de</strong> unas mociones hostiles y crueles sofocadas.^*<br />

La superstición es en buena parte una expectativa <strong>de</strong><br />

infortunio, y quien ha <strong>de</strong>seado a menudo el mal a otros, pero<br />

a consecuencia <strong>de</strong> haber sido educado para el bien reprimió<br />

{<strong>de</strong>salojó} a lo inconciente tales <strong>de</strong>seos, se inclinará<br />

particu<strong>la</strong>rmente a esperar el castigo <strong>de</strong> esa maldad-inconciente<br />

como un infortunio que lo amenaza <strong>de</strong>l exterior.<br />

Al paso que admitimos no haber agotado en modo alguno<br />

<strong>la</strong> psicología <strong>de</strong> <strong>la</strong> superstición con estas puntualizaciones,<br />

estamos obligados a rozar al menos este problema: si han <strong>de</strong><br />

ponerse en cabal te<strong>la</strong> <strong>de</strong> juicio <strong>la</strong>s raíces reales y objetivas<br />

<strong>de</strong> <strong>la</strong> superstición, si no existen <strong>de</strong> verdad premoniciones,<br />

sueños proféticos, experiencias telepáticas, exteriorizaciones<br />

<strong>de</strong> fuerzas suprasensibles y cosas semejantes. Pues bien; lejos<br />

estoy <strong>de</strong> preten<strong>de</strong>r con<strong>de</strong>nar sin ape<strong>la</strong>ción todos estos<br />

fenómenos, sobre los cuales aun hombres <strong>de</strong> sobresaliente<br />

intelecto nos presentan tantas observaciones <strong>de</strong>tal<strong>la</strong>das, y<br />

que <strong>de</strong>berían ser preferente objeto <strong>de</strong> ulteriores indagaciones.<br />

Cabe esperar, por cierto, que una parte <strong>de</strong> estas observaciones<br />

llegue a ser esc<strong>la</strong>recida por nuestro incipiente discernimiento<br />

<strong>de</strong> los procesos anímicos inconcientes, sin constreñirnos<br />

a introducir variaciones radicales en <strong>la</strong>s opiniones<br />

que hoy sustentamos.^' Y aun si hubieran <strong>de</strong> probarse otros<br />

fenómenos —p. ej., los aseverados por los espiritistas—,<br />

empren<strong>de</strong>ríamos <strong>la</strong>s modificaciones que <strong>de</strong> nuestras «leyes»<br />

^"^ [La sección D apareció por primera vez en 1907, constando entonces<br />

<strong>de</strong> los seis primeros párraios; fue ampliada en subsiguientes<br />

ediciones.]<br />

38 [Véase, por ejemplo, el historial <strong>de</strong>l «Hombre <strong>de</strong> <strong>la</strong>s Ratas»<br />

(1909¿), AE, 10, pág. 182. — En el ejemp<strong>la</strong>r interfoliado <strong>de</strong> <strong>la</strong><br />

edición <strong>de</strong> 1904 (cf. mi «Introducción», supra, pig. 6) se encuentran<br />

estas anotaciones <strong>de</strong> Freud, correspondientes a un lugar algo anterior<br />

<strong>de</strong>l texto: «La ira, <strong>la</strong> furia y <strong>la</strong> consecuente moción asesina son <strong>la</strong><br />

fuente <strong>de</strong> <strong>la</strong> superstición en los neuróticos obsesivos: un componente<br />

sádico, que es adscrito al amor y por en<strong>de</strong> dirigido contra <strong>la</strong> persona<br />

amada y reprimido precisamente a causa <strong>de</strong> ese nexo y a causa <strong>de</strong> su<br />

intensidad. — Mi propia superstición tiene sus raíces en una ambición<br />

sofocada (inmortalidad), y en mi caso ocupa el lugar <strong>de</strong> esa<br />

angustia <strong>de</strong> muerte que emana <strong>de</strong> <strong>la</strong> incertidumbre normal en <strong>la</strong><br />

<strong>vida</strong>...».]<br />

39 [Nota agregada en 1924:] Cf. Hitschmann, 1910 y 1916.<br />

253

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!